Copa Libertadores. Enzo Fernández: la joya del semillero de River que se lució en Defensa y Justicia

La fórmula, aunque conocida, se repite y con resultados. Directores técnicos jóvenes que ensayan sus primeras experiencias y futbolistas que pretenden un espacio, una vidriera para enseñar su jerarquía, se entrelazan en Defensa y Justicia. La contratación de Hernán Crespo es una señal del ejercicio que desarrolla el club de Florencio Varela, un equipo que además detecta a futbolistas que están postergados en sus planteles y descubren un lugar atractivo en el Halcón.

La victoria 2-1 sobre Olimpia, un gigante de Paraguay y del continente, fortalece la teoría. Un triunfo que además relanza a un equipo que desde el regreso de la Copa Libertadores logró dos éxitos que lo devuelven a la pelea por una plaza para los octavos de final. Con seis unidades y a dos jornadas para el final, es escolta de Santos, en el Grupo G.

Defensa y Justicia-Olimpia, por la Copa Libertadores: el equipo de Hernán Crespo ganó y sueña con la clasificación

El diseño del actual programa empezó en 2014, año en el que Defensa y Justicia logró el ascenso a primera. Si entre los entrenadores se sucedieron Diego Cocca, Jorge Almirón, Ariel Holan, Sebastián Beccacece, Juan Pablo Vojvoda., clubes como River, Boca, Independiente, Racing son espiados para descubrir qué pieza con escaso rodaje puede ser parte del proyecto. Con los millonarios existe una conexión particular, con nombres que en Florencio Varela no solo se consolidaron, algunos dieron un salto al exterior. El caso de Guido Rodríguez es un espejo con el que encandila el Halcón y seduce a los jóvenes que dudan entre permanecer en un club denominado grande o ejecutar esa prueba. También Barboza, Tomás Martínez y Lucas Kaprof ensayaron esa aventura de norte a sur.

Para el nuevo ciclo, desde Núñez se sumaron Enzo Fernández, David Martínez -900 mil dólares por la mitad del pase-, Franco Paredes y Nahuel Gallardo -hijo del DT Marcelo-; los dos primeros fueron titulares en la victoria 2-1, sobresaliendo el volante Fernández, de 19 años, cuya cesión tiene una particularidad: no tiene cargo y tampoco opción de compra. El juvenil no se salió del radar de Marcelo Gallardo, pero el DT no lo quiere inactivo o jugando en la reserva, si puede hacerlo en la elite y en torneos internacionales. Prolijo para manejar la pelota, pisa el área rival y en el esquema 3-2-4-1 elástico que impone Crespo es junto con el experimentado Benítez uno de los volantes centrales.

Un remate en el poste, en el final del primer tiempo, la acción que más lució para las cámaras y los relatos. Pero el bonaerense, nacido en San Martín, desanduvo con aplomo el desarrollo: preciso en los pases, rápido para achicar espacios y fijar líneas. Tiene el sello de los volantes forjados en River, aunque no le quita el cuerpo al roce si la jugada lo pide. Por esa razón, después de la tarjeta amarilla que recibió en el comienzo del complemento y de una segunda falta que encendió las alarmas, Crespo optó por protegerlo y con el resultado 2-0 reemplazarlo por el experimentado Nelson Acevedo.

A esa altura, Defensa y Justicia se imponía 2-0, después del gol de Washington Camacho -una acción que empezó tras un remate de Benítez que se desvió en Ortíz y derivó en Isnaldo, que asistió al uruguayo-, que con la estocada le quitó impulso a Olimpia, y el tanto de Braian Romero. Los paraguayos tuvieron un inicio más aplomado y si no tomaron la ventaja fue por un error del árbitro chileno Garay -sancionó una inexistente falta de Derlis González sobre Juan Gabriel Rodríguez-, y la falta de puntería de González, un trotamundo que fuera de Paraguay se desempeñó en Benfica, Dinamo de Kiev, Basilea, Santos.

Las lesiones trastocaron y jaquearon planes en los dos equipos: antes de la media hora, Breitenbruch reemplazó a Farías en el Halcón y Arias a Torres en Olimpia; en el segundo tiempo, Hugo Fernández se marchó en camilla, después de un entorsis de rodilla izquierda -aunque los gestos y gritos de dolor pronosticaban que la lesión podría ser más grave-. Sin dudas, las bajas de esta clase es uno de los miedos de los entrenadores: los clubes argentinos, venezolanos y bolivianos no tienen activadas sus ligas, mientras que los países que retomaron la competición tienen una agenda apretada, después de un parate inédito por la pandemia mundial de Covid-19.

La estocada de Romero hizo presagiar un resultado abultado a favor de Defensa y Justicia, que minutos más tarde de ese contraataque que estiró el marcador -lo inició Camacho con un pase a Hachen, el volante hizo la pausa, observó a la izquierda y descargó a la derecha para el goleador-, contó con la expulsión del guaraní Hernesto Caballero, por doble amarilla. Pero de una acción que desperdiciaron entre Acevedo y Miguel Merentiel, Isidro Pitta -juvenil con potencia y despliegue- descontó para Olimpia y generó dudas en el Halcón, que finalizó por celebrar un triunfo ajustado como justo y que le posibilita ilusionarse con los octavos de final. En Ecuador, frente a Delfín, al que goleó hace una semana 3-0, y en Brasil, ante el encumbrado Santos, se jugará las cartas.