La selección de fútbol danesa financiará una campaña contra la homofobia

COPENHAGUE (Reuters) - Tras la práctica desaparición de las manifestaciones públicas de racismo en los campos daneses, los jugadores de la selección de fútbol de Dinamarca están tratando de desplazar la atención al combate contra la homofobia escarbando en sus propios bolsillos para financiar una campaña con este fin. El defensa del FC Copenhague Mathias "Zanka" Joergensen, de madre danesa y padre gambiano, dijo a Reuters que él lleva mucho tiempo haciendo campaña contra el racismo en el fútbol y que ahora es el momento de abordar la homofobia. "Se hace mucho hincapié en el racismo, pero no entiendo cómo podemos tener un estadio de 25.000 personas gritando insultos homófobos o sexistas y nadie mueve un dedo", dijo poco antes de un encuentro de la Liga Europa contra los búlgaros del Ludogorets. Joergensen dijo que ayudó a escribir un artículo sobre este asunto para la Asociación de Jugadores de Fútbol danesa y que la idea salió de ahí. "Sencillamente surgió. Tuvimos muchas conversaciones con la comunidad LGBT de Copenhague y pensamos que se trataba de un problema", explicó. "Teníamos el dinero, llevamos a un acuerdo con la Asociación Danesa de Fútbol y pensamos: ¿sabéis qué? ¿Por qué no ponemos los jugadores el dinero? Queríamos que fuera para una gran causa". En vez de repartir el dinero entre los jugadores de la selección, las 667.000 coronas danesas (94.380 dólares) se destinarán a financiar la campaña y organizar visitas a colegios para hablar del problema de la homofobia. "Necesitamos llegar a los jóvenes, conseguir que los niños se involucren. Es un problema culturalmente tan arraigado que no es algo que vayamos a poder cambiar de la noche a la mañana", dijo el jugador de 26 años. "Si podemos llegar a los más pequeños y enseñarles estas cosas, es entonces cuando lograremos marcar de verdad una gran diferencia y cambiar la opinión de cara al futuro". "Se utilizará básicamente para visitas a colegios, eso es lo que más hicimos en la campaña contra el racismo". Además de las visitas a centros escolares, los capitanes de equipo de la Superligaen danesa también llevarán brazaletes de arcoíris durante la temporada. Se pedirá a los aficionados que hagan tifos -mosaicos desplegados en las gradas de un estadio- con arcoíris para los partidos y también hay planes para llevar a cabo despliegues similares en el encuentro internacional con la selección de Alemania que tendrá lugar en Copenhague el 6 de junio. Joergensen, que pasó dos años en el club holandés SV Eindhoven, dice que la homofobia cotidiana sigue siendo un problema, incluso en los vestuarios. "Sigue ahí y esa es la cuestión. Creo que mucha gente utiliza este tipo de palabras y no piensa realmente a toda la gente que puede estar hiriendo con esto". "Estamos excluyendo a mucha gente del fútbol porque no se sienten aceptados aquí y eso es una vergüenza. Se supone que el fútbol es para todo el mundo, sin importar el color, la religión o la raza", dijo. A su juicio, aunque los jugadores gays son más que bienvenidos en el equipo, todavía pasará un tiempo hasta que alguno tenga el valor de salir del armario en Dinamarca. "Mucha gente lo aplaudiría, pero hay quien lo utilizaría de forma negativa", señaló. "(Quien tenga el valor de salir) recibiría muchos comentarios en internet solo por la persona a la que ama. Eso es injusto".