Mundial Sub 20: Luka Romero, el “europibe” récord en precocidad que pudo jugar para México y España, pero ayer brilló en la selección argentina

El festejo de Luka Romero, autor de un gran gol en el triunfo de la selección argentina por 3-0 sobre Guatemala en el Mundial Sub 20
El festejo de Luka Romero, autor de un gran gol en el triunfo de la selección argentina por 3-0 sobre Guatemala en el Mundial Sub 20 - Créditos: @Fabián Marelli

SANTIAGO DEL ESTERO (Enviado especial).- Una vez que la irrupción furiosa de Lionel Messi enterró de forma permanente la búsqueda constante por el “nuevo Maradona”, el capitán argentino se convirtió en el nuevo parámetro sobre el cual fueron comparados incontables jugadores jóvenes que surgieron desde entonces. En los últimos 15 años el concepto no cambió; simplemente adquirió el nombre de “nuevo Messi”, una mochila que acompañó a futbolistas de múltiples orígenes y niveles de éxito, la mayoría de las veces representando una carga casi imposible de sobrellevar. Luka Romero fue uno de los ejemplos más recientes, pero con una particularidad: él era “el Messi mexicano”. Pero de mexicano, solo el pasaporte: ahora, y cada vez que tuvo la oportunidad, se lo vio siempre portando la camiseta de la selección argentina.

En la actualidad, el delantero es reconocido como uno de los líderes de los denominados “europibes”, los futbolistas argentinos que emigraron al Viejo Continente muy jóvenes, sin pasar (o casi sin hacerlo) por el fútbol argentino. Y ante un público que, en líneas generales, lo pudo ver muy poco en los inicios de su carrera, está generando una impresión más que positiva en el Mundial Sub 20, que confirmó con un golazo en la victoria por 3-0 sobre Guatemala cuando recibió sobre la izquierda, vislumbró un espacio para rematar y sacó un zurdazo desde el borde del área que superó al arquero Jorge Moreno. La expectativa era ya palpable para el segundo encuentro del grupo A: su entrada en lugar de Matías Soulé fue recibida con cálidos aplausos en el estadio Madre de Ciudades, y aquel tanto retribuyó el cariño previo. Pero mucho antes de convertirse en un europibe, o siquiera que naciera el concepto a mediados del año pasado, el viaje de hoy futbolista de Lazio en el fútbol ya había sido sumamente extenso.

Hay una razón muy concreta por la cual a Romero se le catalogó como el “Messi mexicano”: nació allí, en Victoria de Durango. Pero quienes lo conocen con profundidad entienden que nunca estuvo en debate su identificación con la Argentina. Específicamente, con Quilmes. Su familia está intrínsecamente ligada al Cervecero: su padre Diego dio los primeros pasos de su carrera futbolística allí como compañero de Rodrigo “Chapu” Braña, en una carrera que luego lo llevó por el ascenso de México y España; fue mientras militaba en Alacranes de Durango cuando nació Luka y su hermano mellizo, Tobías. Su abuelo paterno, José, es una figura trascendental del fútbol juvenil en Quilmes, al que se unió en 1984, y fue durante 22 años representante de las inferiores del equipo ante la AFA y pasó 26 también a cargo del fútbol amateur. Pero incluso la familia de su madre también tiene vínculos: tanto su abuelo Alfredo Mezzana como sus tíos Flavio y Alfredo llegaron a la reserva, aunque no consiguieron debutar profesionalmente.

El amor por el Cervecero fue fácilmente transmitido al delantero a pesar de la distancia, algo que dejó claro en agosto de 2020: “Soy de Quilmes, porque ahí jugó mi papá. Cuando fui allá lo que más me gustó fue la pasión, cómo se viven los partidos. Fui a ver Quilmes-Racing, también a la Bombonera y a la cancha de River para ver a Quilmes”, contó en una entrevista. El amor fue rápidamente retribuido por el club, que lo nombró socio honorario y embajador internacional de la juventud ese mismo año. Pero su carrera futbolística se desarrolló muy lejos de donde lo hicieron sus antepasados.

El día en que un joven Luka Romero impresionó a Dani Alves

A medida de que su padre fue desarrollando los últimos años de su carrera en el ascenso español, fue ahí donde se radicaron permanentemente los Romero, y donde Luka se inició como futbolista. Su primer acercamiento llegó con apenas siete años, cuando se probó en las categorías infantiles de Barcelona. El impacto que dejó fue muy positivo, pero el club no lo pudo contratar al ser demasiado joven para mudarse por su cuenta a la pensión y tampoco poder trasladar a su familia a Cataluña. Aún así, aquel rechazo no impidió que Dani Alves quedara impresionado con él cuando lo encontró, poco tiempo después, jugando en las playas de Formentera. Cuando se sumó a jugar con él, los paparazzi se acercaron a fotografiarlo, a lo que el brasileño señaló: “Sáquenle las fotos a él, es Leo Messi”.

Luka pasó los siguientes años jugando más cerca de su hogar, en la Peña Deportiva Sant Jordi, de Ibiza. Allí despertó el interés de varios clubes de renombre en el fútbol español como Sevilla, Villarreal y nada menos que Real Madrid, pero por motivos logísticos y de desarrollo eligió seguir su carrera en Mallorca, club que le ofreció un contrato juvenil en 2015, con apenas 10 años. Un año más tarde se le sumaría Nicolás Barattucci, también hijo de argentinos y más tarde jugador de la selección Sub 17, con quien comparte una gran amistad.

Luka Romero festeja con la selección argentina Sub 15 en 2019; metió un par de goles, ante Chile y Uruguay y fue subcampeón del Sudamericano de la categoría
Luka Romero festeja con la selección argentina Sub 15 en 2019; metió un par de goles, ante Chile y Uruguay y fue subcampeón del Sudamericano de la categoría

El crecimiento que vería Romero en aquellos primeros años sería meteórico, y pronto llegó la primera chance de elegir el país que representaría internacionalmente. Mientras que su hermano Tobías, que milita en el ascenso español, eligió a México, Luka nunca tuvo dudas de jugar para la Argentina, y su primera chance llegó en el Sudamericano Sub 15. Con Valentín Barco, Agustín Giay y Federico Gomes Gerth como compañeros, hoy todos integrantes del plantel mundialista en el Sub 20, el delantero fue uno de los jugadores destacados del equipo: convirtió dos goles en la campaña que llevó a la selección a la final, donde cayó por penales ante Brasil, en 2019.

No pasaría demasiado tiempo hasta que llegaría nada menos que su debut profesional, y aquello se convertiría en una ocasión histórica. Para mediados de 2020, su rendimiento en el equipo B de Mallorca fue tan descomunal que el entrenador Vicente Moreno comenzó a incluirlo en los entrenamientos del plantel superior, al punto en que pidió un permiso especial a la Liga española para que pudiera hacer su presentación con menos de 16 años. Y aquel 16 de junio llegó el día, cuando entró en el minuto 37 del segundo tiempo nada menos que contra Real Madrid. Tenía apenas 15 años y 219 días, y se convirtió nada menos que en el futbolista más joven de la historia del fútbol europeo, superando la marca que había establecido el francés Kalman Gerencseri en 1960.

El debut de Romero en Mallorca

A pesar de aquel hito, el camino de Romero se volvería más rocoso desde entonces. Mallorca descendió a la segunda categoría al final de la temporada 2019/20, y el delantero se perfilaba para tener un papel importante en la lucha para regresar a la élite, pero una disputa contractual hizo que su participación se limitara a tan solo seis partidos más para el primer equipo; pasó el resto de su último año en la Palma de nuevo en el equipo B. Eso no frenó a varios grandes equipos europeos en mostrar interés por él, y su nuevo destino fue Lazio, donde rápidamente se convirtió también en el futbolista más joven de la historia del club. Las exigencias en la capital italiana, asociadas también a su corta edad, limitaron su participación a un total de 21 partidos hasta hoy, pero sí tuvo rodaje en las competencias europeas en la presente campaña, e incluso sumó su primer gol en Serie A.

En paralelo, sus lazos con la selección argentina se fueron haciendo cada vez más firmes. No llegó a representar al Sub 17 por el impacto del Covid-19, pero fue parte de aquella sorprendente convocatoria de Lionel Scaloni para la mayor en marzo de 2022, cuando se sumó a otros jugadores desarrollados en Europa como Alejandro Garnacho, Nicolás Paz y los hermanos Carboni, entre otros. Lazio no le permitió jugar el Sudamericano Sub 20 que culminó en eliminación, pero cuando se supo de la baja de Garnacho para el Mundial, fue el elegido por Javier Mascherano para entrar en su lugar.

Los jugadores argentinos festejan con Luka Romero después de su gol contra Guatemala, en el Mundial Sub 20
Los jugadores argentinos festejan con Luka Romero después de su gol contra Guatemala, en el Mundial Sub 20 - Créditos: @Fabián Marelli

Su puesto es el más competitivo de todos en esta Copa del Mundo, pero en cada oportunidad que tuvo demostró argumentos suficientes para plantar dudas en la elección del equipo. En el debut contra Uzbekistán, a pesar de que la albiceleste bajó el calibre ofensivo en el segundo tiempo, fue uno de los más destacados cuando ingresó a los 22 minutos, moviéndose por todo el frente de ataque y buscando siempre la pelota. Su segunda presentación fue todavía más fructífera, y sumado a su golazo a los 20 de la segunda mitad también despertó asombro y aplausos de los hinchas santiagueños con otro remate suyo que reventó el travesaño, en tiempo cumplido.

Escuchar elogios de todo un estadio es una experiencia nueva para él, y su sonrisa constante después del pitazo final dejó claro que quiere acostumbrarse a esa sensación: “Cuando estás en esta cancha te dan ganas de correr más y más, te da mucha fuerza”, contó en la zona mixta después del triunfo sobre Guatemala. “Es algo muy lindo ver a toda esta gente entusiasmada por nosotros. Estamos muy agradecidos y contentos”. La sensación de disfrute e idilio por vivir un Mundial en el país es aparente en sus palabras y sus expresiones. Nunca hubo chance de convertirse en el “Messi mexicano”.