Julián Álvarez, el 9 de la gente: Calchín por dentro, el pueblo cordobés en el que todos son hinchas del delantero de River

Julián Álvarez era goleador del Club Calchín, que tiene la misma camiseta de River
Julián Álvarez era goleador del Club Calchín, que tiene la misma camiseta de River

CÓRDOBA.- En Calchín, un pueblo a 140 kilómetros de la ciudad de Córdoba donde viven unas 3.400 personas, todos son hinchas de Julián Álvarez . El delantero de River, que pasa un gran momento, nació allí en plena “pampa gringa”. El destino hizo que los colores del club del pueblo sean los mismos que los del Millonario. Por estos días, además, todo es rojo y blanco en la localidad.

El lunes -después de que Álvarez marcara tres goles en la victoria 3 a 1 frente a San Lorenzo, por la 16° fecha del Torneo 2021- en la cancha de Club Atlético Calchín había gente de River Plate “probando” jugadores. “Vinieron a ver si hay otro Julián”, bromea el presidente de la entidad, Raúl Molina ante LA NACION. “Es algo muy lindo lo que está pasando; siempre jugó destacándose, era un sobresaliente. Acá en la Liga Independiente de Oncativo siempre fue el goleador en todas las categorías”, agrega.

En un pueblo chico todos conocen a la familia -el papá de Julián, Gustavo, era camionero; la mamá, Mariana, maestra jardinera-; los más grandes se acuerdan de sus partidos en el club y los más chicos sueñan con conocerlo. Esperan que vaya de visita. “Imagínense cómo están, esperando que venga, lo quieren ver. Más sabiendo que es de acá, que como ellos venía al cole, iba al club”, cuenta Sonia, docente de la escuela Rivera Indarte, donde hizo la primaria.

Este lunes River probó jugadores en la cancha de Calchín.
Este lunes River probó jugadores en la cancha de Calchín.


Este lunes River probó jugadores en la cancha de Calchín.

Callado y amable son los dos conceptos que más repiten quienes hablan con LA NACION. Incluso por estos días en los que muchos hablan de él en el país, la familia les pide a varios de los más allegados que no se expongan mucho, que esperen un poco más.

“Siempre era de bajo perfil; nunca se hizo expulsar al vicio, no peleaba con el árbitro -agrega Molina-. Era como lo ven actualmente, no discute lo que no corresponde; es muy tranquilo”. El dirigente recuerda que “la Arañita” o “el Juli”, como lo llaman desde chico, andaba “siempre” por el club.

“Pintaba la cancha con los otros, se tiraban pintura entre ellos, la pasaban bien”, describe y enfatiza que en estas instituciones “todo es a pulmón” y “con amor”. Julián, desde los dos años iba al club a acompañar a sus hermanos.

Álvarez con su primer entrenador, Varas.
Álvarez con su primer entrenador, Varas.


Álvarez con su primer entrenador, Varas.

No está muy en claro porqué la camiseta del club es igual a la de River, pero en los estatutos de 1930 ya aparece con la banda roja. Incluso ahora hay cierta “imitación” de los modelos que saca el club porteño. Los vecinos están orgullosos de que se sepa a dónde queda Calchín “por Julián”. “Nos puso en el mapa”, se ríe un kiosquero.

“Es el nuevo ídolo, el único que tenemos -repite Sonia-. Acá lo veíamos en la cancha del club y ahora estamos maravillados; siempre fue buena persona, igual que su familia, por eso se merece lo que le está pasando”.

A la secundaria la hizo en el Ipem 284 Manuel Belgrano; allí curso hasta que se fue a River a los 15 años. Fue el mejor promedio en sus cursos, además de tener buena conducta. La que apunta las referencias es Patricia, secretaria de la escuela. “Muy callado, buena conducta, el mejor de su clase. Siempre iba a fútbol y acá, por supuesto, tenía Educación Física. En el pueblo es una locura generaliza, niños, jóvenes, adultos y mayores…todos estamos de fiesta”, resume y se divierte “ya no hay más chicos de Boca”.

Play y siempre fútbol

Rafael Varas fue el primer entrenador de “el Juli”, estuvo con él desde los 4 años hasta los 12 ; el jugador le regaló una camioneta en setiembre del año pasado para que pudiera hacer el reparto de mercadería, ya que ese es uno de sus trabajos. Ahora prefiere no hablar, pero cuando fue convocado para la Selección Argentina subrayó lo “orgulloso” que estaba. Es de los que lo compara con Claudio Caniggia, “porque controla y gambetea corriendo”.

Santiago Massera tiene la misma edad de Julián y comparten la vida desde el jardín de infantes. Una de sus anécdotas es que en el equipo de Calchín, donde él era arquero, lo “sufría” al amigo. “Yo era el que se comía los goles, cinco, cuatro, tres por entrenamiento. Menos mal que, después, éramos del mismo equipo”, relata a este diario.

A los 11 años se probó en el Real Madrid, que no se lo quedó por la edad.
A los 11 años se probó en el Real Madrid, que no se lo quedó por la edad.


A los 11 años se probó en el Real Madrid, que no se lo quedó por la edad.

Como todos en el club asegura que, desde siempre, “el Arañita” fue un “distinto, estaba más adelantado que el resto”. Julián y “Santi” fueron campeones juntos en la Séptima Categoría; ingresaron un año antes así que estuvieron tres en esa. La otra diversión era la play station, también jugando fútbol. “También en eso era muy bueno”, aporta.

“Lo empezaron a probar en varios clubes, a todos les gustaba pero él no se quería ir, es difícil acostumbrarte a vivir solo -dice Massera-. Cuando él llegó a River hacíamos videollamadas; encima yo soy fanático, así que imagínate lo que es”. La contención que le da la familia a “el Arañita” es un punto que todos destacan, incluso lo hizo el DT Marcelo Gallardo.

A los 11 Julián fue al Real Madrid, hizo una prueba en el equipo español -donde también fue goleador- pero no quedó porque la institución no podía fichar a menores de 13 años. Muy poco antes de que se fuera a River, el Club Calchín lo hizo debutar en primera ante Luque, el clásico rival. “Anduvo muy bien, pero fue poco porque teníamos temor de que se golpeara”, apunta Molina.

“Uno siempre dice que no hay que olvidarse nunca de sus raíces y Julián lo tiene bien claro -añade Molina-. Este año ha conmocionado al pueblo, nos ha hecho a todos iguales, todos somos hinchas de Julián”.

Claudio Gorgerino, intendente de Calchín, trascendió por los "consejos" antes del clásico con Boca.
Claudio Gorgerino, intendente de Calchín, trascendió por los "consejos" antes del clásico con Boca.


Claudio Gorgerino, intendente de Calchín, trascendió por los "consejos" antes del clásico con Boca.

Claudio Gorgerino, intendente de Calchín y jugador senior de fútbol, también se hizo conocido por el jugador. Es que, horas antes del clásico con Boca, le mandó un mensaje en el que le decía que Marcos Rojo le volvería a “ir fuerte” y que terminaría expulsado y que le “pegara al arco, apuntale a la cabeza de Rossi…que va a ser gol”. Acertó, Julián marcó los dos goles de la victoria y todo el pueblo festejó.