“Impaciencia y desconcierto”: qué significa que Vladimir Putin haya cambiado al comandante militar ruso en Ucrania

El presidente ruso Vladimir Putin
El presidente ruso, Vladimir Putin, designó al jefe de Estado Mayor para dirigir las operaciones en Ucrania

PARÍS-. Frente al fracaso militar, un nuevo responsable. Rusia eligió el miércoles a su jefe de Estado Mayor para dirigir las operaciones en Ucrania, reflejo de la impaciencia y el desconcierto de Moscú ante una guerra que no consigue ganar, según los expertos.

Nombrado a finales de octubre, el temido Serguei Surovikin permaneció en el cargo apenas tres meses. Fue relegado a número dos, por detrás de Valeri Guerasimov, en la cima de la jerarquía militar rusa desde hace una década.

Valeri Guerasimov, nuevo comandante del ejercito ruso
Valeri Guerasimov, nuevo comandante del ejercito ruso - Créditos: @Anadolu Agency

Tanto en Moscú como en Occidente, los observadores hablan de la impaciencia del presidente ruso, Vladimir Putin, ante la resistencia ucraniana, la confusión del mando ruso confrontado a exigencias irrealizables y la promesa de una ofensiva mayor.

En Rusia, y en el mundo, es muy poco habitual que un jefe del Estado Mayor -Guerasimov conserva esta función- se dedique a una operación en particular. Y es que quien coordina, anticipa y evalúa la amenaza global no puede ser quien dirige en el terreno.

“La última vez que esto ocurrió fue en 1941 durante la invasión nazi”, recordó un analista moscovita, bajo anonimato.

En plena batalla

Guerasimov, número dos en la jerarquía militar después del ministro de Defensa, lleva el maletín nuclear. “¿Lo llevará con él” a Ucrania?, ironiza el experto. En su opinión, este nombramiento “viola todas las reglas existentes” del mando militar. Una decisión que muestra que “las cosas no están sucediendo como estaban previstas”.

En efecto, tras casi 11 meses de ofensiva, Rusia solo puede constatar el estancamiento del conflicto.

El lanzacohetes múltiple Grad del ejército ucraniano dispara cohetes contra posiciones rusas en la línea del frente cerca de Soledar, región de Donetsk, Ucrania
El lanzacohetes múltiple Grad del ejército ucraniano dispara cohetes contra posiciones rusas en la línea del frente cerca de Soledar, región de Donetsk, Ucrania - Créditos: @LIBKOS

Actualmente, las ciudades de Bakhmut y Soledar (este) son escenario de intensos combates. “No es coherente cambiar de jefe de operaciones en plena batalla”, estimó para la AFP Tatiana Kastoueva-Jean, investigadora sobre Rusia en el Instituto Francés de Relaciones Internacionales (IFRI). “Esto desequilibra toda la jerarquía, de arriba abajo. No puede ser una buena señal”, añadió.

Los expertos coinciden en que esta decisión podría apuntar a una aceleración de la operación rusa. Desde hace varios meses se habla de una ofensiva y tampoco se excluye una nueva movilización, tras un primer llamamiento en septiembre de 300.000 hombres.

“Es evidente que este reajuste significa que hay proyectos de extensión de la escala de combates”, afirmó el experto militar ruso independiente Alexander Jramchijin, para quien el objetivo es asegurarse el control efectivo de las regiones reivindicadas por Rusia (Lugansk, Donetsk, Jersón y Zaporiyia).

Para Mark Galeotti, del centro de reflexión británico Royal United Services Institute (RUSI), esta decisión es la “confirmación, si es que es necesaria, de que van a producirse ofensivas considerables y que Putin admite que la mala coordinación es un problema”.

Lealtad

Ante la ausencia de éxitos militares recientes, Putin constata la menguante eficacia de su ejército. Esto lleva a las “eternas preguntas rusas: ‘de quién es la culpa’ y ‘qué se debe hacer’”, comentó en Twitter Tatiana Stanovaya, especialista de las élites rusas.

Pero el nombramiento de Guerasimov no parece responder a estas cuestiones. “Todo el mundo está sorprendido: los hombres de Prigozhin [el jefe del grupo paramilitar Wagner], los corresponsales militares y el ejército. Un gran número de personas muy informadas parecen no comprender la sustancia de esta decisión”, añade.

Algunos consideran que se trata de enviar a Ucrania a un hombre de una lealtad indiscutible. Pero, para Galeotti, “si no se deja de nombrar, cambiar, quemar sus estrellas, fijar exigencias irreales y retrogradar de forma arbitraria, esto no genera ninguna lealtad”.

Con este nuevo cambio en la dirección militar, Putin no tranquilizará a una parte de la élite de Moscú ni a la opinión rusa. Está aumentando “un descontento sobre por qué no hemos ganado esta guerra”, admitió Jramchijin, que acusó a “las malas estimaciones en el principio” del conflicto.

Gente pasando junto a una casa dañada por lo que autoridades rusas en Donetsk dijeron que había sido un ataque ucraniano en Donetsk, en la región de Donetsk controlada por Rusia, en el este de Ucrania, el martes 10 de enero de 2023. (AP Foto)
Gente pasando junto a una casa dañada por lo que autoridades rusas en Donetsk dijeron que había sido un ataque ucraniano en Donetsk, en la región de Donetsk controlada por Rusia, en el este de Ucrania, el martes 10 de enero de 2023. (AP Foto)

Otros analistas también ven en este giro jerárquico una señal de las intrigas entre bastidores. “La batalla de la comunicación en torno a Soledar muestra que cada uno, tanto el ejército como Wagner, intenta barrer para casa y atribuirse los méritos”, aseveró Kastoueva-Jean.

Agencia AFP