Alí Mohamed, un jugador musulmán en un equipo con aficionados radicales en Israel

Tunisian striker Bassem Srarfi (L) vies with Niger's forward Ali Mohamed El Fazaz (R) during the African Cup of Nations Group J Match between Tunisia and Niger at the Rades Olympic Stadium in Rades on October 13, 2018. (Photo by FETHI BELAID / AFP)        (Photo credit should read FETHI BELAID/AFP/Getty Images)
Ali Mohamed El Fazaz (14), durante el encuentro clasificatorio para la Copa Africana de Naciones ante Túnez disputado el 13 de octubre de 2018 (Foto FETHI BELAID/AFP/Getty Images).

“La mayoría de los jugadores del Beitar somos judíos observantes. Es la ciudad más sagrada del mundo. Hemos nacido en ella. Y si tú no naciste en ella, el club te convertirá”.

En 2013, el arquero Ariel Harush era el capitán del Beitar Jerusalén, uno de los equipos más populares de Israel, seis veces campeón nacional (lejos aún del Maccabi Tel Aviv, que posee 22 títulos). Como referente del equipo, su voz se sentía con fuerza dentro del vestuario y fuera de él.

En enero de ese año, el club contrató a los chechenos Gabriel Kadiev y Zaur Sadaev, en una movida sorpresiva del dueño del equipo, Arkady Gaydamak, toda vez que ambos futbolistas eran de ascendencia musulmana, lo cual causó la indignación y hasta disturbios por una parte de los fanáticos, reconocidos a nivel mundial por su radicalismo religioso y por pretender que la plantilla del club que apoya se mantenga “libre” de árabes.

Las declaraciones de Harush, tras ser cuestionado por dicha contratación, quedaron consignadas en el documental Forever Pure, que fue presentado en 2016 en el Festival de Cine de Zurich, Suiza, y han cobrado vigencia en la actualidad, tras conocerse que el Beitar ha adquirido para la temporada 2019-2020 de la Ligat ha'Al, que inicia en agosto próximo, a Alí Mohamed, mediocampista del seleccionado de Níger, proveniente del Maccabi Netanya a cambio de 1.6 millones de euros.

Mohamed, de 23 años, es musulmán, como lo son la mayoría de los 18 millones de habitantes de Níger, un país que en 2002 decidió romper todo tipo de relaciones diplomáticas con Israel, si bien sus ciudadanos no tienen ningún tipo de restricciones para viajar a ese territorio.

Su fichaje fue objetado de manera parcial por La Familia, como se le conoce al sector más radical de la hinchada del Beitar, famosa por sus conductas extremas, que incluso le han costado al equipo pérdidas de punto, algo que a dicho sector de la afición parece no importarle más que sus consignas religiosas. La barra le pidió a Alí Mohamed que se cambiara el nombre, ya que Mohamed es una de las variables de los musulmanes para recordar al fundador del Islam, Mahoma.

“Muerte a los árabes”

Pancartas con consignas de odio han sido exhibidas en repetidas ocasiones por La Familia. De hecho, el Forever Pure que inspiró el título de documental fue visto en las tribunas la vez que los chechenos Kadiev y Sadaev jugaron, paradójicamente con su hinchada en contra.

Supporters of Beitar Jerusalem cheer for their team during a soccer match against Maccabi Umm el-Fahm at Teddy Stadium in Jerusalem January 29, 2013. Hundreds of police officers and stewards secured the Israeli State Cup match on Tuesday in which Premier League Beitar Jerusalem, supported by a group of vehement anti-Arab fans, host Arab side Maccabi Umm el-Fahm. A racist element among Beitar fans caused uproar in the Jewish state on Saturday when they held up banners during a Premier League match to protest at owner Arkady Gaydamak's planned recruitment of two Chechen Muslim players. REUTERS/Nir Elias (JERUSALEM - Tags: SPORT SOCCER SOCIETY)
Los aficionados del Beitar presentes en un partido disputado en 2013 ante el Maccabi Umm el-Fahm, por la Copa de Israel (Foto Reuters/Nir Elias).

En 2009, el Beitar sufrió pérdida de puntos por estos actos racistas y extremistas, en 2007 su campo fue clausurado por los silbidos que se escucharon allí tras un minuto de silencio para recordar al primer ministro israelí, Isaac Rabin, asesinado en 1995 por un judío extremista que estaba en contra de que el funcionario promoviera un acuerdo de paz en la región; por el contrario, la barra gritó a favor del victimario.

El Teddy Stadium, donde juega el Beitar, es una olla de presión con la que deben convivir los rivales del club (33 mil asientos), pero con los chechenos ocurrió el efecto adverso, y con Alí Mohamed, quien ni siquiera ha debutado allí, las cosas no iniciaron de la manera esperada.

El club ha estado siempre ligado a la derecha radical en Israel, y algunos de sus hinchas más reconocidos son Ariel Sharon, Ehud Olmert y el actual Primer Ministro Benjamin Netanyahu, quien de hecho ha participado en algunos de los actos públicos de celebración en triunfos recientes del Beitar -el más reciente fue la Copa de Israel en 2008-2009-.

Cambiar de nombre, ¿cambiar de suerte?

La periodista colombiana Adriana Cooper, quien realizó una maestría en Estudios de Israel de la Universidad Hebrea de Jerusalén, le explicó a Yahoo Deportes que “Para el judaísmo, los nombres son muy importantes, es un componente de tu destino, tu futuro, tu suerte, y la gente le gasta tiempo a elegir su nombre. Tener un nombre o darle nombre a las cosas es permitir que existan y tener propiedad sobre ellos”.

Sobre la solicitud de la hinchada del Beitar para que Alí Mohamed se cambiara el nombre, Cooper señaló que quizá con esta petición los hinchas pretenden que el futbolista se sienta “más propio” del club que lo ha contratado; “en Israel la gente se puede cambiar el nombre cada siete años, pues dicen que quien cambia su nombre, cambia su suerte”, matiza la comunicadora.

El nigerino disputó 32 encuentros con el Maccabi Netanya en la temporada 2018-2019 (ningún gol, 14 tarjetas amarillas y una roja), y con su seleccionado jugó las clasificatorias para la Copa Africana de Naciones 2019, torneo para el cual el país no obtuvo cupo al quedar en el tercer lugar de grupo J, en el que mandaron Túnez y Egipto.

Justamente ante Egipto, Mohamed estuvo los 90 minutos en el último compromiso frente a Egipto, el cual se saldó con empate 1-1 en Niamey, capital de Níger.

El Maccabi Netanya concluyó la temporada 2018-2019 en la cuarta ubicación de la Ligat ha'Al con 53 puntos, a 36 unidades del ganador, el Maccabi Tel Aviv.

Mohamed llega al Beitar, club que en 2006 fue dirigido por el argentino Osvaldo Ardiles -en una de las primeras movidas de Gaydamak por convertir en grande al equipo-, y que concluyó el año en la séptima casilla, con 43 puntos.