En el Mundial Sub 20 brillan las butacas vacías, pero la AFA y la FIFA tienen razones para pensar que la asistencia de público es una buena noticia

Una escena del partido entre Honduras y Gambia, que jugaron en Mendoza ante algo más de tres mil espectadores
Una escena del partido entre Honduras y Gambia, que jugaron en Mendoza ante algo más de tres mil espectadores - Créditos: @Natacha Pisarenko

Hasta este miércoles, la mitad de los partidos del Mundial Sub 20 tuvieron de promedio menos de 10 mil espectadores en las tribunas. Con una capacidad de casi 40 mil hinchas por estadio, y sin contar los encuentros de Argentina, el torneo muestra menos de un cuarto de las canchas llenas. La AFA, sin embargo, no se preocupa: entiende que es una cifra lógica para la fase de grupos, en la que los partidos no son eliminatorios. En el comité organizador están sorprendidos, en cambio, por el boom de los hinchas argentinos. El equipo dirigido por Javier Mascherano agotó los tickets en Santiago del Estero y va camino a hacerlo en San Juan, donde jugará este viernes con Nueva Zelanda su tercer encuentro del grupo A.

“Está previsto que en la etapa de grupos la concurrencia sea menor en los partidos que no juega Argentina. Lo que no teníamos previsto es que Argentina jugara ante 40 mil personas estos dos encuentros iniciales”, dicen a LA NACION desde el comité organizador del Mundial. El furor por la selección que se hace notar en Santiago del Estero se mudará a San Juan durante el fin de semana y continuará en los octavos de final. El partido decisivo del Mundial, que se disputará el 10 de junio en el rebautizado estadio Diego Armando Maradona, de La Plata , ya tiene sus 53 mil localidades vendidas.

El estadio Madre de Ciudades, repleto para el partido inaugural entre Argentina y Uzbekistán
El estadio Madre de Ciudades, repleto para el partido inaugural entre Argentina y Uzbekistán - Créditos: @Fabián Marelli

El problema, entonces, no es Argentina, que vende todo lo que tiene a disposición, sino el resto de los partidos. De acuerdo a los registros oficiales de la FIFA, los dos partidos con menor concurrencia del torneo tuvieron como protagonista a una potencia futbolística: Francia vs. Corea del Sur congregó a apenas 2671 espectadores en Mendoza y fue el partido de menor convocatoria. Inglaterra vs. Túnez, en La Plata, el segundo con 2765 personas. Para estos encuentros se usan entradas de protocolo y tickets entregados a escuelas de fútbol, algo que también ocurrió en el mundial de la categoría de 2001, organizado en el país y ganado por Argentina.

“Sólo hay entradas de protocolo establecidas para los partidos de Argentina y son 5000″, informan desde el comité organizador del Mundial. Y agregan: “En algunos partidos que no son de Argentina utilizamos unos 200 tickets de protocolo”. El conteo de la FIFA incluye todo: protocolo, prensa y espectadores pagantes (o que ingresan con un ticket obsequiado). Por eso habla de “asistentes” en los informes oficiales de los partidos. Pero esas 200 entradas de protocolo resulta un número escaso si se comprueba lo que ocurre con la oferta de entradas gratuitas que reciben en su Whatsapp padres de niños que juegan al fútbol en alguna escuela, como se dijo: para llegar a esos 10 espectadores de promedio, el estímulo de los más pequeños es clave.

Hubo 4000 integrantes de la comunidad judía en la Argentina que vieron Israel vs. Colombia en La Plata
Hubo 4000 integrantes de la comunidad judía en la Argentina que vieron Israel vs. Colombia en La Plata

San Juan, por ejemplo, tiene un programa llamado “estadio lleno”, que no aplica para los partidos de Argentina, pero que contribuye a que haya más gente en la cancha del Bicentenario, con capacidad para 25 mil personas. El gobierno de esa provincia cuyana convocó a las escuelitas de fútbol a inscribirse en un formulario online “para que los pequeños futbolistas puedan asistir de manera gratuita” a los partidos que se jugarán en el Bicentenario. Son chicos que de otra manera no podrían acceder a un evento mundialista. El coliseo sanjuanino tendrá un total de diez jornadas durante todo el Mundial. Y albergará tanto octavos de final como cuartos de final.

El primer día el estadio estuvo a más de la mitad de su capacidad, lo cual es muy bueno, dado que no jugaba Argentina, ni grandes potencias como pasó en Mendoza”, cuentan desde San Juan a LA NACION. Fiji vs. Eslovaquia convocó a 9358 personas, mientras que Estados Unidos vs. Ecuador bordeó las 15 mil (14.865 espectadores). “El segundo día (martes 23) hubo un poco menos de gente que el sábado, pero también se entiende ya que es día laborable y los partidos son temprano”. Estados Unidos vs. Fiji tuvo 8017 personas en las tribunas, mientras que en Ecuador vs. Eslovaquia hubo 13.919 asistentes. En San Juan son optimistas de cara al futuro: “Para el viernes 26 esperamos un estadio lleno”. Lógico, juega Argentina con Nueva Zelanda. En La Plata también hubo entradas para chicos de escuelas de fútbol de la zona.

En Mendoza instrumentaron un plan parecido al de San Juan. Mediante un convenio entre la Secretaría de Deportes y la Dirección General de Escuelas los alumnos de las escuelas secundarias de esa provincia acceden al estadio Malvinas Argentinas sin cargo. Y tienen a disposición la Popular Norte. Vale tanto para escuelas privadas como estatales, y la distribución de los tickets corre por cuenta de la Dirección General de Escuelas de la provincia. “Son pases autoadhesivos que estudiantes y docentes deben llevar en un lugar visible de la vestimenta. Será valido para los dos partidos de la fecha indicada”, comunicaron las autoridades mendocinas. Italia-Brasil, el partido más atrayente del grupo D, fue todo un hit: congregó a 35.531 espectadores. Casi lo mismo que Argentina, el local, en cada una de sus dos presentaciones en Santiago del Estero (37.233 en el primer partido ante Uzbekistán y 37.033 contra Guatemala).

Por qué los números son una buena noticia para la AFA

Aunque el promedio de ocupación de los estadios orillara el 36% durante los primeros 16 partidos del Mundial Sub 20, la cantidad de espectadores lleva al optimismo a los organizadores. Si se compara Argentina 2023 con Polonia 2019 (en 2021 el Mundial no se disputó por la pandemia del coronavirus) las cifras favorecen al torneo que está en disputa. Cada uno de sus partidos garantiza la presencia de 14.684 espectadores, un número influenciado por la tracción del equipo local. Es un ¡107%! más que cuatro años atrás: el promedio era de 7071 personas por encuentro. Sin contar los dos partidos de los locales (Argentina en 2023 y Polonia en 2019), la diferencia también es favorable al Mundial actual: 11.477 personas contra 5.698. Es decir, un 101% más.

El estadio Madre de Ciudades, de Santiago del Estero, escenario del furor de los hinchas argentinos por el equipo dirigido por Javier Mascherano
El estadio Madre de Ciudades, de Santiago del Estero, escenario del furor de los hinchas argentinos por el equipo dirigido por Javier Mascherano - Créditos: @Fabián Marelli

Más allá de los programas provinciales para favorecer la asistencia de jóvenes a los estadios, los precios de las localidades también contribuyen a que se superen los promedios de espectadores en relación con Polonia 2019. Las entradas populares cuestan $2000 y las plateas, $3000. Desde el Gobierno se entusiasman con la llegada de hinchas extranjeros con dólares en el bolsillo. Estiman que habrá cerca de 25 mil uruguayos siguiendo a la Celeste en La Plata (juega este jueves ante Inglaterra). Y algo parecido esperan para Brasil en Mendoza (enfrenta este miércoles a República Dominicana). Y cifran el movimiento económico total del torneo en US$ 250 millones.