Kiko Narváez retrata en Telecinco el punto débil de David Alaba

El Real Madrid tuvo la suerte de cara en Alcoy al aprovecharse de dos rebotes en apenas tres minutos para romper el empate y abrir brecha en el marcador. Evitó así otro susto como el del año pasado en Copa del Rey ante el Alcoyano, con un Eder Militao inconmensurable, pero un David Alaba al que supieron explotar los locales en su beneficio. En Telecinco, Kiko Narváez puso de relieve durante la retransmisión la flaqueza del central austríaco que resultó determinante en el gol encajado.

El exdelantero del Atlético de Madrid acompañó a Manu Carreño y Fernando Morientes en los comentarios del partido, dado en abierto por Mediaset. En líneas generales, los tres nos tienen acostumbrados a un desempeño sano en la narración, tratando de esquivar los detalles negativos de unos y otros.

Sin embargo, en este caso ha resultado imposible, puesto que la debilidad más notoria de Alaba fue clave para el empate del Alcoyano. En ello incidió Kiko, poniendo sobre la mesa que el delantero local, Mourad, de gran envergadura, fue listo leyendo dónde podía hacer más daño al Madrid después de tener duelo disputados en los que salió perdiendo contra Militao. Se emparejó con Alaba y por ahí hizo mucho daño jugando de espaldas a su antojo: "En el gol del Alcoyano, Mourad le gana la partida a Alaba".

Unos segundos más adelante, el exfutbolista internacional siguió apuntando a la envergadura como el punto débil de Alaba, mencionando que en ese tipo de duelos, al choque, "le cuesta".

Ante Mourad no pareció un jugador de dilatada experiencia, encimando en los duelos aéreos, batallas perdidas para él, en vez de dejar u n espacio que le permitiese reaccionar ante cualquier acción del rival.

Morientes se sitúo igualmente del lado de su compañero de retransmisión, incidiendo en que "tiene otras muchas virtudes", y en la agudeza del rival de sentir enseguida que por ahí el Real Madrid estaba flojeando en ese aspecto, no como en el flanco defendido por Militao.

Aún así, la temporada del ex del Bayern está siendo muy buena, a la altura de lo que se espera de él. Seguro que estos pequeño fallos no le sucederán muy a menudo después de lo sufrido emparejándose con Mourad.