Fernando Alonso explota enfadado como no recordábamos en años

Que Fernando Alonso está de vuelta en la F1 era un hecho ya hace unas semanas en las que se le veía en forma, pero este sábado ha quedado claramente patentado, y todo por culpa de uno de sus archienemigos, Sebastian Vettel. El duelo del que fuera campeón del mundo con Red Bull y con que estuvo a punto de quitárselo haciendo milagros en Ferrari se volvió a producir al volante, pero esta vez por un movimiento temerario del alemán.

Ocurrió en la Q2, segunda tanda de clasificación. Fernando había hecho el tercer mejor tiempo en la Q1 y venía anunciando grandes cosas, a pesar de un primer intento flojo. El segundo intento prometía y Fernando iba como un tiro para ponerse probablemente entre los cincos primeros, pero en la última curva del trazado de Austria se le puso Vettel por delante, que no venía en vuelta lanzada, por delante, y arruinó por completo su clasificación. Alonso se quedó sin Q3, puesto que ya no tenía más intentos, y con un cabreo que no se le recordaba en años. El enfado fue tal que el audio oficial de la radio ofrecido por la organización tuvo que poner un pitido, pero no hacía falta camuflarlo: los gestos de Alonso con las manos volviéndose loco de furia contra Vettel se vieron perfectamente en las cámaras.

Vettel, mientras, no sabía dónde meterse. Consciente del error que había cometido, puso su coche al lado del de Fernando Alonso y con ostensibles gestos pidió perdón a Fernando. El daño ya estaba hecho. Probablemente no fuera del todo su culpa, sino de su equipo por no avisarle, pero los comisarios habían sido claros antes de la carrera: si no vas en vuelta lanzada, no puedes ocupar esa trayectoria.

Para poner en contexto a la afición, este punto conflictivo del trazado de Austria no es nuevo: no en vano, la semana pasada, donde también se celebró gran premio en el mismo circuito, ocurrió lo mismo pero con otros protagonistas: Yuki Tsunoda boicoteó una de las vueltas de Valteri Bottas y sufrió tres puestos de penalización en parrilla, una sanción que también le será aplicada a Vettel, pero el fin de semana de Fernando Alonso ya ha quedado arruinado: saldrá en la posición 14, con la esperanza de ganar un punto quizás como máximo.

La frustración de Alonso continuaba después de la clasificación, ante la cámaras de Dazn, donde ya lo ve todo perdido para la carrera de mañana, en una valoración un tanto catastrofista.

"Yo creo que ahora da igual todo lo que pase con ellos (hablando de Vettel). Hubiera hecho tercero o cuarto en la Q2 y seguramente quinto o sexto en la Q3, y claro, de salir quinto a salir el catorce hablamos de luchar por muchos puntos a no luchar por ninguno, porque no se puede remontar tan fácil aquí, así que el fin de semana se ha terminado para nosotros ya. Nos lo merecíamos porque el coche iba fantástico hoy".