El incómodo momento de Alberto Fernández con el canciller alemán por una pregunta que no era para él

El canciller alemán Olaf Scholz y el presidente argentino, Alberto Fernández, se dan la mano después de una reunión en la cancillería en Berlín, Alemania
Markus Schreiber

Desorientado, Alberto Fernández terminó de oír la traducción simultánea. Frunció el ceño, en un gesto de incomodidad, y después río sonoramente. Titubeó un segundo y tomó la palabra mientras abría los brazos: ”Asombrosa esa pregunta. Me impresiona. Eh...”. Un silencio en la sala y la mirada del canciller alemán Olaf Scholz lo hicieron dudar. Hasta que se dio cuenta que la pregunta no era para él y trató de salir del paso con una broma: “Gracias a Dios no tengo que contestarla yo. Sería muy duro si yo la contestara”.

El episodio despertó risas en la sala de conferencias del gobierno alemán, en Berlín. Un periodista local había lanzado tres preguntas seguidas a los jefes de gobierno y la última es la que tomó por sorpresa a Fernández: “Su ministra de Defensa está siendo criticada por haber tomado el helicóptero con su hijo, ¿entiende estas críticas que se han formulado?, ¿cree que ha obrado bien?”.

La confusión, acaso asociada a la traducción o a alguna distracción, quizá tuvo que ver con que el periodista había querido saber al principio la posición argentina sobre el suministro de armas de la Unión Europea a Ucrania. El caso de la ministra de Defensa, Christine Lambrecht, estalló el martes a partir de una publicación de Business Insider: alude a un viaje privado que ella y su hijo de 21 años hicieron en un helicóptero gubernamental a la isla de Sylt, después de un acto oficial en el norte de Alemania. Fernández evidentemente desconocía el caso de política interna.

Scholz se tentó cuando Fernández se dio cuenta de su gaffe. “Me hubiera gustado”, bromeó cuando el presidente argentino dijo eso de que “gracias a Dios” no tenía que contestar él.

Fernández, apurado por salir de ese momento, añadió: “Si tengo que dar mi opinión la doy, pero no creo que corresponda. Con gusto la doy. Eh. ¿Cuál era la pregunta? Me impactó tanto la última pregunta que me olvidé de la primera”.

La incomodidad había empezado incluso antes de ese episodio, cuando Fernández creyó que la conferencia ya había terminado. “Muchas gracias, con esto terminamos ¿no? Gracias a todos y todas”. Pero faltaba un último periodista: lo pactado era que preguntaran dos argentinos y tres alemanes.

Después del paso en falso del caso de la ministra, respondió la pregunta sobre Ucrania. “América Latina es un continente de paz que deplora la guerra. Y la verdad lo que quisiéramos es que nadie más levante un arma contra otro. Lo que más me conmueve es la indecencia de matar gente después de la pandemia”, dijo. Añadió que Argentina “no mandaría armas a nadie para que nadie más muera”. Pero evitó cuestionar directamente la decisión de la Unión Europea y de Alemania de armar a los ucranianos.

Scholz finalmente sí respondió -muy escuetamente- sobre la situación de la ministra. “Ella dijo que se han respetado todas las normas”.

La gira

Fernández llegó hoy a Berlín para la reunión con el canciller federal, después de un paso de 24 horas por España, donde estuvo con el presidente del gobierno, Pedro Sánchez, y con el rey Felipe VI.

Sin anuncios económicos previstos durante la gira, el Presidente volvió a insistir con la necesidad de impulsar acuerdos comerciales con los gigantes de Europa. “Es muy importante que avancemos en acuerdos entre el Mercosur y Europa. Hay que ver cómo actuamos sobre el proteccionismo de algunos países. Con Alemania, tendríamos que empezar por los acuerdos no económicos, sino por los científicos y culturales, que son los que nos sacan del debate proteccionista”, planteó y se mostró interesado en ser parte del bloque de los Brics, conformado por Brasil, Rusia, India, China y Sudáfrica.

“Lo peor es que la guerra nos haga volver a un esquema mundial bipolar. Es lo peor que podría pasar pasarle al mundo. La Argentina le interesa ser parte y acercarse a los Brics. Allí está nuestro primer socio comercial, que es Brasil”, señaló.

La gira continuará en París, donde se verá con el presidente Emmanuel Macron el viernes.