Mundial Qatar 2022: Rogelio Funes Mori, la historia de película de un verdugo con todas las camisetas, ahora contra la selección argentina

Rogelio Funes Mori, vestido con los colores de México, siempre goleador
Rogelio Funes Mori, vestido con los colores de México, siempre goleador - Créditos: @Joan Monfort

Semanas atrás, la consulta surgió sola, espontánea. Son los interrogantes que suelen hacer los cronistas a los delanteros que dejaron una huella en una entidad y a la que deben enfrentarse, estar del otro lado del mostrador. No es sencillo: si hubo afecto, cerrar los ojos y gritar el gol de toda una vida puede generar todo tipo de reacciones. Lógicamente, el fútbol es una pasión inexplicable. Más aún, si se trata de un país, de una selección. Rogelio Funes Mori entendió perfectamente qué debía decir.

“Primero, es un sueño para mí ir al Mundial. Como digo, son sentimientos, sueños que me he propuesto y todo va a depender de mí. El gol lo festejaría con todo mi corazón. Son cosas que pasan una vez en la vida, nos tocó Argentina y va a ser un partido muy lindo”, expresó el delantero, siempre envuelto en críticas. Gerardo Martino, el entrenador argentino del seleccionado de México, uno de los rivales de la Argentina (el 26, a las 16), incluyó al delantero en la lista definitiva del Tri.

El listado de los 26 futbolistas elegidos por Tata Martino fue publicado este lunes en las redes sociales oficiales de la Federación Mexicana de Fútbol. Ex técnico de los seleccionados de la Argentina y Paraguay, eligió a Funes Mori, que acaba de superar una lesión en Monterrey y surgido de las divisiones menores de River, y a otros cuatro delanteros: Raúl Jiménez, Hirving Lozano, Henry Martín y Alexis Vega.

Se presentó en México en 2015: toda una vida en tiempos líquidos. Marcó 139 goles en 284 partidos, en todas las competencias, una declaración de principios. Sin embargo, un poco por sus movimientos poco artísticos y otro poco por su origen, lo cierto es que el Mellizo siempre convive con un muro. Una pared de epítetos desafiantes. “El que sabe de fútbol sabe cómo juego, lo que he demostrado y lo que tengo que seguir demostrando. No me quedo con lo que he hecho, si estoy en la Selección, es por algo, porque me lo he ganado y sin duda quiero seguir creciendo”, resulta la reflexión del atacante, de 31 años.

En el seleccionado azteca lleva anotados 6 tantos en 16 encuentros. Se presentó el 3 de julio de 2021, con un grito y una victoria por 4 a 0 sobre Nigeria. Largos años antes, en 2012 y con Alejandro Sabella, fue parte de un superclásico de las Américas con la camiseta argentina. Otros tiempos.

Otros tiempos, también: el Grupo Fiesta, un conjunto de atrevidos artistas de música callejera, creó en 2013 una canción con un título sugestivo: Himno a Funes Mori. No era, precisamente, un canto a la potencia y el gol de un joven Rogelio, número 9 de River. Todo lo contrario. El estribillo, describe: “De pronto la pelota llega sin avisar, él está posicionado para rematar, toda la hinchada está gritando el goool... y Funes Mori lo erró y Funes Mori lo erró”. La ironía se debía a algunas oportunidades propicias desperdiciadas en el área rival.

El contexto no lo ayudaba: River se había caído del mapa y, en la Primera B Nacional, la travesía era un suplicio, que acabó con el título. En primera, tampoco fue un festín del gol. Funes Mori... el Funes Mori que no triunfó en el Monumental, es otro. Inspira con su historia de superación. Sobre todo, con tantos nubarrones sobre el cielo. Ricardo Lavolpe lo defiende... a su modo: “Hablando de quién puede ser el 9 titular, hay que evaluarlo. Funes Mori viene de una lesión, Henry Martín viene demostrando, pero veremos qué es lo que pretende Martino, si quiere un 9 de área a área como a mí me gusta, que preocupe a los centrales. En ese caso, Funes Mori puede ser una opción”.

Ante Amir Al-Ammari, un defensor de Irak, en el reciente 4-0
Ante Amir Al-Ammari, un defensor de Irak, en el reciente 4-0 - Créditos: @Joan Monfort

Ramón Díaz lo había dejado a un costado, Benfica lo cobijó a cambio de 2 millones de euros. Eskisehirspor, un equipo de Turquía, lo contuvo otra temporada, donde marcó 14 goles en 36 partidos, un dato que sedujo a Monterrey. Se presentó en 2015 en los Rayados, en el mismo momento que el francés André Pierre Gignac se incorporó a Tigres, el enemigo íntimo de la ciudad. Al rato, Tigres alcanzó la final de la Libertadores con River. Muy pocos apostaban por el otro goleador. Callado, alejado del ruido, no suele hablar con los medios y prefiere ser el actor secundario.

“Cambiaría la época en la que me tocó jugar. En ese momento sentía que jugaba bien, pero que no podía hacer goles. Ahora siento que, con la experiencia que he adquirido, hago goles. Estoy más maduro, mejoré en algunos aspectos. En ese momento era joven y quería jugar. Para un joven, se sienten esas presiones. Me gustaría tener revancha en River”, le contó a La Página Millonaria.

Las críticas lo fortificaron: su personalidad, hoy, lo es todo. Es un delantero más completo, más allá de que su mundo sigue siendo el área. La psicología le desterró viejos traumas. Tiene un promedio de 0,48 por partido. La historia con México tuvo sus gambetas. Debió hacer una presentación formal en la FIFA. “Me encantaría, estoy agradecido a este país, a la gente mexicana que me sigue y que me trata con mucho cariño. Llevo casi cuatro años aquí y si me llaman, voy de cabeza”, contó, en su momento.

Años atrás, tuvo un contacto con la selección de los Estados Unidos. El Mellizo era seguido por Jürgen Klinsmann. Tiene su historia: en 2001 dejó, junto con su familia, su Mendoza natal para buscar un mejor destino. Se instalaron en la ciudad de Dallas. Su mamá era cajera y su papá trabajó en un taller mecánico. Mientras jugaba al básquetbol, participó junto con su hermano Ramiro de un reality show “Sueño MLS”. Entre los 2000 participantes, dos quedaron entre los cinco finalistas. El trofeo fue para Rogelio; la travesía en Dallas duró un suspiro. Viajante y aventurero, una prueba en Chelsea fue la excusa perfecta para el encuentro con River, de paso por Londres. En febrero de 2009, los hermanos se vistieron con la banda roja.

“Es un futbolista que juega en la posición de centrodelantero y que vemos en Monterrey cómo participa mucho de la elaboración y las jugadas ofensivas; no es solo un 9 que está apto para el gol, también participa mucho”, suele complacerlo Tata. La fórmula argentina, del otro lado del mostrador. Y un grito de gol dando vueltas en el aire.