El buque de carga impulsado por velas que reducirá las emisiones en un 90%

Los buques de carga transportan aproximadamente el 90% del comercio mundial y suponen también una parte significativa de las emisiones mundiales de gases de efecto invernadero. Cada año, los cargueros trasladan miles de millones de toneladas de mercancías alrededor del mundo, lo que implica un coste ecológico muy alto.

Para ponerle solución a este problema ambiental, una compañía sueca está buscando hacer el transporte marítimo más sostenible con una nueva clase de buques que reducirán las emisiones de forma muy considerable: hasta un 90%.

Aunque desde 2008 la eficiencia energética del sector naval ha mejorado casi en un 30%, el combustible utilizado en estos grandes barcos es realmente contaminante, ya que contiene 2.000 veces más porcentaje de azufre que el combustible diésel que utilizan los turismos. En comparación, 15 buques mercantes, por ejemplo, contaminan tanto como 760 millones de automóviles.

El sector del transporte marítimo ya ha comenzado la transición hacia este futuro sostenible. La Organización Marítima Mundial (OMI) ha adoptado y continúa desarrollando medidas que se alinean con los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS), como reducir las emisiones de gases de efecto invernadero, reducir el contenido de azufre del combustible de los barcos, proteger las regiones polares, o reducir la basura marina, entre otros.

El nuevo buque diseñado por Wallenius Marine en asociación con el Instituto Real de Tecnología de Estocolmo será mucho más ecológico y permitirá solventar el gran reto de reducción de emisiones de gases de efecto invernadero, ya que en vez de combustible utilizará el viento, la más tradicional forma de navegar.

Su nombre es Oceanbird, y según Wallenius obtendrá su energía de las 5 alas de metal de 80 metros instaladas sobre la nave. Además, tendrá 200 metros de largo y 40 metros de ancho, lo que lo convertirá en el mayor barco de vela del mundo, una vez esté terminado.

Se estima que el Oceanbird podrá transportar 7.000 coches, será un 90% más eficiente que otros buques oceánicos.

La única pega es que el Oceanbird no conseguirá ser tan rápido como los barcos tradicionales. Mientras que los buques comerciales que se encuentran actualmente en navegación tardan 8 días en cruzar el Atlántico, el Oceanbird podrá hacer el mismo viaje en 12. Aunque está diseñado para transportar coches, Wallenius planea aplicar la misma tecnología a otros tipos de barcos, como los cruceros.

El Oceanbird estará listo a finales del próximo año y el primer buque será entregado a finales de 2024.

Así pues, aparece una nueva tendencia. El futuro de la navegación se reafirma en el compromiso de reducir las emisiones contaminantes y lograr cumplir los objetivos marcados en la Agenda 2030. El tiempo dirá si estos primeros proyectos van más allá, se consolidan y tenemos un futuro marítimo más limpio y sostenible.

Aunque debemos tener en cuenta que esto solo es un paso más hacia la transición ecológica, no el camino completo. Reducir el transporte de materiales, sobre todo mercancías alimentarias y poco duraderas, debe ser otra prioridad. Fomentar el consumo de productos de proximidad puede ser una solución realmente eficaz para la reducción de estas emisiones contaminantes.

El transporte de mercancías pesadas u otros materiales industriales es inevitable, y por ello la inversión en estos nuevos buques es necesaria. Pero si nos fascinan este tipo de proyectos, debemos recordar la diferencia que podemos marcar con nuestras decisiones diarias y con aquello que está a nuestro alcance.

También de interés:

• Qué son los hidrógenos verde, azul y negro (y por qué se invierten miles de millones en 2 de ellos)

• Por qué fabricar un coche eléctrico seguirá siendo más caro que uno tradicional

• El combustible para aviones está tan barato que se usa en barcos

VIDEO | Mayflower de alta tecnología cruzará el Atlántico

Laotracaradelamoneda

IDNet Noticias