Yahoo Noticias Javier Hernández no hubiera cambiado nada en Qatar 2022 y es momento de dejar de llorarle
En teoría, Qatar 2022 debía ser el Mundial de Javier Hernández: el punto más alto de su carrera, esa postal que debía coronar una carrera repleta de sacrificios y de goles. Pero Qatar 2022 es el Mundial que no fue en la vida de Chicharito. Desde 2019, Hernández fraguó el desenlace: después de una indisciplina, según contó Gerardo Martino a José Ramón Fernández (y el periodista lo reveló a Proceso), Hernández no fue bien visto por los líderes del vestidor tricolor. Todo quedó dicho.
Desde entonces, los debates se han sucedido uno tras otro más o menos con los mismos matices: ¿qué pasaría si Hernández estuviera en el seleccionado nacional? Y después del Mundial, otra vez: ¿qué hubiera pasado si él hubiera estrado presente? Nada diferente, de eso podemos estar seguro, aunque nos guste imaginar lo contrario: que con Chicharito dentro del campo México al menos habría eliminado el ridículo de irse eliminado en fase de grupos.
Hernández, ya desde la perspectiva del presente, se ha dado tiempo para hablar del dolor que más impacto tuvo en él, y no fue precisamente quedarse fuera de la Copa del Mundo: “¿Me dolió no estar en Qatar? Fíjate que sí y no porque he estado muy tranquilo con ese tema. La gente lo ha estado viendo, que estoy muy pleno, muy feliz, todo muy acomodado y aceptando que eso no era decisión mía. Aunque la gente no lo crea y no tenga muchísimo contexto, hice todo dentro de la cancha y también fuera de ella para poder estar ahí y había decisiones que estuvieron totalmente fuera de mi alcance. Más que me dolió no ha haya podido estar, me dolió más que México se haya quedado fuera en fase de grupos”, dijo el delantero del Galaxy en entrevista con TUDN.
Su nombre permaneció en la ilusión de muchos aficionados incluso en las semanas finales, aunque para esas alturas era más que evidente que Martino no lo tomaría en cuenta. También se clamó por su regreso a mediados de 2021, quizá ahí con más fuerza que nunca, pues México experimentaba una crisis total en la delantera: sin Raúl Jiménez, que se recuperaba de su lastimosa fractura de cráneo, mientras se hacían experimentos de todo tipo: Funes Mori, Henry Martín, Alan Pulido, jugador sin centrodelantero y poner ahí a Hirving Lozano.
El repunte goleador de Hernández en la MLS en esa época activo la ilusión de volver a verlo con la playera de la Selección de la que es un histórico: máximo anotador con 46 tantos. Pero no pasó nada fuera de la rutina. Martino lo ignoró hasta el cansancio y se la jugó con sus nombres hasta el final. En Qatar pasó lo que pasó y Hernández volvió a ser añorado, aunque, incluso si no lo hubieran vetado, ya no tenía mucho que ofrecerle a la Selección. Al igual que con otros jugadores, lo mejor de él se ha visto y ni siquiera esa versión sirvió para que México pudiera contar una historia diferente en Copas del Mundo.
“Todos se equivocan siempre que hacen la lista, porque tú harías una, yo haría mi lista, él hizo su lista y él creía que esos 26 jugadores eran los indicados para jugar. Yo creo que siempre habrá esa duda sobre si se equivocó o no”, ha dicho Héctor Herrera a TUDN sobre la convocatoria de Martino. Y sí, siempre quedará la espina de que Hernández, un referente del Tri guste o no, debió tener un último Mundial, sobre todo porque hizo los méritos deportivos para estar ahí. Pero de eso a creer que pudo cambiar la historia del Tri hay un mundo de distancia y es mejor dejar descansar ese sueño hipotético.
