CDMX: Así convivieron los hinchas del fútbol y la comunidad LGTBI
40 años de marchas, de lucha, de búsqueda de igualdad, de amor por el amor, por la inclusión, por poder ser libres sin ser discriminados. Miles de personas de la comunidad LGBTI inundaron de color la Ciudad de México y en total paz, armonía y respeto compartieron el Ángel de la Independencia con aficionados de la Selección Mexicana que se encontraron en el mismo punto para celebrar la segunda victoria del Tri en Rusia 2018.
¿Qué tienen en común?
El polémico grito de “Eeeeh Puto”, ese que ha sido vetado de los estadios y ha causado grandes multas a la Federación Mexicana de Futbol por catalogarse como homofóbico. No había mejor escenario ni protagonistas para saber de una vez por todas si esta presión al portero rival, sea cual sea la cancha, era motivo de ofensa para la comunidad gay.
Historias como las de María, quien aseguró que después de declararse lesbiana su mamá se alejó de ella, son una de tantas en el ambiente que llevan a sentirse orgullosos de sus preferencias o llegar a la inevitable fatalidad del bullying y discriminación que, en el peor de los casos, llega a la muerte por suicidio o asesinato.
Para sorpresa de muchos participantes en la Marcha del Orgullo Gay, la celebración se llevó de la manera más cordial y colectiva, incluso podría catalogarse como un día histórico en donde ni las multas, ni los comerciales, ni ningún llamado a los aficionados logró lo que hoy sucedió sobre avenida Reforma.
Sábado 23 de junio, el día en que todos enterraron el grito de “Eh Puto” y le dieron la bienvenida al “Eeeeh… ¡MÉXICO!”
Te puede interesar:
Mexicanos celebraron el triunfo de México sobre Corea del Sur