El León está en casa: el impactante rugido de San Siro en el regreso de Zlatan Ibrahimovic a Milan

Pasaron 2794 días para su regreso al fútbol italiano. Zlatan Ibrahimovic regresó a Milan en búsqueda de un gran último shock de adrenalina mientras atraviesa los pasos finales de su carrera. Y la recepción en San Siro, estadio en el que supo ser figura, fue espectacular: los hinchas rugieron al corear el nombre del sueco cuando saltó al campo de juego después de siete años y siete meses de ausencia. Un momento tan único como impactante.

De Los Ángeles a Milan sin escalas, los fanáticos lo recibieron a pura efusividad luego de que Zlatan firmara un contrato hasta el final de la temporada, con la posibilidad de renovar por un año más. Pero la vuelta quedó opacada por un insulso partido del Rossonero: Zlatan ingresó a los 10 minutos del segundo tiempo en remplazo del delantero polaco Krzysztof Piatek y no pudo quebrar la barrera del 0-0 en el duelo con Sampdoria por la 18° fecha de la Serie A.

Con este empate, Milán se va cada vez más lejos de la zona alta de la clasificación, ya que está duodécimo, con apenas 22 puntos. Ibrahimovic buscará paliar el notorio déficit ofensivo del equipo entrenado por Stefano Pioli, que anotó sólo 16 goles en 18 partidos del campeonato.

El veterano atacante tocó varios balones, ganó algunos duelos aéreos y aplaudió constantemente a sus compañeros para dar ánimos, pero fue evidente para todos los asistentes al partido que el flamante fichaje no puede hacerlo todo.

"Se puede ver que falta confianza y agresividad para marcar. No somos muy efectivos en el área. Hace cuatro días que estoy acá y voy a tratar de ayudar por todos los medios", declaró Ibrahimovic tras el partido. Sobre el recibimiento que le dedicó la hinchada, el sueco respondió: "Me emocioné mucho. Traté de seguir concentrado para marcar e ir a celebrar como un Dios. El gol vendrá en el próximo partido".

Ibrahimovic llegó en septiembre de 2010 a Milan proveniente desde Barcelona y su último gol había sido el 13 de mayo de 2012 en el triunfo 2-1 ante Novara. En ese tramo de dos temporadas, logró 56 goles en 85 partidos y conquistó el último Scudetto de la institución.

A partir de ese momento, la institución entró en una continua irregularidad de la que todavía no pudo salir: hoy acumula tres jornadas sin poder ganar ni marcar, lleva cuatro encuentros en fila sin conocer la victoria como local y se ubica en el puesto 12 de la tabla del Calcio con 22 puntos, a 23 del líder Juventus.