Criticadas por celebrar los goles de manera efusiva tras ganar 13-0 en el Mundial de fútbol

Las jugadoras estadounidenses celebran la victoria 13-0 ante Tailandia (TF-Images/Getty Images)
Las jugadoras estadounidenses celebran la victoria 13-0 ante Tailandia (TF-Images/Getty Images)

Dicen que los goles son amores, y este martes hubo mucho, demasiado, amor en Reims, Francia. Tanto que dolió.

El equipo femenino de fútbol de Estados Unidos batió el récord de tantos marcados en un partido de la Copa de Mundo tras endosarle 13 a Tailandia en su debut en el Mundial de Francia. Todo fueron elogios para el combinado nacional estadounidense en cuanto al juego que desplegaron ante las asiáticas, quienes fueron incapaces de anotar un solo gol. Sin embargo, las críticas también hicieron acto de presencia después de que muchos aficionados increparan a las vigentes campeonas del mundo por haber celebrado todos y cada uno de los goles como si se trataran de una final. No lo era, simplemente era el primer partido de un Mundial.

Principalmente fueron las redes sociales las que convirtieron en el caldo de cultivo de todas las iras con comentarios en los que acusaron a las jugadoras de “abusivas” y de ensañarse con unas rivales mucho más débiles que ellas. Algo que ya se sabía en la teoría y que se demostró en la práctica. Las personas más críticas afirmaron que era innecesario celebrar los goles con tanta efusividad ante un plantel rival que acabó derramando lágrimas tras la derrota.

Los abrazos y los gestos afectuosos se entremezclaran con el éxtasis infinito de todos y cada uno de los goles. Hasta el último, anotado en el tiempo de descuento, gozó de una celebración airada.

Ante estas críticas, varias jugadoras y miembros del cuerpo técnico se defendieron con varios argumentos con los que trataron de no eclipsar una victoria histórica y sin paliativos. La estrella estadounidense, Alex Morgan, quien anotó cinco goles, fue una de las voces más sólidas contra los que criticaron la manera de celebrar los tantos.

Alex Morgan celebra su primer tanto de la Copa del Mundo. (Catherine Steenkeste/Getty Images)
Alex Morgan celebra su primer tanto de la Copa del Mundo. (Catherine Steenkeste/Getty Images)

“Sabíamos que cada gol cuenta en esta fase de grupos y en cuanto a las celebraciones, se trató de una gran actuación del equipo y creo que fue importante para nosotros el que lo celebráramos juntos”, argumentó la ariete a CNN.

Morgan fue una de las jugadoras que consoló a las rivales que estaban más afectadas, algo que consideró más que suficiente tras anotar el máximo número de goles posible en caso de que la diferencia de goles se convierta en un factor de importancia a la hora de pasar a la siguiente fase.

Con 29 años de edad, la goleadora afirmó que tanto ella como el equipo estaban al máximo de sus posibilidades desde hace días, algo que les está dando una gran confianza a la hora de afrontar este Mundial.

En una de sus celebraciones, la cuarta, incluso hizo recuento con los dedos de una mano de los goles que llevaba anotados durante la cita. Le faltaba un dedo libre que acabó utilizando poco después, cuando anotó el quinto ante una floja oposición rival.

Mientras tanto, Jill Ellis, la seleccionadora de EEUU que se convirtió en la primera en ganar dos Mundiales, dejó clara su postura:

“Creo que la mejor manera de ser respetuosos con los oponentes es jugar duro contra ellos”, agregó. “Como entrenadora, no es mi trabajo el atar a mis jugadoras y ponerles las riendas porque esto es lo que llevan tiempo soñando. Esto es un campeonato del mundo. Respeto a Tailandia. Celebro que estén aquí. Nosotros estamos entusiasmados y puedes ir a una Copa del Mundo a hablar de tácticas pero todo es cosa de la mentalidad y de confianza. Así son los partidos, para salir a jugar y a competir. Gran parte de la importancia está en crear una buena racha”, aseveró la Ellis.

La seleccionadora de EEUU, Jill Ellis. (Catherine Steenkeste/Getty Images)
La seleccionadora de EEUU, Jill Ellis. (Catherine Steenkeste/Getty Images)

Este eterno debate en el mundo del fútbol sobre si celebrar o no lo goles de manera efusiva cuando se están produciendo goleadas suele ser constante y siempre acaba con varios argumentos sobre la mesa. Por un lado, el esgrimido por Elli, y es que no hay mejor manera de respetar a un rival que jugando al máximo potencial, mientras que otras personas defienden que aunque está bien mostrar solidez en el juego, no es necesario celebrar tantos goles como si se tratara del tanto ganador en la final de una Copa del Mundo.

En partidos como el de este martes, es tan necesario ganar por la mayor diferencia de goles posible como el ser elegante en la celebración. Las jugadoras estadounidenses no tuvieron ninguna falta de respeto concreta como la que han realizado algunos jugadores de la competencia masculina cuando celebran sus goles. Aunque hay reglas no escritas en el mundo del fútbol en las que cuando los goles caen como la lluvia es bueno tener un poco de empatía con los rivales, lo cierto es que las jugadoras de Tailandia probablemente ni se fijaron en las celebraciones, que ya demasiado tenían con la carga de ver el balón llegar a la red en 13 ocasiones.

Las críticas contra las ganadoras del partido fueron demasiado severas para lo que hicieron, ya que solamente mostraron la alegría de que les estuviera saliendo un partido redondo. ¿Quién le dice a una jugadora que marca su primer gol en un Mundial que no lo celebre? Ya sea el de una victoria agónica o el marcado en el tiempo de descuento tras un 13-0.

Hay a quien le molesta la felicidad del prójimo, pero ése no es un problema de nadie más que de ellos, y hasta este momento no hay ninguna jugadora tailandesa que se haya quejado de las celebraciones.