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Los Angeles Lakers, el campeón de la NBA: el saludo de LeBron James a su mamá, el Caruso Show y el recuerdo a Kobe Bryant

Una locura. No importó demasiado que fuera dentro de la burbuja. Los festejos de Los Angeles Lakers se multiplicaron. En la burbuja de Disney, con LeBron James en el centro de la escena, pero con la cuota de Alex Caruso, la emoción de Rob Pelinka y el recuerdo permanente de Kobe Bryant. Y también los fanáticos decidieron salir a la calle y en las inmediaciones del Staple Center celebraron el título 17 de la franquicia.

Los Angeles Lakers, campeones de la NBA: la vuelta a la cima de la montaña y la promesa cumplida de LeBron James

En el vestuario la imagen de LeBron James, tirado en el tipo, con un habano y saludando a Gloria Marie James, se adueño de las redes sociales, con la frase: "Hola mamá, hola mamá, acá estoy. Hola mamá". De la misma manera que la aparición de Alex Caruso con una botella de champagne, sin remera, con unas antiparras en la cabeza y el suspiro cuando se sentó para encarar la conferencia de prensa fue una de las imágenes de la noche de los festejos de los Lakers en Orlando.

Rob Pelinka, el vicepresidente y general manager el gran arquitecto de este modelo de los Lakers, se conmovió cuando habló de Kobe: "Parece que tenías razón. Tú me has dado la energía para hacer esto. Me dijiste que en 2017 que en dos o tres años daría vuelta todo. Todavía lo escucho muchas veces en mi cabeza. Me decía que siga firme, que termine lo que empecé. No hay muchos regalos mayores que haber tenido un amigo que me enseñó lo que era la grandeza, lo que era el sacrificio. Que cambió mi vida. Kobe y Gianna han guiado a este equipo durante todo el recorrido".

Explota el vestuario y los Lakers se bañan en champagne. Una botella especialmente diseñada para la ocasión. LeBron se encargó de sumar a los festejos a Jason Kid, uno de los asistentes de Frank Vogel, y el resto se encargó de empapar a cada uno de los que estuvieron adentro de ese vestuario del campeón. Anthony Davis tuvo tiempo de recordar a Kobe: "Desde aquella tragedia, lo único que queríamos era ganar para él. No lo hemos decepcionado. Nos habría encantando ganar la ropa que es en su homenaje, pero esa derrota nos hizo salir al sexto partido más agresivos, con más fuerza en los dos lados de la cancha para asegurarnos de que la final se acababa en el sexto juego. Sé que nos está mirando desde arriba con orgullo. Sé que Vanessa está orgullosa de nosotros, de esta franquicia. Significa mucho para todos. Es duro. Era como un hermano mayor para todos".

Frank Vogel, el entrenador de los Lakers, también se mostró desbordante de alegría y cuando le hablaron de LeBron James, se derritió en elogios: "Es el más grande del universo, nunca he visto a un jugador mejor que él. Cuando estás día a día con él y ves su mentalidad, todo lo que trabaja, los constantes ajustes que hace en su juego, te das cuenta de su verdadera grandeza. Siempre confié en él, pero no ha dejado de sorprenderme durante todo el año".