El beso viral de dos tenistas que son pareja dentro y fuera de las pistas

El beso entre la pareja Alison Van Uytvanck y Greet Minnen.
El beso entre la pareja Alison Van Uytvanck y Greet Minnen.

El partido de tenis entre Alison Van Uytvanck y Greet Minnen celebrado durante el torneo WTA 125K de Karlsruhe tenía un componente añadido. Las dos tenistas son pareja dentro y fuera de las canchas y por primera vez se enfrentaban en un partido oficial como contrincantes. Por eso, la victoria de Van Uytvanck tuvo un sabor de lo más agridulce. Ambas se fundieron en un beso cuando finalizó la cita ante la mirada de muy pocos aficionados y en unas imágenes que se han vuelto virales.

Ambas tenistas siempre habían competido juntas en dobles y ésta era la primera cita de Minnen jugaba en individual. De hecho se convirtieron en la primera pareja homosexual en jugar un partido de dobles oficial desde que hicieron pública su relación en el torneo de Wimbledon 2018. El encuentro en el que se enfrentaron esta semana en Alemania fue mucho más que un partido. Se trata de dos de las pocas profesionales del circuito de tenis que han declarado públicamente que son abiertamente gays. Había mucho en juego y aprovecharon la oportunidad de la exposición para su causa con un beso que, además del plano sentimental, también tiene un componente fundamental en sus vidas: su deseo de normalizar las relaciones de personas del mismo sexo en el deporte y en la vida.

Tras el beso, Van Uytvanck retuiteó el vídeo sin añadir ningún comentario. Su voz es una de las más activas en la lucha por la igualdad y tras ser eliminadas en la segunda ronda de Wimbledon de esta edición, no dudó en animar a otras personas a que salgan del armario.

“Apoyo que haya oros jugadores salgan y sean comprendidos, pero yo no puedo hacerlo sola. Cuántos más jugadores salgan, mejor será para el tenis y para otros deportes. Yo lo hice, pero no puedo hacerlo por los demás”, afirmó.

El constante escrutinio social al que están sometidos los deportistas homosexuales - como extensión de las personas que no se dedican al deporte profesional - es total y hacer pública su homosexualidad puede ser visto como un acto heroico para muchos sectores, sin embargo, otros no dudan en expresar su desacuerdo de una manera muy airada. El beso que se dieron en Karlsruhe ha sido un buen ejemplo de las dos maneras de ver esta situación.

Inmersas en una relación sentimental de tres años, su éxito como pareja sobre las canchas también ha sido fructífero. En octubre del año pasado ganaron el Open de Luxemburgo en dobles.

Robbie Rogers (REUTERS/Danny Moloshok)
Robbie Rogers (REUTERS/Danny Moloshok)

“Nos divertimos mucho cuando jugamos juntas. Es divertido jugar con ella. Probamos cosas nuevas que ayudan a mejorar nuestro juego. Nos conocemos perfectamente y eso ayuda” agregó Van Uytvanck.

Generalmente son las mujeres las que más se aventuran a expresar sus sentimientos sin complejos, mientras que los hombres tienen más problemas debido a los estigmas que persiguen los conceptos de masculinidad y la connotación de ser gay. Sin embargo, hay deportistas que tuvieron las agallas de expresar abiertamente su homosexuallidad, como el exjugador de Los Angeles Galaxy, Robbie Rogers; el de la NBA, Jason Collins o el de la NFL, Michael Sam. Ninguno tuvo la, valentía para unos o la falta de decoro para otros, de darse un beso en público.

Van Uytvanck y Minnen lo hicieron, probablemente con la naturalidad de una pareja del sexo o identidad que sea, que acaba de jugar un partido como contrincantes. Recientemente, algunas integrantes del equipo de fútbol de la selección femenina de Estados Unidos, campeonas del Mundial de Francia, también compartieron su alegría sin complejos. Las críticas fueron inevitables, pero la lección de gallardía quedó grabada en la mente de aquellas personas que no se atreven a expresar su identidad públicamente por el miedo al qué dirán.