Desde a organización de la Fórmula 1 planean aplicar un cambio de formato en las clasificaciones. El mismo consistirá en reducir el número de neumáticos a 11, lo que conducirá a que los pilotos utilicen compuestos duros en la Q1, medios en la Q2 y blandos en la Q3. Aunque, esta temporada, se probará en el Gran Premio de Emilia-Romaña y en otra jornada, que todavía no fue confirmada.

Sin embargo, la modificación no tiene una total aceptación. Es que el último bicampeón de la categoría, Max Verstappen, junto a su compañero en Red Bull, Sergio Pérez, se mostraron en contra de esta alteración, de la que no ven el lado positivo.

"Espero que no haga frío en Imola, de lo contrario, va a ser bastante complicado", dijo el neerlandés ante los medios, y agregó: "Es lo mismo para todos, pero no creo que tengamos que hacer este tipo de cosas en la clasificación. Realmente, no veo el beneficio de ello".

Ante este cambio, pactado para la sexta fecha, en mayo, el defensor del título marcó su postura por priorizar el entretenimiento a base de competencia. "Es mejor si nos aseguramos de que todos los coches están cerca unos de otros y sean más competitivos, en lugar de condimentar las cosas de esta manera, que creo que es probablemente para el espectáculo", expresó.

Por su parte, Checo fue tajante y no solo estuvo a la par de su compañero, sino que también brindó una mirada negativa. "Creo que no lo necesitamos, cuando ves la clasificación que tuvimos en Baréin, lo ajustado que estuvo todo", manifestó.

Para finalizar, sostuvo: "Realmente, no necesitamos cambiar nada. Pero veremos, veremos una vez que lo probemos, aunque no creo que haya necesidad de cambiar algo que está funcionando bien".

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