MJF, el luchador que no tuvo reparo en lanzarle tequila a un niño durante un combate

La lucha libre tiene límites claros que no se pueden quebrantar: el respeto al público siempre será el más importante. Cuando esta barrera se rompe, de forma intencionada, amenaza la integridad de los espectadores. Eso le sucedió a MJF, el Campeón Mundial de All Elite Wrestling (AEW), con un menor de edad durante una función en Estados Unidos.

Maxwell Jacob Friedman, gladiador que abrevia su nombre a MJF, se distingue como un luchador rudo. Aunque suele ser el malo de la historia ante las cámaras, nada justifica una agresión directa a los espectadores. Batalló por 67 minutos ininterrumpidos frente a Bryan Danielson y retuvo con éxito su cinturón. El duelo ya es considerado por los críticos como uno de los mejores del año.

Sin embargo, hubo un acto que se viralizó, más allá de su victoria. Cuando el combate recién iniciaba, se dirigió a las tribunas del Chase Center en San Francisco, California. Allí, abordó a una familia que asistió al recinto para presenciar el espectáculo. Despojó a la madre de un vaso y arrojó la bebida que contenía al rostro de su hijo.

Regresó de inmediato al cuadrilátero para continuar con el choque ante Danielson. La escena parecía planeada. No obstante, Sean Ross Sapp, periodista del medio especializado Fighftul, reportó que estuvo fuera de los planes del encuentro. Indicó que MJF decidió improvisar dentro de personaje; los directivos de AEW no contaban con que arremetería contra un niño de 10 años.

Agregó que la madre del menor de edad sostuvo una molestia legítima. Además, que el niño comenzó a llorar porque el líquido que ingresó a sus ojos no fue agua, sino tequila; algo que el monarca obvió, mas lo desconocía. Mencionó que personal de la compañía ayudó a resolver la situación mientras ocurría el desenlace del show.

Detalló que Amanda Huber, viuda del luchador Brodie Lee (que pertenecía al plantel cuando falleció, a raíz de una fibrosis pulmonar, en diciembre de 2020) y actual Encargada de Recursos Humanos de AEW, los consoló e invitó al backstage. A modo de compensación, el menor conoció a sus atletas favoritos y recibió gratis mercancía oficial de la compañía.

En rueda de prensa, Tony Khan, presidente de All Elite Wrestling, validó los reportes; admitió que el hecho no tuvo ninguna justificación y extendió una disculpa pública a Titus, el niño agredido. Mencionó que le regalará boletos para que acuda a un futuro cartel de la promotora. En suma, reconoció que tuvo una conversación seria con MJF.

"Esto no será tomado a la ligera. Conocí a Titus, hablamos y se comportó como un verdadero campeón al respecto. La diferencia es que nuestro campeón no actuó como un campeón en ese momento. Al contrario, Titus se comportó genial", afirmó. MJF lo pasó por alto. Sin desapegarse de su papel, ni manifestar perdón alguno, externó: "El niño parecía tener sed, todos siguen muy preocupados por él".

La embestida rompió con la máxima de la lucha libre y volvió a poner en tela de juicio a los seguidores de la disciplina. Imaginen acudir a una arena y ser atacado de esa forma por un deportista. Es peor en el caso de un niño, cuyo único objetivo era acudir a una función. Scorpio Sky, parte del roster de AEW, condenó las acciones mediante Twitter.

Ric Flair, leyenda del entretenimiento deportivo en Estados Unidos, se le unió. “Es una forma muy barata de provocar al público. Estoy en contra, totalmente, de arrojarle cualquier cosa a un niño, por Dios. Eso nunca sucedería en la WWE (actual rival de AEW), menos si actúas con esa malicia, aún sin la intención de lastimar a alguien”, sentenció en el podcast To Be The Man.

Y es que si hubiera sido al revés, los gladiadores no lo perdonarían. En su lugar, responderían con un golpe. Místico, el ídolo nacional, ahondó en la perspectiva del aficionado durante una entrevista con Yordi Rosado: "Acepto que digan que la lucha libre es circo, maroma y teatro. Es algo bendito, es una magia. Sacas el estrés, vienes a gritar lo que no puedes decir en tu casa, en tu trabajo, en la escuela".

Por ese motivo, los luchadores jamás se sentirán ofendidos por un insulto. Lo harán cuando un fan intente tocarlos mientras trabajan. Porque ellos no se meten con la grada. Tienen en claro que su labor es entretener arriba del ring. En México existen ejemplos de sobra acerca de cuando las cosas salen mal. Los más representativos siempre correrán a cargo de L.A. Park.

Asistentes lo han golpeado y le han tirado cerveza. La Huesuda no ha mostrado temor en devolver sermones y puñetazos. Incluso, le confesó al Escorpión Dorado que estuvo en la cárcel por un mes, ya que dejó en terapia intensiva a un aficionado que lo retó a una pelea real; salió de la prisión cuando este despertó. Que MJF decida revertir los límites del pancracio solo adhiere más peligro, y extremo cuidado, a la experiencia de los espectadores.

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