La arriesgada decisión de los Raptors que le quitó el campeonato a los Warriors... y detuvo su dinastía

OAKLAND, CALIFORNIA - JUNE 13:  Kawhi Leonard #2 of the Toronto Raptors celebrates his teams win victory over the Golden State Warriors in Game Six to win the 2019 NBA Finals at ORACLE Arena on June 13, 2019 in Oakland, California. NOTE TO USER: User expressly acknowledges and agrees that, by downloading and or using this photograph, User is consenting to the terms and conditions of the Getty Images License Agreement. (Photo by Ezra Shaw/Getty Images)
Los Raptors apostaron todo por fichar a Kawhi Leonard y hoy son campeones de la NBA. / Foto: Ezra Shaw/Getty Images

Las personas que conocen a Kawhi Leonard lo describen como un hombre callado, de pocas palabras, difícil de localizar por teléfono e incluso de hablar con él, pero leal a las personas que le demuestran aprecio.

"Siempre pensé, incluso mientras crecía, que uno debe ir con la gente que te quiera más", dijo alguna vez Leonard a ESPN. "No ir con alguien que no te quiera".

Esa forma de ser de Leonard provocó, sin imaginarlo, el cambio más arriesgado en la historia reciente de la NBA y que ayudaría a los Toronto Raptors a vencer —y detener— a la dinastía en la NBA, la de los Golden State Warriors.

La noche en que los Raptors vencieron en seis juegos a los Warriors en las Finales de la NBA 2019 y se convirtieron en campeones comenzó casi un año antes.

En la campaña 2017-2018, los Raptors fueron el mejor equipo del Este pero de poco les sirvió: LeBron James y los Cleveland Cavaliers los barrieron y eliminaron 4-0 en las semifinales de Conferencia. Fue un punto de quiebre para la franquicia: tercer año seguido que los Cavs los eliminaban en los playoffs y quinto año seguido que no pasaban de la ronda de las semifinales.

La decisión de LeBron James de dejar a los Cavs y su reinado en el Este para mudarse al Oeste con Los Angeles Lakers, les abrió el panorama a los Raptors. Era ahora o nunca. Todo o nada.

El gerente general de los Raptors, Masai Ujiri, dejó a un lado el sentimentalismo y lo apostó todo en un movimiento entre dos All-Stars en julio del 2018: cambió a DeMar Rozan —su líder, su mejor jugador, su estrella, al que habían elegido en el draft del 2009 y habían crecido juntos— a los San Antonio Spurs por Kawhi Leonard —un ex JMV en las Finales de la NBA, con un campeonato, pero que se había perdido casi toda la temporada del 2017-2018 por una lesión en el cuadriceps—.

Hubo un factor que destrabó el movimiento: Leonard se sintió frustrado y molesto con la franquicia de los Spurs después de cómo el equipo trató su lesión. No se sintió querido tras la campaña 2017-2018 en la que solo jugó nueve partidos y forzó su salida de la franquicia al asegurar que no renovaría contrato con San Antonio.

Era una apuesta bastante arriesgada para los Raptors: Leonard tenía solo un año de contrato, no tenía intenciones de firmar una extensión con los Raptors y se convertiría en agente libre, mientras a DeRozan le quedaban dos años más de contrato y una opción de jugador para la campaña 2020-2021.

"Te dicen una cosa y luego hacen otra. No se puede confiar en ellos. No hay lealtad en este deporte. Te venden rápido por nada”, reaccionó DeRozan tras ser cambiado.

Los Raptors le apostaron a conquistar a Leonard con algo simple: un equipo con el que pudiera ser campeón. Y lo rodearon de jugadores para que juntos pudieran competir, un staff médico que le ayudara a resistir físicamente toda la campaña y una ciudad de Toronto que lo recibió con amor.

Ya sin LeBron en los Cavaliers, varios equipos se disputaron el reinado en el Este: los Raptors, Boston Celtics —quienes arrancaron como favoritos—, Milwaukee Bucks y los Philadelphia 76ers.

La fórmula de amor y un buen equipo encajó con Leonard. El escolta respondió con los mejores promedios por juego de su carrera: 26.6 puntos, 7.3 rebotes, 3.3 asistencias en 34.0 minutos. Toronto dosificó el esfuerzo de Leonard y lo limitó a 60 de los 82 partidos de la temporada para que conservara energía para los playoffs.

El objetivo: vencer a los Warriors

Los Raptors terminaron la temporada regular con una marca de 58 juegos ganados y 24 perdidos, como el segundo mejor en el Este. En la postemporada, vencieron a los Orlando Magic, 76ers -con un tiro dramático de Leonard los últimos segundos del séptimo juego- y a los Bucks. Fueron campeones de Conferencia, algo histórico para la franquicia, pero faltaban los Warriors, la cereza del pastel.

Toronto aplicó una estrategia defensiva de limitar a un solo tiro a Golden State en cada jugada de cada partido. El objetivo era limitar la mejor ofensiva de la NBA. Y lo lograron. También la suerte les jugó a su favor: Kevin Durant, el mejor jugador de los Warriors, jugó solo 12 minutos en la serie por lesiones, y Klay Thompson abandonó el juego 6 por una lesión en la rodilla. Ante esto, Stephen Curry no pudo solo. Pero eso no fue culpa del equipo canadiense.

La arriesgada apuesta les salió favorable a los Raptors: Leonard los llevó a ser campeones de la NBA por primera vez en su 24 años de historia y además se ganó el premio al Jugador Más Valioso.

¿Y el futuro?

Ahora, los Raptors le pueden ofrecer a Leonard un contrato máximo de $190 millones de dólares en cinco años. Si firmara con otro equipo, podría firmar por $140 millones de dólares en cuatro años, según las reglas de la NBA.

Cuando los Raptors festejaban su campeonato, a Leonard le preguntaron sobre su futuro: no se comprometió a renovar con Toronto y dijo que lo pensaría más adelante.

Kawhi demostrará una vez más que para él es más importante estar en un lugar donde lo aprecien que todo lo demás, inclusive, el dinero.

Si Leonard decide no seguir con Toronto, algo que parece poco probable, los Raptors podrán seguir su futuro con la certeza de que el cambio más agresivo de la historia reciente de la NBA valió la pena: vencieron a la dinastía de los Warriors y hoy son los campeones de la NBA.