Leandro Benegas: el goleador de Independiente que nadie conocía, empezó con un grotesco y hace 12 años jugó con su entrenador

Leandro Benegas llegó a Independiente después de 10 temporadas en Chile, a pedido del DT Eduardo Domínguez
Leandro Benegas llegó a Independiente después de 10 temporadas en Chile, a pedido del DT Eduardo Domínguez - Créditos: @Prensa Independiente

La primera jugada pareció confirmar todas las sospechas. Aquel 26 de febrero apenas había transcurrido una semana desde el momento que Leandro Benegas había conocido a sus nuevos compañeros en el predio de Villa Domínico. Su sorpresiva llegada todavía generaba recelos, críticas y hasta memes ofensivos de hinchas propios y ajenos. El desconocimiento sobre sus cualidades era casi absoluto y los datos que entregaba su currículum resultaban poco auspiciosos. Sin embargo, el técnico Eduardo Domínguez decidió convocarlo primero y mandarlo a la cancha después, a los 13 minutos del segundo tiempo. Independiente perdía 2-1 ante Boca en Avellaneda y necesitaba un centrodelantero con gol para intentar el empate.

Solo unos segundos más tarde, el hombre de la camiseta roja número 18 fue con excesivo ímpetu a buscar un pase sobre la izquierda, quiso controlar la pelota, se tropezó, la perdió haciendo un giro algo grotesco y acabó cometiéndole una dura falta a Luis Advíncula. “Es una anécdota muy graciosa”, asegura pasado el tiempo este mendocino de 33 años que con 9 tantos en 19 partidos se ha ganado una indiscutida titularidad en el ataque del Rey de Copas : “Venía entrenando solo y estaba fuera de ritmo. En esos primeros días me prepararon una minipretemporada y estaba duro, descoordinado. Entre eso y las ganas que tenía se me trabó la rodilla y pasó lo que pasó”, recuerda entre risas.

Leandro Benegas cambió desconfianza por sonrisas en Independiente, en medio de un contexto deportivo e institucional complicado
Leandro Benegas cambió desconfianza por sonrisas en Independiente, en medio de un contexto deportivo e institucional complicado - Créditos: @Prensa Independiente


Leandro Benegas cambió desconfianza por sonrisas en Independiente, en medio de un contexto deportivo e institucional complicado (Prensa Independiente /)

El de Benegas es uno de esos casos que escapa a la norma habitual. Su trayectoria no llama la atención a simple vista. Comenzó repartida entre Independiente Rivadavia de Mendoza y la cuarta división de River e incluyó equipos de categorías menores como la CAI de Comodoro Rivadavia, Deportivo Armenio o Laferrere en nuestro país, y Unión La Calera, Audax Italiano, Palestino o Curicó Unido al otro lado de la cordillera. También dos pasos por Universidad de Chile, el único club con cierto brillo en su historial. Por otra parte, sus movimientos en el campo no despiertan admiración. Nadie puede discutirle la voluntad y la fortaleza, pero ni su habilidad ni su velocidad entran por los ojos. Tampoco las estadísticas juegan del todo a su favor: 129 goles en 409 encuentro suena a escaso para un 9 de área . Y sin embargo...

“A mi edad uno ya aprendió a abstraerse de las presiones, de las críticas, hasta del menosprecio. Hay que entender que cada uno tiene un estereotipo de jugador y es muy difícil gustarle a todo el mundo. Se trata de mantener el equilibrio y tratar de transformar toda esa pasión en buena energía y poner todo en cada entrenamiento y cada partido. Es la única manera de defenderse”, explicaba en una reciente entrevista para la televisión chilena.

El primer grito con el Rojo demoraría solo una semana. En la jornada siguiente al clásico frente al xeneize, Benegas festejó el gol que estableció el 3-3 definitivo ante Godoy Cruz con su especialidad: el cabezazo. Aunque hubo que esperar un mes más para que las nubes se disipasen del todo y los hinchas empezaran a admitir que tal vez se habían equivocado con las burlas. Desde el 10 de abril hasta la fecha sus números muestran una eficacia llamativa: 8 conquistas en 13 partidos y un puesto entre los que encabezan la tabla de artilleros en el actual torneo .

El primer gol de Leandro Benegas en Independiente

Con la marcha de Silvio Romero y Alan Velasco a principio de año, la búsqueda de un centrodelantero se volvió prioritaria para Eduardo Domínguez (no deja de serlo en el actual mercado de pases, aunque ahora como alternativa). Varios nombres desfilaron por la agenda, con Martín Cauteruccio como candidato más firme. Pero Aldosivi se plantó en una cifra de venta demasiado elevada para las alicaídas arcas de Independiente y la operación se frustró. Fue entonces que surgió la “opción Benegas”, un jugador que llevaba casi una década en Chile.

Simpatizantes y periodistas iniciaron una rápida pesquisa en internet para encontrar referencias en los videos. El técnico del Rojo, en cambio, no necesitaba hacerlo: la explicación se escondía doce años más atrás. El 26 de marzo de 2010 y por la 11ª fecha del Torneo Final de aquel año Huracán enfrentó a Rosario Central en Arroyito. A los 40 minutos del segundo tiempo y con el conjunto de Parque Patricios ganando 1 a 0, el técnico Héctor Rivoira decidió que Gino Clara dejase su lugar para el ingreso del Tanque, quien cinco minutos más tarde señalaría de zurda el segundo gol visitante para decretar el 2-0 final. El marcador central izquierdo del Globo en esa noche rosarina era Eduardo Domínguez. “Lo conozco y sé lo que nos puede dar”, fue la lacónica explicación que dio el entrenador cuando se le cuestionó un fichaje que nadie tenía en carpeta.

La gran virtud de Leandro Benegas, de 33 años, es el cabezazo
La gran virtud de Leandro Benegas, de 33 años, es el cabezazo - Créditos: @LUIS ROBAYO


La gran virtud de Leandro Benegas, de 33 años, es el cabezazo (LUIS ROBAYO/)

“Mi carrera ha tenido puntos altos y bajos. He jugado en varios clubes del ascenso en Argentina, me tocó pelear por salvar la categoría en La Calera, pasé momentos lindos y no tan lindos en Universidad de Chile, pero de todo lo que viví traté de sacar aprendizajes, porque creo que lo importante es disfrutar el camino”, dice el hombre que tenía todo preparado para probar suerte en China cuando llegó la oferta desde la vereda roja de Avellaneda.

Este jueves, a las 20.05 en San Salvador de Jujuy y ante Atlético Tucumán (televisa TyC Sports), Independiente intentará avanzar hasta los octavos de final de la Copa Argentina. Después de las desconfianzas y las miradas sospechosas, buena parte de las ilusiones de sus hinchas descansarán en los goles de Leandro Benegas, el hombre que desde silencio se va haciendo el dueño de los gritos en el ataque del Rojo.