Hermanas se pierden respeto

Gabriel Cruz

CIUDAD DE MÉXICO, septiembre 26 (EL UNIVERSAL).- Dos años separan a Lady Cat de Lilith Dark. Son hermanas, pero cuando suban al ring de la Arena López Mateos se perderán el respeto para disputar el campeonato femenil de la WWS.

Lady es la menor, pero sus ganas de sobresalir son igual o más grandes que las de la monarca Lilith. "Es un reto muy difícil porque llevo una rival complicada, pero me tiene contenta enfrentar a mi hermana. Ella empezó antes, tiene más experiencia, me gustó verla luchar y poco a poco le seguí los pasos. Fue parte de mi motivación".

Recuerda que la lucha libre las atrapó desde pequeñas, cuando su papá las llevaba a la Arena Naucalpan. Ella empezó a entrenar con el Rey Gato en el gimnasio Zeus y debutó hace cuatro años. "El personaje y el diseño de la máscara es de mi maestro. Soy una luchadora aguerrida y hasta el momento he demostrado que estoy capacitada para cualquier reto que venga, como el de esta noche".

Se trata del mayor en su corta carrera, ya que va de por medio un campeonato. "Eso lo hace muy especial. Ella (Lilith) ha crecido mucho y no la llevo nada fácil".