Juegos Paralímpicos: Hernán Barreto, el referente que en Tokio busca pisar el podio por tercera vez

Barreto: "No me siento muy lejos de un deportista que no sufre discapacidad físicas. Gané tres medallas paralímpicas y cuatro panamericanas"
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“Representar a mi país en Tokio significa mucho. Son muchos los sacrificios y el esfuerzo que hago en los entrenamientos y con los viajes para llegar a donde estoy hoy. Fui un privilegiado, tocado con una especie de varita mágica con el don de correr”, describe Hernán Barreto.

De correr se trataron estos últimos años. Desde que conoció la disciplina en 2011, correr se convirtió en una pasión, su obsesión. El tiempo fue una variante que aprendió a gestionar, y sus deseos y sueños, las metas hacia donde apuntar. Supo rodearse de personas que lo acompañaran, enseñaran y guíen en el deporte de alto rendimiento. Sus hijas son su motor, aquella luz que todo lo ilumina y justifica todo el sacrificio.

Hernán Barreto es un referente del para atletismo. Es velocista de la categoría T35 de parálisis cerebral, y compite en los 100 y 200 metros llanos. Llegó a la disciplina luego de que su profesora de educación física le recomendara probar. Sus ganas estaban en el fútbol, él quería brillar ahí. Pero la posibilidad de viajar y competir en los Juegos Bonaerenses y los Evita, eran una motivación extra para alejarse de la situación de violencia que vivía en su casa con su padre.

De a poco comenzó a sentir satisfacción en el deporte, encontró a las personas justas y un espacio de contención. Sus logros no tardaron en llegar, y este domingo (23:21 de la Argentina), cuando pise la pista de atletismo del estadio Olímpico de Tokio estará frente a su tercera competencia paralímpica.

Nacido en Zárate, en Buenos Aires, Barreto se clasificó a los Juegos Paralímpicos de Londres 2012, Río 2016 y Tokio 2020. En las primeras dos participaciones subió al podio -fueron tres medallas de bronce: en los 200 metros en Londres y Río, y sumó también la de la carrera de los 100 metros en la cita brasileña-. Ahora, en la ciudad japonesa, busca repetir, si bien es cauteloso dado el escenario que se le presenta.

“No vengo con números como para ganar una medalla. Hay un ruso y un ucraniano que llegan muy bien. De todas formas, me siento orgulloso de estar en otro Juego y voy a correr la mejor carrera de mi vida para poder subir al podio”, le explica a LA NACION. Barreto logró un tiempo de 25s59 y rompió el récord americano en los 200 metros T35 en el Grand Prix de Nottwil, en Suiza, en mayo de este año.

En su entrenador, Ariel González, encontró su aliado perfecto. Son una pareja profesional que apunta a mejorar y dar con su mejor versión. Él lo acompaña, lo entrena y rodea con otros atletas en condiciones similares para los entrenamientos. González es el entrenador de la selección de atletas con parálisis cerebral, y junto a él se entrenan los deportistas de atletismo de las diferentes categorías.

“Después de Londres 2012, tomé conciencia de lo que era como deportista y de las cosas que podía ganar en el deporte”, reconoce Barreto, quien se entrena en Lobería junto con la selección. Sin dudas, 2020 fue atípico en cuanto a la preparación de cara a las competencias. Lejos de los viajes y de los encuentros con su equipo de trabajo, fue el velocista quien encontró su propia motivación para seguir apuntando a Tokio.

“Los entrenamientos los hice como todos los atletas, en mi casa, y siendo consciente de la situación en la que estábamos. Aproveché y también disfruté del momento, ya que pude estar más tiempo con mis hijas. No me costó mucho volver a las pistas. Fueron tres semanas de adaptación y pude retomar los tiempos pre pandemia. Esta edición de los Juegos van a ser especiales por toda la situación. Los entrenamientos perdidos no se recuperan. Pero soy consciente de que si estoy acá es porque hice las cosas bien”, dice el padre de dos hijas pequeñas, quienes viven en Zárate.

Pero, en la previa a esta nueva edición de los Juegos Paralímpicos, Barreto, que sabe de sacrificios y logros, alza su voz. Pide reconocimiento, apoyo y visibilidad para su disciplina y para todo el deporte. “Es todo un proceso, hay mucho trabajo para poder mantenerme entre los mejores del mundo durante más de diez años. Trabajamos mucho junto con Ariel, maduré y crecí. Si me toca subir al podio lo voy a disfrutar mucho, y, si no, voy a seguir trabajando”, resume el atleta de 30 años.

Hernán Barreto y su segunda medalla en el Mundial de Londres
Hernán Barreto y su segunda medalla en el Mundial de Londres


Hernán Barreto y su segunda medalla en el Mundial de Londres

Sabe lo que es ganar. Entre sus logros más importantes están las medallas paralímpicas y también la medalla de oro en los 100 metros y los 200 metros en los Juegos Parapanamericanos de Guadalajara 2011; la medalla dorada en los 100 metros en los Parapanamericanos de Toronto 2015 y las ganadas en Lima 2019 (oro en los 200 metros y plata en los 100m). Además, obtuvo el cuarto puesto en los 100 metros y 200 metros en el Mundial de Doha, Qatar.

Por eso, desde su experiencia y recorrido por el deporte pide reconocimiento, atención y apoyo económico. “Con los resultados que tengo, cualquier deportista convencional tendría muchas marcas acompañándolo. Si yo no tengo más apoyo que el del Enard o la Secretaría de Deportes y tengo que elegir entre comprar esas zapatillas o arreglar mi casa, voy a arreglar mi casa, que es lo que me va a quedar cuando se termine mi carrera deportiva”, apuntó durante la previa al programa de radio Pateando Límites.

“Me parece que las marcas deberían apoyar un poco más y también debe ser decisión del Estado, que también debe estar ahí presente. Queremos que aporten al deporte paralímpico también una cuota que ayuden, no pero a nosotros todo se nos hace cuesta arriba también”, expresó al mismo programa y añadió: “Me gustaría que el deporte paralímpico no sólo se vea en la TV pública por ejemplo, sino que se vea en todos los canales. Entiendo que el deporte paralímpico no es vistoso, pero también los canales de televisión no lo saben explotar. Eso me gustaría que eso cambie en la Argentina”.

A Hernán el deporte le salvó la vida , lo sacó de la calle y le enseñó valores que lo motivaron a seguir, a armar su vida. A crecer. Para él, el deporte es una herramienta social muy importante. “Se debería cambiar la mirada hacia los deportistas paralímpicos y valorizarnos como verdaderos atletas. Somos el reflejo para muchos chicos con discapacidades”, concluye.