DUNEDIN, Nueva Zelanda.- Hace poco le preguntaron al periodista español Enric González cómo definiría la elegancia. Sin preámbulos, respondió: “Yo creo que hay que resumirla hasta el hueso, la elegancia es saber perder”. La selección femenina de la Argentina, dirigida por Germán Portanova, entonces, es un equipo elegante. Y esa es su mayor virtud en este proceso.

Si el tiro libre de Florencia Bonsegundo o el remate envenenado de la “Zurda” Stábile hubieran ingresado contra Italia, en el debut del Mundial, lógicamente todo sería diferente: la Argentina habría conseguido ante la Azzurra el empate o, por qué no, su primer triunfo mundialista de la historia. Pero el destino –o la suerte– quisieron que la historia se escribiera de otra manera.

La selección podría haber asimilado la derrota como tantas veces ocurre en el deporte: con frustración y pasividad. Pero no. Y a pesar de algunas lágrimas tras el pitazo final con Italia, las jugadoras y el cuerpo técnico declararon ante la prensa aquello que realmente sentían: “Vinimos a jugar un Mundial, no un partido”.

Les dolió que el encuentro se les haya escapado sobre el final, pero el plantel sabe que su objetivo no es ese. Por eso, sin tiempo para lamentos, al regreso del estadio Eden Park tras la derrota, el cuerpo técnico cenó junto con las jugadoras y luego se reunió en una de las habitaciones. Hasta las cuatro de la mañana estuvieron despiertos: vieron el partido de Italia y el enfrentamiento entre Suecia y Sudáfrica, donde las europeas dieron vuelta el resultado y en los últimos diez minutos sellaron el 2 a 1 definitivo.

“Está bueno que la gente entienda que para nosotras el triunfo es jugar bien –describe Estefanía Banini–. Obviamente queremos ganar, eso está más que claro, pero también sabemos que jugar bien es un triunfo, aunque perdamos. Nuestro camino va por otro lado, porque los recorridos son diferentes. Queremos que la selección femenina tenga una identidad, más allá de los resultados”.

Por eso la tranquilidad y confianza del plantel en la antesala del partido con Sudáfrica. Por eso, cuando escuchan que este jueves [desde las 21 de la Argentina, por TV Pública y Dsports] será el día para ganar por primera vez un partido en una Copa del Mundo, son las jugadoras y el cuerpo técnico los que bajan el ritmo del juego.

El resumen de la caída ante Italia

“Hay que desdramatizar, es un partido de fútbol. Las jugadoras vienen haciendo un gran trabajo con las armas que tenemos. Sin ser un equipo veloz, potente –comparado con Italia, por ejemplo–, se hizo un gran partido. Con respecto a Sudáfrica, es un Mundial: se puede ganar, se puede perder, se puede empatar. Tienen a las dos delanteras más veloces del torneo y vienen de salir campeonas de África”, señala Portanova.

Hace cuatro años, en el Mundial de Francia 2019, la selección llegó al tercer partido de la etapa de grupos con la ilusión de llevarse los primeros tres puntos mundialistas. ¿Qué ocurrió? La Argentina arrancó en desventaja por 3-0 ante Escocia y finalmente, en una noche épica, el partido terminó 3 a 3. Con otro sistema de clasificación, la selección estuvo a punto de conseguir el boleto a los octavos de final por ser uno de los mejores terceros.

Pero esa adrenalina y alegría que significó aquella remontada histórica se fue apagando con el correr de los días. En aquel plantel comenzó a despertarse un sentimiento. Y una crítica para el entrenador Carlos Borrello: qué hubiera ocurrido si durante el torneo nos hubiésemos animado un poco más con la pelota en los pies.

Lo que ocurrió fue lo que ya todos conocen. Varias jugadoras le pidieron a la AFA un proyecto que confíe en sus capacidades, en su estilo de juego, que no quiera solamente salir a defender, sino forjar las bases para que dentro de un futuro las próximas generaciones pudiesen demostrar aquello que aprendieron en los potreros argentinos. Desde Viamonte escucharon a las jugadoras y Portanova fue el elegido para este proceso.

En el partido con Sudáfrica, posiblemente, el entrenador apueste por las mismas once que arrancaron frente a Italia. Hay jugadoras que son líderes tanto dentro como fuera de la cancha: Vanina Correa, Aldana Cometti, Stábile, Lorenza Benítez, Florencia Bonsegundo y Estefanía Banini. Todas ellas, irremplazables en sus posiciones, con más de un Mundial encima y con la convicción que Portanova logró imponerles.

“Se vio una Argentina completamente diferente a la del Mundial de Francia. Creo que nosotras jugamos, tenemos nuestras armas, sabemos que la que entre va a sumar. Italia se sorprendió. Tenemos un juego que venimos demostrando hace tiempo, quizás no se esperaban la presión o salir jugando todo el tiempo. Argentina demostró que quiere ser protagonista”, declaró Bonsegundo.

El objetivo de esta selección argentina es demostrar que tiene un estilo. Las jugadoras quieren la revancha y así lo hizo saber en estos días la zaguera Sophia Braun: “Estamos entusiasmadas, listas para tener una segunda oportunidad y obtener una victoria”.

El estadio de Dunedin será la sede del partido entre la Argentina y Sudáfrica. Ante la ansiedad y el exitismo que rodea a este partido, Portanova repite aquello que dijo en más de una oportunidad: “No podemos elegir ganar siempre, pero sí cómo perder. Y si me preguntás cómo prefiero perder, te digo que tratando de ir a buscar el partido, de jugar de una determinada manera”, repite Portanova, desde que asumió. Y lo repite porque muchas veces el foco se corre. Sin embargo, del otro lado está un equipo que se caracteriza por su elegancia. Un equipo que, sabiendo perder, a la larga, asume que así se gana.

Probables formaciones

Argentina: Vanina Correa; Sophia Braun, Miriam Mayorga, Aldana Cometti y Eliana Stábile; Daiana Falfan y Lorena Benítez; Romina Núñez, Estefanía Banini, Florencia Bonsegundo; Mariana Larroquette. DT: Germán Portanova.

Sudáfrica: Kaylin Swart; Sibulele Holweni, Bambanani Mbane, Bongeka Gamede y Lebohang Ramalepe; Kholosa Biyana, Refiloe Jane y Jermaine Seoposenwe; Thembi Kgatlana; Linda Motlhalo y Hildah Magaia. DT: Desiree Ellis.

Árbitra: Anna-Marie Keighley, de Nueva Zelanda.

Estadio: Forsyth Barr, en Dunedin.

Hora: 21.

TV: TV Pública y DSports.