Mundial Qatar 2022. Paso atrás de Dinamarca: de ser uno de los europeos en mejor forma a cosechar un sorpresivo empate contra Túnez

Maniobra Andreas Skov Olsen; Dinamarca llegó al Mundial de Qatar con dotes de favorito, pero fue frustrado por Túnez en el debut: 0-0.
Maniobra Andreas Skov Olsen; Dinamarca llegó al Mundial de Qatar con dotes de favorito, pero fue frustrado por Túnez en el debut: 0-0. - Créditos: @Hassan Ammar

El sorteo del primero de abril le había dado un grupo más que favorable a Dinamarca. En aquella ocasión supo que compartiría la zona D con dos equipos con los que había coincidido en Rusia 2018, Francia y Australia o Perú, más un “nuevo” oponente, Túnez. Un potencial triunfo contra los africanos en la primera fecha del Mundial de Qatar dejaría a los escandinavos en una excelente posición para encarar el encuentro contra el campeón defensor, al que venció dos veces en su grupo de la Liga Naciones este año, y las chances de terminar en la cima de la zona eran altas.

Sin embargo, los tunecinos se dispusieron a sorprender a propios y ajenos. Cuando se esperaba que fueran rivales menores, contra los que las “potencias” europeas podrían obtener triunfos fáciles, el equipo al que dirige Jalal Qaderi se encargó de convertir el partido en un martirio para los daneses. Sería errado describirlo meramente como un planteo defensivo: indudablemente Túnez hizo un gran trabajo para cubrir espacios y frustrar a los atacantes, e incluso durante el primer tiempo generó las chances más peligrosas a partir de su veloz y punzante contraataque. El 0-0 final terminó por sembrar muchas dudas en el entrenador Kasper Hjulmand, y el segundo duelo, contra Les Bleus, ahora cobra una importancia mucho mayor.

Aissa Laïdouni, una de las figuras del sorprendente Túnez que sacó un buen resultado contra Dinamarca.
Aissa Laïdouni, una de las figuras del sorprendente Túnez que sacó un buen resultado contra Dinamarca.

Cabe recordar cuáles eran las expectativas que había sobre Dinamarca en lo previo al Mundial. En la Eurocopa del año pasado sufrió el shock del paro cardíaco de su máxima estrella y líder futbolístico, Christian Eriksen, pero a medida que avanzó el torneo cubrió su ausencia de gran manera, llegando a las semifinales del torneo de la mano de nuevas figuras, como Joakim Maehle y Mikkel Damsgaard, antes de ser eliminado por Inglaterra en tiempo extra y en circunstancias polémicas. Traspasó esas buenas impresiones a la clasificación para Qatar, en la que fue uno de los primeros equipos en asegurar su lugar: ganar 9 de sus 10 encuentros de manera consecutiva, marcando 30 goles en el proceso. E incluso cuando aseguró su presencia, al ser probado contra adversarios más amenazantes (Francia, Austria y Croacia) en el grupo A de la Liga Naciones, apenas un punto de diferencia respecto a los croatas, lo marginó del Final Four.

Las mejores chances danesas

El plantel que eligió Hjulmand también permitía, a priori, ilusionarse con una campaña histórica. A la base de líderes históricos como el arquero Kasper Schmeichel, el central y capitán Simon Kjaer y el talismán Eriksen (hizo un milagroso regreso a su mejor versión en 2022, conformando el mediocampo de Manchester United), se sumaron varios jóvenes que se consolidaron como sólidas opciones, como los mencionados Maehle y Damsgaard, Andreas Skov Olsen, Rasmus Kristensen y Jonas Wind. Así se reflejaba también en las apuestas al día de la inauguración mundialista: Dinarmarca era el noveno candidato al título de campeón, por encima de Uruguay y del subcampeón mundial, Croacia.

Christian Eriksen marcó su sorprendente regreso al fútbol de elite al jugar su tercer Mundial, pero el debut no fue el mejor.
Christian Eriksen marcó su sorprendente regreso al fútbol de elite al jugar su tercer Mundial, pero el debut no fue el mejor. - Créditos: @MIGUEL MEDINA

Pero en el estreno en Qatar lejos estuvo de aquel equipo electrizante y voraz que mostró ser en aquella gran campaña continental. Ante la falta de espacios que proporcionaba Túnez, Dinamarca estaba forzado a tener la pelota por largos ratos, lateralizando el juego e intentando saltearse líneas, sin mucho éxito. Las falencias en la generación de chances, y eventualmente en la finalización, expusieron de nuevo el único problema aparente del plantel danés, la falta de un delantero de área. Kasper Dolberg no se caracteriza por autosuficiencia ni por ser un goleador sumamente prolífico: sólo una vez en su carrera superó los 12 tantos en una temporada, cuando marcó 23 en Ajax en una soñada 2016/17. A los 19 minutos del segundo período fue reemplazado por Andreas Cornelius, que corrió la misma suerte, errando un cabezazo con el arco vacío en la oportunidad más clara del partido. Eriksen fue otra vez el arma más efectiva del ataque, y un remate de media distancia suyo fue salvado de gran manera por el arquero Aymen Dahmen, una de las figuras del encuentro. Pero se trató de situaciones aisladas y escasas.

Ahora, a Hjulmand y su plantel los espera el partido más importante. En teoría Francia es el oponente más “conocido”, y los daneses lo vencieron en dos ocasiones este año con la base de futbolistas que viajó ahora a Qatar. Si Dinamarca quiere revalidar sus credenciales y soñar con otro rendimiento memorable en un torneo internacional, sacar un triunfo sobre semejante adversario sería la mejor forma de conseguirlo.