Anuncios
Elecciones México 2024:

Cobertura Especial | LO ÚLTIMO

Murió Mino Raiola: de lavar platos en una pizzería a mover estrellas a su antojo

El famoso agente de futbolistas Mino Raiola junto con uno de sus representados, Zlatan Ibrahimovic, en la Copa del Mundo de Rusia 2018.
VI-Images

El mundo del fútbol se sacudió con una triste noticia vinculada a un personaje muy pintoresco. El neerlandés/italiano Carmine Raiola, popularmente conocido como “Mino” Raiola, emblemático representante de futbolistas de la súper elite como el sueco Zlatan Ibrahimovic, el noruego Erling Haaland y el francés Paul Pogba, entre otros, murió este sábado 30 de abril a los 54 años. La noticia quedó confirmada en su cuenta oficial con un tuit.

“Con infinito dolor, compartimos el fallecimiento del agente de fútbol más cariñoso e increíble que jamás haya existido”, dice el mensaje en @MinoRaiola. Y agrega: “Luchó hasta el final con la misma fuerza que puso en las mesas de negociación para defender a nuestros jugadores. Como de costumbre, Mino nos hizo sentir orgullosos y nunca nos dimos cuenta”.

GUÍA | Los pasos que tienes que seguir para poder ver un contenido no disponible por tus preferencias de privacidad

Desde enero pasado las versiones indicaban que había ingresado en el Hospital de San Raffaele, de Milán, y que había sido intervenido por problemas pulmonares. Sin embargo, en ese momento, desde las redes sociales del empresario se comunicó que Raiola había sido “sometido a controles médicos ordinarios con necesidad de anestesia. No ha habido ninguna intervención de emergencia”. Sin embargo, pocos meses después, se confirma la noticia de su muerte e impacta en el fútbol.

Mino Raiola, agente de Paul Pogba, Zlatan Ibrahimovic entre muchos otros, ha fallecido a los 54 años.
Mino Raiola, agente de Paul Pogba, Zlatan Ibrahimovic entre muchos otros, ha fallecido a los 54 años.

Con el fallecimiento de Raiola se genera una situación de cierta incertidumbre con respecto al futuro de varias de las estrellas que representaba. Puntualmente, la más importante en la actualidad, la de Haaland: el atacante, objetivo de Real Madrid, Manchester City y Barcelona, entre otros, está dispuesto a dejar Borussia Dortmund en el verano europeo y era el agente italiano el que le estaba llevando las negociaciones. Ahora, el futbolista y su entorno tendrán que ver de qué manera siguen negociando.

Haaland no es el único afectado profesionalmente por la muerte de Raiola. En una situación similar se encuentra Pogba, que finaliza su contrato con Manchester United y tenía previsto emigrar a Juventus, Real Madrid o Paris Saint Germain. Desde ahora se abre un nuevo escenario en las negociaciones.

Raiola había nacido el 4 de noviembre de 1967 en Nocera Inferiore, una comuna de Salerno, al sur de Italia. Al año, sus padres emigraron a Haarlem, en los Países Bajos, donde creció y jugó en el equipo juvenil del club local de fútbol, el HFC Haarlem. En una entrevista con Financial Times, Raiola relató algunos momentos curiosos de su vida, contando cómo paso de lavar platos en la pizzería familiar (su padre había sido mecánico en Salerno) a convertirse en un súper agente de futbolistas.

Mino Raiola, famoso agente de futbolistas.
Mino Raiola, famoso agente de futbolistas.

Mino Raiola, famoso agente de futbolistas.

“Mi padre trabajaba 18 o 20 horas al día. Con 11 o 12 años me fui a trabajar con él para llegar a conocerlo. Él estaba en la cocina, así que..., ¿qué podía hacer? Podía lavar los platos. Todavía me gusta lavar los platos. Me da una especie de paz limpiar cosas, ves el resultado inmediato de tu trabajo”, narró el manager en aquel momento. Mientras que en ilsecoloxix.it, amplió: “Mi familia tuvo primero una tienda de sándwiches, luego una pizzería, luego un elegante restaurante. Hemos ganado premios. El secreto era usar productos italianos, somos de Agri, la tierra de los tomates de San Marzano: 35 mil personas y 800 empresas que hacen tomates pelados, es el 85% del mercado mundial”.

De su padre aprendió a “no rendirse”. Sumamente hábil y perspicaz, ayudaba como “intermediario” en la pizzería cuando los clientes neerlandeses no entendían el idioma italiano de los mozos. Por pedido de su madre estudió algunas materias de derecho y aprendió varios idiomas (hablaba siete). Pero también se dedicó a ampliar la pizzería familiar, compró y vendió una franquicia de McDonald’s. Hasta que se convirtió en director deportivo del HFC Haarlem, aunque esta nueva función tuvo sus curiosidades. Él mismo las confesó: “Todos los viernes el presidente de Haarlem venía a comer a la pizzería con su mujer. La tercera esposa. Siempre le dije que no entendía nada de fútbol. Un día me toma y me dice: ‘Escucha, pruébalo tú mismo’. Me nombró director deportivo. Ahí me topé con el problema de los problemas: para hacer un equipo necesitas dinero. No los teníamos”.

Pero aquello no fue terminó siendo un problema y ese mundo lo encandiló. Al tiempo comenzó a trabajar en una agencia de representación de futbolistas en los Países Bajos (su primera operación fue el traspaso del neerlandés Bryan Roy, de Ajax a Foggia). Claro que consiguió su primer gran impacto con la negociación del fichaje del neerlandés Dennis Bergkamp a Inter. “Estábamos entre los años ochenta y noventa. Italia era un paraíso futbolístico, nadie quería ir a Barcelona o Manchester en ese momento”.

Con la representación del checo Pavel Nedved volvió a sacudir el mercado del fútbol. El mediocampista le hizo ganar millones de dólares, aunque no tantos como Ibrahimovic. El sueco quedó deslumbrado por la personalidad de Raiola cuando lo conoció. “¿Quiere ser el mejor del mundo? Venda sus coches, sus relojes y comience a entrenar tres veces más duro. Sus números son una basura”, dicen que le expresó el agente al delantero durante las primeras conversaciones. Lo que ocurrió luego es famoso: Ibrahimovic pasó de Ajax a Juventus por 16 millones de euros, de la Juve a Inter por 25 millones, del club de Milán a Barcelona por 46 millones, del Barça a Milán por 24 millones, de Milán a París Saint Germain por 20 millones y luego pasó libre a Manchester United. En total, sus traspasos movieron aproximadamente 131 millones de euros.

El sistema de Raiola para las negociaciones era muy “artesanal” y se basaba, sobre todo, en su carisma y personalidad. No temía enfrentarse con los dirigentes más poderosos del fútbol, pero a muchos los terminaba hechizando. Sus representados lo amaban. A propósito de su vínculo con Ibrahimovic hay una anécdota, contada por el diario El País, que lo ilustra. “La primera reunión fue en un hotel. Ibra se presentó con su reloj de oro y la campera de cuero Gucci. Aparcó su Porsche Carrera turbo en la puerta y entró esperando encontrarse a un tipo vestido con traje de raya diplomática y corbata. Raiola llevaba una camiseta Nike, jeans y una barriga como la de Tony Soprano. Había pedido más sushi del que podía comerse un equipo de fútbol y escuchó todo lo que tenía que decir su futuro representado mientras se daba un atracón. Cuando todo parecía ir bien, sacó unos papeluchos impresos y comenzó a enumerar las estadísticas de grandes delanteros. ‘Inzaghi, 25 partidos y 20 goles; Vieri, 27 partidos y 24 goles; Trezeguet, 24 partidos y 20 goles; Ibrahimovic, 25 partidos y 5 goles. ¿Crees que podré venderte con unas estadísticas como estas? Deshazte de tus coches y tus relojes y empieza a entrenar duro’, le dijo. El Porsche Carrera, por cierto, lo terminó conduciendo el padre del agente”.

Según un informe de Forbes en 2020, Raiola ganó 84,7 millones de dólares en comisiones por los traspasos de sus representados, especialmente por ser el cerebro detrás de la transferencia récord de US$ 140 millones de Pogba a Manchester United en 2016. Escribió La Gazzetta dello Sport: “La desregulación puesta en marcha por la FIFA de Joseph Blatter en 2015 ha convertido el mercado de fichajes en una jungla. De esta selva, Raiola fue el maestro indiscutible”.

El mundo del fútbol pierde a un personaje que, sin dudas, nunca pasó inadvertido.

VÍDEO | Ragnick: "El Manchester United debería identificar a jugadores como Haaland en el futuro"