La historia de vida de 'Chimy' Ávila: de ser un ex futbolista a estar en la agenda de Barcelona

El apodo 'Chimy' es un apócope de Chimichurri, aderezo picante que describía algún aspecto de la vida de Luis Ezequiel Ávila. Lo de picante no remite a su condición de goleador ni a sus movimientos en el área, rasgos que muestra desde hace dos años y medio en la Liga de España, y especialmente ahora en Osasuna, donde es la gran revelación, sino a un comportamiento social que lo tenía en el territorio del delito. "La vida era tan complicada que en mi barrio de Rosario yo me estaba yendo para la opción A, sabe, que era lo más fácil. La delincuencia, la mala vida. Podía acceder a algunos lujos, pero no dormía tranquilo", expresó Ávila hace un tiempo en una entrevista televisiva en España.

Una infancia en situación de vulnerabilidad, las inferiores en Tiro Federal de Rosario, club que en 2013 lo denunció por un robo en las instalaciones que llevó a la policía a detenerlo. "Parece mentira que jugadores del club nos hagan esto. Los chicos vienen con muchos problemas sociales y culturales", era la amarga reflexión del presidente Carlos Dávola.