Juegos Paralímpicos Tokio 2020: el estupendo caño del fenómeno cordobés con el que los Murciélagos van por la final de Tokio, contra China

Los Murciélagos se habían quedado a las puerta del podio en Londres 2012. En 2016, perdieron contra Irán y tuvieron que conformarse con el bronce, cuando sentían que la medalla podía ser de otro metal. Mucho antes, y con otra camada, habían ganado los mundiales de 2002 y 2006, la medalla plateada en los Juegos Atenas 2004 y la de bronce en Pekín 2008. Esta vez, en los Juegos Paralímpicos Tokio 2020, comenzaron con la fuerza: tres victorias sobre tres partidos. Y con argumentos técnicos como para aspirar a más.

A un escalón de la final, se siente cerca la gloria, pero habrá que doblegar la furia roja de China (que arriba con una derrota a manos de Brasil y victorias sobre Francia y Japón). Este jueves, desde las 4.30 de la Argentina y con televisación de DeporTV, albicelestes y orientales chocarán en busca de un lugar en la final.

“Los rivales por vencer van a ser Brasil y China. Son dos potencias sumamente importantes”, había anticipado con firmeza Claudio Falco, uno de los entrenadores de la selección, para LA NACION, horas antes del debut frente a Marruecos. En rigor, esos son los equipos que realmente pueden complicar a la Argentina, más allá del elevado nivel de algunas selecciones europeas. Brasileños y chinos son rivales con los que el equipo nacional aún no se midió en el torneo.

Marcelo Panizza (8) y Nicolás Veliz celebran el éxito frente a los tailandeses en Tokio. (Shuji Kajiyama/)

Hay razones como para creer en una victoria: la última vez que los Murciélagos y los chinos se enfrentaron en una cita paralímpica fue por el tercer puesto de Rio de Janeiro 2016, cuando triunfó la Argentina por penales, luego de un empate en cero. El mismo resultado habían tenido en la etapa de grupos. Entonces, las ansias por anotar son altas.

El camino a las semifinales, lleno de golazos

La autocrítica del equipo señala la baja eficacia de goles en comparación con las chances creadas. Pero en Tokio los Murciélagos progresaron en ese aspecto. En el estreno, bastaron 17 minutos para que el zurdo Maximiliano Espinillo se lanzara en un eslalon envenenado para convertir. Luego de dejar atrás a cinco rivales y de caer al piso, el jugador se levantó, pateó y acomodó el balón contra uno de los caños del arco. Marruecos empató, pero Espinillo desniveló con un fortísimo disparo desde el borde derecho del área y la Argentina doblegó al campeón africano. Como para repasar quedó un lujo del cordobés: un exquisito caño al maniobrar en espacios reducidos, con marca muy encima.

El túnel de Espinillo frente a Marruecos

Vendrían luego triunfos ante España y Tailandia. Y en ambos sería notable la actuación de Espinillo. A España le hizo los goles del 2 a 0, y en el 3 a 0 frente a los asiáticos aportó el primer tanto. De los siete goles argentinos hasta el momento, cinco fueron anotados por él. El cordobés, que comenzó a jugar de joven, tras quedar ciego a los cuatro años por un desprendimiento de retina causado por un virus, es la figura indiscutida argentina en este torneo.

Su estado de gracia y el nivel del equipo entusiasman para la semifinal de este jueves. Gracias a eso, el equipo corrigió la debilidad ofensiva y ahora convierte mucho más. En la semifinal los Murciélagos se enfrentarán con un adversario parecido a ellos: fuerte en la defensa, ordenado y favorito.

Más diplomas para los argentinos

Además de la clasificación para las semifinales en fútbol, la delegación albiceleste obtuvo tres diplomas. En los 400 metros masculinos de la categoría T36, Alexis Chávez llegó 4º al marcar 55s14/100. En ciclismo de ruta Mariela Delgado arribó 7ª en la categoría T5 con 43m19s82/100, y la pareja Maximiliano Gómez-Sebastián Tolosa arribó 5ª en la categoría B, al registrar 46m59s35/100.