Las cosas que hago por amor: 5 capítulos de Game of Thrones que cambiaron la historia de la TV

Hace 10 años, el mundo de las series de TV cambió por completo con el primer episodio de Game of Thrones, una serie tan grande que cada capítulo parecía una película de una hora.

Esta serie de HBO, protagonizada por Emilia Clarke, Peter Dinklage, Sophie Turner, Kit Harrington, Lena Headey, Nikolaj Coster-Waldau, Maisie Williams (y muchas otras estrellas), estuvo basada en A Song of Ice and Fire, una la serie de libros de fantasía medieval escrita por George R. R. Martin.

Pero además de la increíble producción, ambientación, actuaciones y más, Game of Thrones sentó un precedente al generar la sensación de que ningún personaje principal estaba a salvo, como nos quedó claro en el final de la temporada 1.

En honor al décimo aniversario de la emisión del primer capítulo, te dejamos una recapitulación con 5 de los episodios más impactantes de Game of Thrones, la cual ganó 59 Premios Emmy a lo largo de 8 temporadas.

¡OJO! Si no has visto la serie y tienes la intención de hacerlo, esta nota está REPLETA de SPOILERS.

Ahora sí, vamos con la lista.

Winter is Coming (episodio 1, temporada 1)

El primer capítulo de Game of Thrones nos dejó claro cómo sería la dinámica de la serie: mucha violencia, mucho sexo y muchos momentos inesperados.

Más allá de conocer a varios de los personajes principales (y muchas de sus motivaciones), el momento que nos dejó con en shock fue la última escena, donde vemos que Jaime y Cersei Lannister (hermanos gemelos) tienen una relación incestuosa.

Al ser descubiertos por Bran Stark, el hijo menor de Ned y Catelyn, Jaime decide aventarlo de una torre para intentar matarlo y así evitar que el secreto de su relación sea descubierto por todos.

“Las cosas que hago por amor”- Jaime Lannister, antes de intentar matar a un niño.

Baelor (episodio 9, temporada 1)

Si la televisión y las películas nos han enseñado algo es que los personajes principales siempre están a salvo, pero en el penúltimo episodio de la primera temporada nos llevamos una gran sorpresa.

Después de ser capturado por el ejército de los Lannister, Ned Stark, el Rey del Norte, es llevado ante Joffrey Lannister (Rey de todo Westeros), donde es forzado a admitir que cometió traición.

Ned, quien no quería hacerlo, accedió a admitirlo con tal de permanecer con vida por su familia, pero el Rey Joffrey aprovechó el momento para humillarlo y no cumplir su promesa de perdonarle la vida.

Al final, Ned termina sin cabeza y Game of Thrones nos demostró que probablemente no es buena idea encariñarnos con un personaje.

The Rains of Castamere (episodio 9, temporada 3)

Conforme fueron pasando las temporadas nos dimos cuenta que el episodio 9 de cada una era el que más sorpresas traería.

Al inicio de este capítulo pensábamos que todo saldría bien: Walder Frey parecía haber perdonado a Robb Stark de no haber cumplido su promesa de casarse con una de sus hijas a cambio de que su tío Edmure Tully lo hiciera y así mantener una alianza entre ambas casas.

Pero conforme avanzaba la fiesta después de la boda entre Edmure y Roselin Frey, las cosas comienzan a ponerse raras: los soldados de Frey cierran las puertas del salón y la banda comienza a tocar el himno de los Lannister (enemigos de la casa Stark).

Ahí es cuando Catelyn se da cuenta de la traición, pero para ese entonces todo es muy tarde: Talisa Stark (la esposa embarazada de Robb) es asesinada a puñaladas, a Robb lo matan a ballestazos y una puñalada en el corazón, los soldados del ejército Stark son emboscados y a Catelyn la degüellan.

Además de quedarnos sin 3 de los personajes principales, los créditos del episodio corren sin música, un bonito detalle de HBO para dejarnos aún más mudos.

The Lion and the Rose (episodio 2, temporada 4)

Nos queda claro que cada vez que hay una boda en Game of Thrones, algo malo sucede.

En este momento de la serie, todo parecía ir viento en popa para los Lannister: los Stark estaban muy debilitados, Jaime por fin había vuelto a casa y Joffrey finalmente se casaría con Margaery para sellar la alianza con la casa Tyrell.

Sin embargo, mientras Joffrey aprovechaba el día más feliz de su vida para estar con su nueva esposa y humillar a su tío Tyrion y Sansa Stark (su ex prometida) ante todo el público, decide darle una mordida a su pastel de bodas, una muy mala decisión.

Al morder el pastel, su garganta comienza a cerrarse, su cara se puso morado y la sangre comenzó a brotar de su nariz, muriendo lentamente de asfixia.

Siendo fiel a su rol como villano, lo último que hizo Joffrey en vida fue señalar a Tyrion como el culpable de este envenenamiento, lo que causaría una fractura en la Casa Lannister que sería el inicio del final para esta familia.

The Dragon and the Wolf (episodio 7, temporada 7)

Desde el primer capítulo de la primera temporada estábamos seguros que Jon Snow era el hijo bastardo de Ned Stark, razón por la que siempre lo hicieron el feo.

Pero al final de la penúltima temporada, gracias a los poderes de Bran Stark (alias el Cuervo de Tres Ojos), nos enteramos que Jon no era ningún bastardo.

En un viaje por el tiempo, Bran regresa al momento en el que Ned se encuentra a su hermana Lyanna dando a luz al hijo de Rhaegar Targaryen, con quien se casó en secreto.

Lyanna, quien se estaba muriendo desangrada por el parto, le pide como último favor a Ned que proteja a su bebé llamado Aegon Targaryen.

Después de eso sabemos la historia: Ned regresó a Winterfell con un misterioso bebé el cual dijo que era su bastardo con tal de protegerlo por después de la guerra para quitar a los Targaryen del poder, encabezada por Ned y Robert Baratheon.

Pero Bran, con la responsabilidad de decirle al mundo entero que Jon Snow es el legítimo Rey de Westeros, arruinará la relación de Jon y Daenerys Targaryen (quien buscaba reclamar el Trono de Hierro), iniciando así otro gran conflicto por el poder.