Michael Davis el jugador de la NFL que se tatuó a México y su cultura

Michael Davis nació en Estados Unidos pero él se siente mexicano. (Foto: Frederick Breedon/Getty Images)
Michael Davis nació en Estados Unidos pero él se siente mexicano. (Foto: Frederick Breedon/Getty Images)

México es un país que se cuela en donde sea y la National Football League (NFL) no está exenta. Pese a que la mayoría de sus jugadores son orgullosos norteamericanos, hay excepciones como Michael Davis, el jugador de los Los Ángeles Chargers, quien aunque nació y creció en Estados Unidos, mantiene una estrecha relación con la cultura mexicana, tanto que la lleva en la piel.

Emiliano Zapata y Francisco Villa, héroes nacionales por su contribución a la revolución mexicana; Diego Rivera, uno de los mejores pintores en la historia del país; y Frida Khalo, artista y mujer insignia de la cultura mexicana. Estos son los personajes que Davis lleva tatuados para inspirarse y para demostrar que los hispanos sí pueden triunfar en una de las ligas de menos apertura para ellos.

El defensivo de 27 años nació en Glendale, California en 1995. Asistió a Glendale High School y formó parte del equipo de fútbol americano y de atletismo, en ambos destacaba; en el juego del ovoide fue titular, mientras que en el atletismo era una promesa, participaba en las carreras de 100 y 200 metros y sus tiempos lo llevaron a concursar en competencias estatales.

Su madre, Ana Martínez, partió de la Ciudad de México con rumbo a Estados Unidos en busca del sueño que millones de mexicanos persiguen. Su padre era afroamericano y no estuvo presente, "mi mamá fue mi papá. Ella me enseñó e impusló mucho", sentenció Davis en entrevista con el medio La Opinión.

Fue educado solo por su madre y gracias a ello los lazos con México siempre existieron. Ella misma ha declarado que las visitas a México eran indispensables, lo llevaba para que se adentrara en las festividades y recintos históricos como Teotihuacan. En esas vacaciones visitaban a la familia y allí conectaba de inmediato. Jugaba el fútbol de los mexicanos, el soccer, con sus primos y hasta llegó a desear ser parte de un equipo de balompié en tierras aztecas.

Fue su abuelo, Pedro Martínez, quien le dio las herramientas para conectarse con sus raíces mexicanas. Él fue quien le enseñó a leer y escribir en español a través de La Biblia.

Michael Davis lo resume de forma sencilla: “México es parte de mí, y yo soy parte de México, me considero un mexicano”, aseveró para Fox Sports. Además de que aseguró que el mole verde fue uno de los alimentos con los que creció y que refrendó su vínculo con su cultura y familia.

Su labor fuera de las canchas también tiene óptica latina. Recientemente Michael ayudó a una familia hispana. En febrero de 2022 el defensivo en alianza con PepsiCo, brindaron apoyo a Mi Mercadito de Inglewood, cuyos dueños son latinos y se vieron afectados por la pandemia por COVID-19. Erik y Silvia Rico recibieron un cheque de $50.000 para levantar un negocio amado por la comunidad hispana de California.

El Vato es el apodo con el que se ha dado a notar, y jamás ha renegado de él. Surgió en su año de novato en la NFL (2017) y fue Jahleel Addae, saefty de los Chargers, el responsable, de ahí se corrió al equipo y a eventualmente a los aficionados, quienes han arropado al norteamericano más mexicano.

Los Cargadores de Los Ángeles o cuentan con una fanaticada diferente al resto. Según datos de NFL, en el 2019, el 41.1% de los aficionados a los Chargers son latinos, el mayor porcentaje para cualquier equipo de la liga.

La NFL no es para cualquiera, eso está demostrado. Cuando acabó su periodo universitario (2013-2016) se declaró elegible para el Draft , pero no fue seleccionado. Sin embargo, los Chargers le brindaron una oportunidad al contratarlo como agente libre en 2017.

La consolidación no llegó pronto. Fue relegado al equipo de prácticas y ascendido más tarde. De hecho, fue uno de los pilares mediáticos que tuvo el conjunto angelino cuando jugó contra Kansas City en el Estadio Azteca.

En sus 5 temporadas, contando hasta la de 2021 acumula un total de 73 juegos, 49 titularidades, 44 pases defendidos, 6 intercepciones y 101 yardas regresadas, según Pro Football Reference.

En 2021 firmó una extensión de contrato por 3 años y demostró que los hispanos sí tienen cabida en la mejor liga del mundo: un pocho con los colores emblema del equipo lo arropó cuando plasmó su firma. Cuando se le cuestionó sobre la posibilidad de que los mexicanos no estén diseñados para la competencia fue contundente.

“No creo en nada de eso. La gente en la NFL cree que el fútbol americano es solo para afroamericanos y blancos; y los hispanos que ahí están solo patean la pelota, lo cual es completamente falso. Pienso que los hispanos deberían poder jugar en la NFL, solo necesitamos empujarlos más para que entren al deporte y puedan estar en cualquier posición. No escuches a los que te quieren menospreciar”, recalcó en su entrevista con La Opinión.

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