Más allá de no ocultar su fastidio con el arbitraje de Jesús Gil Manzano, José María Giménez rescató el punto que obtuvo Atlético de Madrid tras igualar 1-1 contra Real Madrid en el Santiago Bernabéu.

"Fue un partido sufrido, trabajado, que se nos puso cuesta arriba cuando nos expulsaron a Ángel (Correa), que por lo que me dijeron no era para expulsión", señaló el defensor central en diálogo con el canal oficial del Colchonero.

"Te da bronca esa situación, porque con el diario del lunes pensás qué hubiera pasado si no hubiera sido expulsado, pero lo juzgarán quienes lo tengan que juzgar, nosotros a lo nuestro y al final es un punto importante por cómo se dio el partido y por lo que significa jugar acá también", continuó.

Y completó: "Es un punto que suma, que nos deja contentos y es importante, me quedo con que al final estamos todos para luchar por el mismo objetivo, estamos todos para competir, sea quien sea que le toque jugar".

Además, consultado por el objetivo de clasificar a la Champions League, Josema comentó: "Todos los partidos de La Liga son difíciles, no existen rivales fáciles. Dependerá mucho de nosotros y de cómo sigamos buscando progresar y seguir por la línea del sacrificio y de la humildad".

Por último, el uruguayo volvió a referirse al arbitraje: "Es evidente que esto alguien lo tendrá que hablar, espero que lo hagan y que tengamos todas las cosas claras. Estas cosas restan muchísimo y sobre todo dan mucha bronca. Ojalá que los que tengan que actuar, actúen, y a nosotros nos dejen tranquilo".

Jan Oblak, por su parte, fue aún más crítico y elocuente en su entrevista con DAZN: "Siempre que jugamos contra Real Madrid nos expulsan a alguien. A lo mejor en el siguiente derbi empezamos el partido directamente con un jugador menos".

Foto: David S. Bustamante/Soccrates/Getty Images