El gran reto de Renato Sanches

Aunque son solo dos partidos los que Renato Sanches ha jugado con el Swansea desde su llegada, de él aun se espera más de lo demostrado hasta ahora.

Sanches debutó el pasado 10 de septiembre en casa ante el Newcastle, y la expectativa generada entre los aficionados de su nuevo club era alta. No acostumbran los aficionados de los cisnes a tener una promesa del fútbol europeo entre sus filas, además campeón de Europa, y menos alguien venido del Bayern Munich con tanto pergamino.

Sin embargo, la expectativa duró muy poco, pues el debut del juvenil portugués fue un fiasco.

Las estadísticas indicaban que en los primeros 28 minutos había perdido la posesión del balón 14 veces, un número bajísimo así hubiera llegado a la ciudad apenas dos días antes. El portugués sería sustituído al minuto 70 en medio de un silencio sepulcral en el Liberty Stadium y uno que otro chiflido. Toda la ebullición generada por su debut se desinflaba ante tan opaca presentación.

Las redes sociales y los memes polulaban mientras algunos expertos llamaban a la calma: era apenas su primer partido.

La segunda prueba era aun más difícil: visitar al Tottenham en Wembley (donde juega mientras reconstruyen su estadio), el equipo de Mauricio Pochettino que presiona por todo el campo y que lleva en la piel el fútbol de posesión.

El resultado final fue un 0-0 donde Sanches desempeñó más labores de taponamiento que de encare, demostrándole a su entrenador Paul Clement que, dependiendo las circunstancias, también puede ser importante sin el balón en los pies. Por lo menos dar una mano.

“Hoy su desempeño fue mejor que la semana anterior”, dijo Lambert tras el juego ante los Spurs. “Hizo algunas cosas buenas de nuevo; más buenas que malas”.

El martes Sanches volvió a ser titular en la victoria 2-0 ante el Reading en la EFL Cup, donde jugó todo el partido por primera vez desde su llegada a Inglaterra.

Sanches, de 20 años, llegó al conjunto galés el mismo día en el que se cerraba el mercado (31 de agosto), proveniente del Bayern Munich, que le pagó 35 millones de euros al Benfica para quedarse con sus derechos deportivos.

La carrera de Sanches ha sido meteórica. No solo se convirtió en el jugador portugués más joven en participar en un evento internacional cuando el entrenador Fernando Santos lo convocó para jugar la Eurocopa con apenas 18 años de edad, sino que también regresó a su país siendo el jugador más joven en levantar el tan preciado trofeo continental luego de que Portugal venciera a Francia en la final.

Era tanto el interés que despertaba la nueva joya del Benfica que el entrenador luso no lo llevó solo de paseo: al final Sanches terminó jugando seis partidos en el torneo, de los cuales tres lo hizo como titular, incluida la final.

Bulo, como lo llaman en casa, es un mediocampista centro por vocación, y quien al pasar de los años se ha tenido que acomodar en distintas posiciones para abriser un campo en el equipo titular.

En su Selección, Santos lo prefiere por derecha. En el Bayern, Ancelotti como mediocentro. Y en el Swansea, por ahora Clement parece preferirlo por izquierda.

No me cabe duda que desempeñar su juego en el Swansea le va a costar mucho sudor, pues por primera vez llega a un club cuya principal prioridad es no descender y donde el sacarla de punta y hacia arriba no es visto como una afrenta más que una necesidad.

En su corta carrera Sanches siempre ha estado acostumbrado a jugar en equipos que proponen y dictan la dinámica del partido, como el Benfica y el Bayern Munich, gigantes en sus ligas. Y ese es el fútbol que mejor le acomoda por sus carecterísticas de buen manejo de balón y regate en el área rival.

En el Swansea las obligaciones serán otras. Recomponer figuras tácticas en el achique antes que buscar que hacer con el balón en ataque.

Eso Sanches lo debe saber ya bien si quiere triunfar en un fútbol tan exigente como el inglés.

También te puede interesar: