Ares de Parga, el presidente que divide a Pumas y que todo mundo quiere fuera

Pumas de la UNAM vive tiempos difíciles, lejos de los encabezados y minutos aire en noticieros por buenos resultados o figuras exportadas al fútbol europeo, hoy ocupan espacio los reclamos y exigencias para que Rodrigo Ares de Parga, su presidente, deje el cargo.

Nunca un directivo en Pumas había generado tanta división entre la directiva, los aficionados y la misma Federación Mexicana de Fútbol. En tan pocos años, de Parga ha ido desde señalamientos bochornosos, hasta venta de jugadores que en un momento fueron emblemáticos del club, mostrando sin ninguna discreción, que sólo se debe al Patronato de Pumas y nunca a la fiel afición universitaria.

La crisis felina ha trascendido en redes sociales.

Esa afición que hace muy buenas entradas en el Olímpico México 68 y que hoy en día, lucha por no dividirse, por no dejarse comprar por regalitos para que una parte de las porras, esconda su descontento y calle los “fuera Ares”, que en redes sociales tiene cuentas y hasta hashtags #FueraAres. Una página en el sitio Change.org, reúne firmas para que el directivo deje a los Pumas.

Los números son evidentes desde que Ares de Parga llegó al Pedregal, sus éxitos, prácticamente inexistentes. Este es el sexto torneo corto que juegan los Pumas bajo este mandato con mucha irregularidad, demostrando que la constancia cuesta mucho en el seno universitario.

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En fases de liguilla, de cuatro, han sido eliminados en tres en la primera ronda, solo avanzando frente a Tigres en los cuartos de final del Apertura 2018.

En Concacaf solo disputaron una serie, perdieron 1-4 contra Tigres, 3-0 en Ciudad Universitaria. Más goles en contra.

Los goles en contra se acumularon así en los últimos dos años:
Apertura 2016: Tigres 7-2 Pumas
Clausura 2018: América 6-2 Pumas
Apertura 2018: Pumas 4-3 Tigres
Apertura 2018: América 7-2 Pumas

En Copa MX no ganaron ningún partido de eliminación directa ante conjuntos de la Liga MX, además de la dolorosa derrota ante Juárez. Además, contra el odiado rival, el América, Pumas ha disputado 10 cotejos, perdió seis, empató tres y ganó sólo uno, en la llegada de Bruno Marioni al banquillo felino.

Parece que cada vez que Ares de Parga habla, añade peso a la loza que lleva encima. Su responsabilidad ante los ojos del Patronato universitario, se aleja del compromiso con la afición, como lo demostró en febrero de 2019, cuando aseguró que en un año el equipo tendrá el capital suficiente para comprar a jugadores de mejor nivel al que tiene la actual plantilla.

“El club tendrá a partir del año 2021 dinero para comprar jugadores ‘de a de veras’ y esperamos ser entre quinta y sexta nómina a partir del año futbolístico 2020-2021 del futbol mexicano”, aseguró ante el Patronato.

Los problemas entre de Parga, afición y directiva, no son recientes. Un año antes, en la asamblea del Patronato universitario, se barajó el nombre de Manuel Negrete para sucederlo, situación que sólo quedó en rumor, originado quizá por la participación de Negrete en el plano político.

Rodrigo Ares de Parga no es alguien nuevo en Ciudad Universitaria. Antes de asumir la dirección de Pumas, en mayo de 2016, fungió como Director de Operaciones del equipo durante la gestión de Arturo Elías Ayub y quiso continuar en el cargo a la llegada de Víctor Mahbub a la presidencia del club, pero la responsabilidad cayó en Eduardo Cacho.

Egresado del ITAM, es conocido por su gestión como consultor privado y se le considera cercano a los ex rectores de la máxima casa de estudios, Juan Ramón de la Fuente y José Narro, pero también al actual, Enrique Graue Wiechers.

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Sus relaciones públicas han sido clave para posicionarse en Pumas, Ares de Parga mantuvo una buena amistad con Decio de María mientras era presidente de la Federación Mexicana de Fútbol, quien le permitió seguir ligado al futbol tras su salida de Pumas. Estuvo puestos secundarios en la Comisión Disciplinaria y la Comisión de Controversias. De María lo respaldó por mantener una posición inclinada a las necesidades de las televisoras, muy diferente a la que tuvieron Mahbub y Borja Navarrete.

Algunos jugadores universitarios declararon, anónimamente para reconocidos medios, que la intervención de Ares de Parga en el vestidor, distaba mucho de palabras motivadoras. Durante la dirección técnica de David Patiño, el presidente no ocultaba su disgusto por los malos resultados, pero según elementos de Pumas, era más por las decisiones de Patiño sobre la alineaciones. Era común que de Parga intentaba imponer algunos temas tácticos pues consideraba que el técnico era maleable, alguien a quien puede decirle lo que desea en la cancha y hasta regañarlo frente a los futbolistas en el vestidor.

Por el momento y sin decisión alguna, la afición tiene voces más fuertes, como un gigante de cien mil gargantas que piden al unísono una reestructuración en Pumas tras los resultados no esperados en los últimos años. Los escándalos por supuestos manejos de recursos en venta y compra de jugadores, han manchado al fútbol universitario, al nivel de equipos de la Liga MX que han sido involucrados con evidentes actos de corrupción.

Periodistas y un segmento de la afición se unen en un grito que pide la salida de Ares de Parga, quien lejos de avergonzar a los Pumas, es sin duda un personaje que no debe ser ligado a la cultura universitaria, a la tradición deportiva de la Universidad Nacional Autónoma de México.