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ANÁLISIS-Cuando la euforia pase, DT inglés deberá volver a afrontar problemas de fondo

Foto del sábado de los futbolistas ingleses Harry Maguire, Phil Jones y Raheem Sterling junto al DT Gareth Southgate tras la derrota con Bélgica en el partido por el terer puesto del Mundial. Jul 14, 2018. REUTERS/Henry Romero

Por Simon Evans

SAN PETERSBURGO (Reuters) - La selección inglesa de fútbol retornó el domingo a casa rodeada por la euforia de su histórica actuación en el Mundial, pero su entrenador ya tiene la mente puesta en los difíciles desafíos que se avecinan.

La Liga Premier comienza en cuatro semanas, pero de la escuadra de Gareth Southgate, aclamada como una camada de héroes naciones por lo hecho en Rusia, pocos podrán sumar minutos en cancha todos los fines de semana.

En una liga donde la mayor parte de los futbolistas son extranjeros, ser parte de la selección inglesa no garantiza continuidad. Southgate marcó esa dificultad en medio del optimismo por la campaña mundialista que dejó a Inglaterra en el cuarto lugar. "Solo tenemos el 33 por ciento de la liga para elegir. Eso sigue siendo un gran problema para nosotros", dijo.

Así que, pese a todo lo que se dice respecto a que Inglaterra se ha convertido en candidata a ganar la Eurocopa 2020, Southgate sabe que no será fácil para su equipo seguir creciendo.

La situación es particularmente difícil para los jugadores en los clubes más grandes. Marcus Rashford, Phil Jones o Jesse Lingard no tienen garantizado un puesto de titular regular con Jose Mourinho en el Manchester United.

Fabian Delph, John Stones y Raheem Sterling tendrán una dura batalla para jugar en el Manchester City junto a su compañero en Inglaterra Kyle Walker, titular fijo en el lateral derecho.

Sterling puede haber anotado 18 goles en 33 apariciones en la campaña del año pasado en la que el City fue campeón, pero mientras estuvo en Rusia el club contrató al extremo argelino Riyad Mahrez de Leicester City por casi 80 millones de dólares.

El centrocampista Jordan Henderson fue una parte esencial del Liverpool que llegó a la final de la Liga de Campeones la temporada pasada, pero él también enfrenta la competencia del brasileño Fabinho y el guineano Naby Keita.

Y para los jugadores que están emergiendo, las cosas son todavía más difíciles. Ruben Loftus-Cheek, de buenas actuaciones en Inglaterra, ni siquiera sabe dónde jugará. El Chelsea lo cedió a Crystal Palace la temporada pasada y un cambio de entrenador en Stamford Bridge aumenta la incertidumbre sobre su futuro.

Aquellos que pueden confiar en jugar de forma regular están en el Tottenham Hotspur. Harry Kane, Dele Alli y Kieran Trippier son titulares indiscutidos en el equipo.

En los equipos más modestos, el portero Jordan Pickford es claramente el número uno en Everton y Harry Maguire es el corazón de la defensa del Leicester.

Gran parte del optimismo sobre el futuro de Inglaterra se debe al éxito de las selecciones juveniles. El sub-20 inglés fue campeón del mundo, al igual que el sub-17. El equipo sub-19, en tanto, se consagró a nivel continental.

Pero la gran duda es cuánto tiempo tardarán esos jóvenes valores en asentarse en el primer equipo, por lo que la idea de que el recambio llevará a la selección nacional a la gloria está lejos de ser cierta.

(Reporte de Simon Evans. Editado en español por Javier Leira)