Celebran fin de contratos de ICE con condados para alojar indocumentados

Chicago (IL), 28 may (EFE News).- Activistas y abogados defensores de inmigrantes calificaron este viernes de “gran victoria” el fin del contrato del Servicio de Control de Inmigración y Aduanas (ICE) con la cárcel del condado Butler (Ohio), denunciada por abusos y maltratos a los detenidos.

El alguacil del condado, Richard Jones, anunció esta semana la rescisión, con vigencia inmediata, del contrato de 2003 y el traslado en un plazo de 60 días de los 50 detenidos a otros centros a disposición de ICE.

No se informaron las razones, pero el secretario del Departamento de Seguridad Nacional (DHS), Alejandro Mayorkas, dijo en un reciente memorando sobre los contratos con cárceles de condados y centros privados de detención que el nuevo Gobierno no tolerará "el maltrato de personas en detención migratoria civil, o condiciones de detención deficientes".

Lynn Tramonte, de Ohio Immigrant Alliance, declaró en conferencia de prensa que el DHS quería que el alguacil Jones cumpliera las disposiciones del contrato relativas a ofrecer buena alimentación y cuidado a los detenidos, pero este se habría negado.

“Apoyamos el cierre de esta cárcel, apoyamos la no existencia de estos centros, donde tratan de quebrar el espíritu de los inmigrantes para hacerlos abandonar sus reclamos de asilo y protección”, dijo.

Danya Contractor, del grupo de ayuda mutua Ohio Immigrant Visitation, basado en Columbus, dijo que “vale la pena celebrar” porque también han sido terminados recientemente los contratos de ICE con el Centro de Detención de Inmigración C. Carlos Carreiro, en Massachusetts, y el Centro de Detención del Condado de Irwin, en Georgia.

En su opinión, es difícil terminar los vínculos porque son “muy lucrativos” para los condados, que reciben una tarifa diaria por cada persona alojada.

La activista destacó la “valentía y el coraje” de los detenidos, que han denunciado los abusos y las experiencias vividas en Butler, pese a los riesgos de sufrir represalias, daños físicos y la deportación.

Entre ellos los inmigrantes africanos Bayong Brown, de Camerún, y Ahmed Adem, de Somalia, quienes en diciembre de 2020 denunciaron abusos y maltrato de agentes carcelarios y presentaron una denuncia de violación a sus derechos y libertades civiles.

La denuncia hizo sonar la alarma sobre “abusos racistas horribles y generalizados” que ocurrían en Butler, dijo la abogada Anna Nathanson, del bufete privado Norris Law Group, que colabora en la defensa de los africanos.

El caso todavía está pendiente y los dos siguen detenidos, pero en su opinión el fin del contrato es una gran victoria porque muestra que “la marea está cambiando en contra de las detenciones de ICE”.

Sin embargo, Contractor advirtió que se vive “un momento crucial” porque, ante los plazos perentorios para evacuar a los detenidos de Butler, ICE podría optar por “lo más fácil”, que sería acelerar sus deportaciones.

“Esto dejaría de ser una victoria, porque pueden ser transferidos a una cárcel peor o ser deportados”, dijo la activista, quien reclamó que los detenidos en Butler y otras cárceles de inmigración de Estados Unidos sean liberados.

(c) Agencia EFE