Keylor Navas es una leyenda viva en Costa Rica. El arquero de 35 años es uno de los deportistas más importantes de la historia del país centroamericano, con un palmarés impresionante y siendo líder indiscutido de un combinado que se clasificó este martes por tercera vez consecutiva a un Mundial de Fútbol.

El actual arquero de PSG mantuvo su arco en cero en Doha frente a la Selección de Nueva Zelanda y, gracias al gol de Joel Campbell en el primer tiempo, consiguió nuevamente obtener el boleto a la cita mundialista.

En el ocaso de su carrera, Keylor se ganó así la oportunidad de disputar una nueva Copa del Mundo con su seleccionado. En Qatar, su sueño es volver a pasar la fase de grupos, como lo hizo en Brasil 2014, cuando alcanzó los cuartos de final.

Ese Mundial en tierras sudamericanas fue un punto de inflexión para la carrera de Navas. Tras sus estupendas actuaciones -terminó el torneo como el arquero menos vencido con dos goles en contra-, Real Madrid puso los ojos en él y lo terminó fichando para ser el sucesor de Iker Casillas.

En la Casa Blanca, lo ganó todo: tres Ligas de Campeones de la UEFA, una liga española, una Supercopa de España, cuatro Mundiales de clubes de la FIFA y tres Supercopa de Europa.

De esa manera, Navas pasó de ser uno de los héroes de la Sele a ser considerado como uno de los mejores arqueros del fútbol mundial. Ahora, intentará revalidar ese mote en uno de sus últimos capítulos con su seleccionado.

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