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Argentina - Brasil, por la Copa América: la vuelta a la final del torneo en 14 vuelos y 40.536 kilómetros

De Paul, Paredes, Di María, Lo Celso y Otamendi en un alto durante el último entrenamiento de la selección antes de la final
Prensa AFA

Un recorrido tan fantástico y serpenteante como “La vuelta al mundo en ochenta días”, el viaje mágico que inmortalizó Julio Verne en 1872. En la travesía inédita que transitó la selección argentina hasta llegar a la final, su camino en esta Copa América quedará guardado en los libros del fútbol como una crónica irrepetible. Claro, obligados por una pandemia de coronavirus que puso al mundo patas para arriba. Con los nuevos protocolos, con la necesidad de reinventarse. Con planes que llevaron al equipo a recorrer 40.536,5 kilómetros. A tomar 14 vuelos, siempre inmersos en el sistema de burbuja.

Argentina - Brasil, por la final de la Copa América: horario, TV y formaciones

En Ezeiza, los primeros jugadores empezaron a sumarse al plantel el 24 de mayo. En pos del gran sueño, se instalaron en su ‘universo paralelo’, dispuestos a permanecer encerrados allí por 45 días. Aunque ese plan blindaje no les sirvió de nada una vez que la sede copera se mudó definitivamente a Brasil. Salvo para afrontar la ventana de fechas por las eliminatorias, el 3 de junio contra Chile, en Santiago del Estero (2094,4 kilómetros recorridos a través de dos vuelos) y el 8 de junio frente a Colombia, en Barranquilla (ida y vuelta, 15.318,2 km.).

Entrenamiendo de la selección
Twitter @argentina


Entrenamiendo de la selección (Twitter @argentina/)

La noticia inicial provocó fastidio: era hora de trasladarse y alojarse en el país que registra los datos más dolorosos de la pandemia en América del Sur. Hasta que la Conmebol brindó la opción a las naciones participantes de hacer base en sus lugares habituales. Y a diferencia de los otros equipos, la AFA fue la única que optó por un sistema que le funcionó. Descansar en la casa propia pasó a ser una prioridad. Inicialmente, desde ya, la mudanza constante provocaba riesgos y temores sanitarios más cientos de hisopados. La incertidumbre de afrontar la competencia más antigua de selecciones de fútbol del mundo bajo un itinerario inédito. La maquinaria requeriría de esfuerzo y movimiento, mucho movimiento.

La intimidad feliz de Messi, del mate individual a los 540 minutos sin freno en la Copa América

El primero de los traslados a Brasil se dio para el estreno ante Chile (14 de junio), en Río de Janeiro. El charter, entre los dos viajes, recorrió 5322,6 km. El puntapié en el que Lionel Messi se cargó el equipo al hombro y anotó el gol de un cruce que finalizó 1-1.

El sistema de viajes argentino se modificó levemente entre las fechas 2 y 3 de la Copa América. Tras superar a Uruguay por 1-0 en Brasilia (18 de junio) el plantel se quedó en esa ciudad, ya que a los tres días volvió a jugar allí contra Paraguay (otro triunfo por 1-0). Los dos vuelos demandaron 5707 kilómetros, aunque el equipo regresó al país con la clasificación a los cuartos de final en el bolsillo. Allí le sacó 7 puntos al último de la Zona B, Bolivia, quien sería el próximo rival.

Entrenamiento de la selección
Prensa AFA


Entrenamiento de la selección (Prensa AFA/)

La cuarta fecha le dio una jornada libre a la Argentina, por lo que tuvo un descanso de una semana en el predio de Ezeiza. Volvieron a subirse a dos aviones con destino a Cuiabá para golear a Bolivia por 4-1 (28 de junio). Un trayecto que sumó otros 5380,8 km y les aseguró el primer lugar en el grupo.

En el horizonte, ya por los duelos mano a mano, surgió Ecuador. El destino sería Goiania, la cuarta de las sedes de esta Copa América. Y en el medio, otra decisión importante: tras el vuelo de 2663,5 kilómetros ya no habría regreso hacia nuestro país. La burbuja se sostendría en tierras brasileñas. El 3 de julio, el equipo de Lionel Scaloni goleó al de Gustavo Alfaro por 3-0 y se metió entre los cuatro mejores del certamen. Luego, no tuvo que viajar demasiado para la semifinal frente a Colombia: 208 kilómetros hasta Brasilia. Allí donde las manos de “Dibu” Martínez llevaron a la Argentina a la final.

La imagen que subió Lionel Messi a su cuenta de Instagram: "Juntos".
Instagram Lionel Messi


La imagen que subió Lionel Messi a su cuenta de Instagram: "Juntos". (Instagram Lionel Messi/)

El último destino resultó Río de Janeiro (1182,3 km.). Ahora, en el Maracaná, surge el sueño albiceleste de la soñada vuelta olímpica. Tras el partido, la vuelta al país demandará otros 2659,7 kilómetros hacia Buenos Aires.

En el camino se recordarán los dos encuentros por las eliminatorias y los siete por la Copa América. El esfuerzo de los 47 días en la burbuja. Los 14 vuelos que tuvieron al plantel en el aire durante 40.536,5 kilómetros. En otras palabras, lo mismo que abarca la circunferencia del planeta Tierra.