El irlandés que quiso salvar la vida de Conor McGregor: "Podría estar muerto"

La fidelidad de este seguidor de Conor McGregor no tiene parangón. Daniel Martin es natural de Irlanda y el CEO de la compañía Fantasy. El 6 de octubre, se encontraba en las primeras filas para presenciar ataviado con un saco blanco el combate entre su compatriota y el ruso, Khabib Nurmagomedov. En el momento en que comenzó la batalla campal en la que se vieron involucrados miembros de ambos equipos, Martin no se lo pensó dos veces y saltó al octágono por patriotismo: pensaba que la vida de un McGregor agotado y derrotado corría peligro.

“Estoy decepcionado por no haber actuado más rápido. En realidad, si ese tipo que pegó a Conor en la cabeza lo hubiera hecho en la nuca, aquello hubiera sido fatal para Conor”, afirmó Martin en una entrevista a la publicación, ‘For The Win’. “Podría estar muerto. Pasa continuamente en los clubs nocturnos, golpean a alguien en la nuca y acaba con su vida. Sólo porque eres Conor McGregor no significa que no te pueda suceder. Pensé que iban a matar a Conor y que esos tipos iban a ir a matarlo. No podía permitir que sucediera”.

Este irlandés exitoso en su profesión es un mero aficionado a la UFC y no tiene ni conocimientos ni práctica de artes marciales mixtas. Las imágenes que él mismo publicó en la red social LinkedIn muestran como Martin accede al octágono en un momento en que la puerta queda abierta. Nadie le frena y de ahí llegó a acceder hacia la posición de McGregor, que en ese momento estaba defendiéndose del ataque.

“Cuando subí las escaleras del octágono, no sabía si ir a la derecha o recto. Sólo quería asegurarme de que Conor estaba protegido porque no tenía a nadie. John Kavanagh (miembro del equipo de McGregor) llegó un poco antes que yo y puso a la seguridad alrededor de Conor”, relató Martin en la entrevista. Conor escuchó mi voz mientras le decía que se calmara. Vio que soy de Dublín. Estuve hablando con él y simplemente me quedé con él y empujé a la seguridad de su lado porque no los quería tan cerca. Quería que se separaran un poco de él. Puse una mano sobre Conor y le dije que se calmara y que respirara. Mi objetivo era que se tranquilizara. Lo último que quería es que Conor saliera detrás de los que le atacaron”.

Todavía en la tribuna y antes de saltar al octágono, Martin agarró a Daniel Cormier, otro luchador de UFC que forma parte del equipo de Nurmagomedov. Su intención era que no fuera al octágono a atacar a McGregor y mientras le agarraba, pensó que en cualquier momento, el profesional de las artes marciales mixtas le iba a propinar un puñetazo. Su manera de controlarlo fue repitiéndole una y otra vez que sus hijos estaban delante, que se tranquilizara por ellos.

“Daniel Cormier debería haber tenido más crédito porque controló a Khabib. Si no fuera por él, Khabib hubiera ido a por Conor. Daniel fue un campeón en mantener la paz”, agregó Martin.

En este tipo de situación, ¿qué hizo que Martin, un mero aficionado que jamás había intercambiado una palabra con McGregor y que solamente le admira por sus gestas deportivas, se abalanzara para salvar su vida? La respuesta es el patriotismo, el irlandés sintió que no podía fallar a su compatriota aunque no lo conociera personalmente.

“Pensé que Rusia estaba atacando a Irlanda. Pensé que un puñado de rusos saltaron a por un tipo cansado y magullado por la pelea. Que le estaban atacando por lo que creí que eran unos fans rusos. Tenía que intervenir. Pensé que mi país me necesitaba y fui allí”, apuntó Martin.

Este héroe que dejó de ser anónimo afirmó que el manager de Conor le dejó un mensaje de agradecimiento y que escuchó que el padre del luchador también estaba muy agradecido. Sin embargo, confesó que no había recibido las gracias de McGregor, algo que no le preocupa lo más mínimo.

“Cuando uno de nosotros va a la guerra todos vamos a la guerra. Eso es patriotismo. No fui al octágono a pelear, sino a proteger a un hombre indefenso que podría haber sido agredido de manera dramática”, sentenció.

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