Mateo Retegui, iluminado en Italia y también en Victoria: le dio el triunfo a Tigre ante Lanús en el minuto 54 del segundo tiempo

Mateo Retegui, de Tigre, vive el mejor momento de su promisoria carrera
Mateo Retegui, de Tigre, vive el mejor momento de su promisoria carrera - Créditos: @Twitter @catigreoficial

Tigre superó este sábado en tiempo de descuento a Lanús por 2-1, en un partido correspondiente a la fecha 9 del torneo de la Liga Profesional (LPF), jugado en el estadio José Dellagiovanna. El equipo de Victoria destrabó el marcador en el noveno minuto agregado por el árbitro Hernán Mastrángelo, a partir de una conquista de Mateo Retegui, máximo artillero del campeonato con 7 tantos. Fue el final de una mini película que tal vez ni siquiera haya soñado el delantero de 23 años: recién regresa de Europa, donde debutó con la camiseta de Italia en las eliminatorias de la Eurocopa 2024 con dos goles, uno ante Inglaterra y otro ante Malta. De regreso en Argentina, buscó y buscó el grito que llegó en la última jugada del partido, cuando tomó una pelota tras un rebote en la puerta del área chica, se acomodó y sentenció de zurda.

El equipo del DT Diego Martínez había sacado ventaja con un gol de Alexis Castro (a los 36 minutos del primer tiempo), pero el Granate lo igualó parcialmente por medio del tucumano Leandro Díaz cuando se jugaban 21 minutos de la segunda etapa. El visitante había trabajado mucho y en desventaja numérica: jugó con diez hombres desde los 15′ del primer tiempo por la expulsión de Lema, que bajó a Retegui en la puerta del área cuando el atacante enfilaba hacia el gol.

El encuentro arrancó con una propuesta agresiva de Tigre, pero con Lanús trabándolo con la idea de salir rápido hacia Franco Troyansky y Leandro Díaz, quien debía fajarse con los centrales del local. El partido se desequilibró a los 15 minutos, cuando Alexis Castro le metió un pase largo a Retegui que le ganó la posición a Cristian Lema, quien fuera del área, lo empujó y el delantero cayó. El árbitro cobró el tiro libre y expulsó al defensor granate, al aplicar la ley de último recurso. El tiro libre fue casi un penal, pero Lucas Acosta tapo el remate de Retegui y conjuró el mal momento de Lanús. Un minuto después el goleador se fabricó otra oportunidad que dio en el palo.

A partir de la expulsión, el DT local les pidió a los gritos a Aaron Molinas y a Castro que se hicieran cargo de la pelota y que comenzaran a juntarse. Ambos crecieron y el ‘Matador’ mostró mayor presencia ofensiva. A los 35m., Molinas armó una gran maniobra, estableció una pared con un compañero y remató desde fuera del área. Tras una serie de rebotes, la pelota derivó en Castro, quien definió ante las narices de Acosta.

En el segundo tiempo, Lanús se agazapó, pero sin que eso significara agruparse cerca de su área a defenderse, sino para provocar los errores de Tigre y así llegar al empate. De esta manera, el control de la segunda etapa fue cambiando de manos. El plan del DT Frank Kudelka tuvo su premio cuando el uruguayo Boggio ejecutó un tiro de esquina al corazón del área chica, que Leandro Díaz cambió por gol de un cabezazo.

Prediger, capitán y símbolo de Tigre, otra vez fue protagonista
Prediger, capitán y símbolo de Tigre, otra vez fue protagonista - Créditos: @Telam/Fernando Gens

Precisamente, el centroatacante visitante fue clave, ya que aguantó la pelota cada vez que su equipo buscaba llegar al campo rival y además cargó de amonestaciones a la defensa local hasta lograr la expulsión de Lautaro Montoya y así dejar el partido 10 contra 10. Cuando el choque parecía encaminarse a un empate, Tigre fue con el último esfuerzo y a los centros, la defensa visitante despejó mal un pelotazo, Molinas la metió de nuevo al área chica con un frentazo fuerte, Canales quiso despejar, pero se cayó y Retegui la capturó para fusilar al arquero rival.

El tanto se dio en el noveno minuto de tiempo adicionado (se habían marcado ocho minutos y en ese transcurso se agregó uno más), en una decisión correcta de Mastrángelo, en virtud de los cambios en ese lapso finaly las pérdidas de tiempo. Nada de eso le importó a Retegui, el iluminado, que gritó en la Argentina con la misma palabra que se usa en Italia cuando la pelota supera la línea del arco: “¡Gol!”.

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