Yahoo Noticias La era Valverde
El nuevo inquilino del banquillo blaugrana ha sido presentado de manera oficial en las oficinas del Fútbol Club Barcelona. Todos sabíamos hace más de un mes quien era el elegido, pero las formalidades legales nos obligaron a esperar hasta hoy para tomarle la foto oficial.
El Txingurri
Se trata de Ernesto Valverde, extremeño, hombre de fútbol, trabajador, talentoso, experimentado y con mucha capacidad.
Si me preguntan por mi opinión, en una palabra les diré: aprobado!
Sin embargo, detrás de esa aprobación, tengo algunas dudas razonables, y por supuesto, los argumentos por los cuales me parece un acierto.
Lo bueno
Empecemos por lo bueno. Valverde es un hombre de la casa, jugó en el Barcelona y fue alumno de Cruyff, quien, entre otras cosas, siempre se refirió de manera muy favorable al Valverde entrenador. El ‘Txingurri’ tiene una mezcla muy interesante de experiencia en el banquillo y juventud, es un hombre que aún no puede considerarse un técnico viejo, y al que le sobran bríos para lidiar con una bestia tan compleja.
Valverde es un trabajador compulsivo, prioriza el buen trato al balón y el fútbol ofensivo, además es un entrenador que le brinda oportunidades a la cantera, y eso es fundamental en el Barcelona; hace falta este detalle desde hace varios años en el club blaugrana.
Valverde es un entrenador curtido en el fútbol español, lo conoce como nadie, ha dirigido al Villarreal, Valencia, Espanyol y Athletic Club.
Todos estos argumentos le convierten en el candidato ideal, tiene todo lo necesario para haber recibido la bendición de la zona noble del Barcelona.
Lo malo
Sin embargo no todo es perfecto, y Valverde tiene un par de detalles que a mí, me generan profundas dudas.
El extremeño nunca ha dirigido un club gigante a nivel mundial, y aunque su conocimiento del fútbol español le permite dimensionar de manera perfecta la envergadura del cargo, de la teoría a la práctica hay un camino largo y traicionero.
El otro detalle que me genera muchas dudas es que Valverde nunca ha manejado un vestuario con la cantidad y calidad que tiene el Barcelona.
Manejar buenos jugadores en equipos de media tabla es importante, pero manejar uno de los dos clubes más grandes del mundo, al mejor jugador del planeta y a alguna que otra leyenda viva del fútbol es un desafío mayúsculo.
Por el momento solo queda sentarse y esperar, sobre la capacidad y el recorrido no queda duda, sobre la ‘muñeca’ para adiestrar un toro bravo quedan muchísimas dudas.
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