La constante intranquilidad de Gerardo Martino como técnico nacional

Abraham Guerrero, enviado

DALLAS, EU., julio 18 (EL UNIVERSAL).- Ni siquiera venir de una victoria sobre Guatemala, le permite al técnico de la Selección Nacional, Gerardo Martino, sentirse más tranquilo en un banquillo cuya silla es tan caliente que ha quemado a muchos de los anteriores.

"El Tata" entiende bien en dónde está sentado y por ello es que previo al duelo ante El Salvador explicó que "en un proceso de Selección de cuatro años no hay un momento de tranquilidad. Si se está bien, es el esfuerzo por seguir estándolo y si no, hay que recuperarse", comentó.

En medio de la vorágine que suele acompañar a su cargo, Martino hizo una reflexión de lo que ha vivido como estratega del Tri.

"En los primeros dos años nos acompañaron los resultados y eso da una sensación de tranquilidad, pero es algo irreal porque en algún momento llega la inestabilidad. Dijeron que si ganábamos la Copa Oro habría tranquilidad y no es así, porque cada que México juega un torneo en esta zona lo tiene que ganar", añadió.

Respecto al partido de este domingo en el que buscarán el primer lugar del Grupo A, aceptó que "será un partido totalmente diferente a los dos anteriores. El Salvador es un equipo que propone mucho el juego desde su arquero, elabora desde atrás y cuando puede ejercer presión alta. Vamos a jugar un partido más dividido en la posesión, probablemente con una parte defensiva no tan férrea porque gustan de jugar más adelantados, con sus dos centrales en mitad de cancha; elaboran bien por los costados, sus laterales pasan bien en ataque. Esperamos un equipo que nos ofrezca mayor dificultad a nuestra parte defensiva".