Las posibilidades de lograr la defensa del título en el Seis Naciones, este sábado, son mínimas para Francia. Sin embargo, en el cuadro galo entienden que no hay imposibles hacia el encuentro con Gales, en París, para el que contará con el respaldo de registros positivos.

Para esta última fecha en el certamen, en el Stade de France, Les Bleus tendrán seis cambios. Y Uini Atonio será uno de los ingresantes, en lo que será su regreso tras tres semanas de suspensión, luego de una entrada alta a Rob Herring, en la derrota del mes pasado ante Irlanda, en Dublin, la única del seleccionado en la campaña.

Ese revés en Irlanda significa que los futuros anfitriones de la Copa del Mundo dispongan de pocas chances de consagrarse, ya que necesitan lograr una victoria con puntos de bonificación sobre los galeses y luego esperar que Inglaterra derrote al Trébol.

Mientras tanto, Romain Taofifenua reemplazará al lesionado Paul Willemse en el único otro cambio del combinado de Fabien Galthie, desde su aplastante victoria por 53-10 sobre los ingleses, en Twickenham, la semana pasada.

Hacia este juego definitorio, Francia dispone de un respaldo como local. Es que, de acuerdo a los datos proporcionados por la agencia Opta, ganó nueve de los últimos diez juegos en casa en el Seis Naciones (una derrota), de los que cuatro fueron por este tiempo. Al mismo tiempo, anotó, al menos, un try en cada mitad de los partidos en un período que comenzó en la apertura de la edición de 2018, ante Irlanda.

A su vez, los galos tienen motivos para envalentonarse por el bicampeonato en el Seis Naciones. Esto se debe a que acumula ocho conquistas en los recientes nueve encuentros por el torneo, desde que comenzó el certamen pasado. El más reciente contra Inglaterra, por un margen de 43 unidades, fue el mayor triunfo conjunto tras el 56-13 contra Italia, en 2005.

No obstante, los últimos antecedentes contra Gales tienen su cuota de importancia y más si fueron positivos. Tal es así que cosecharon tres éxitos en cada uno de los recientes juegos por la competición, después de haber ganado apenas uno de los ocho anteriores (siete caídas). Los pasados seis cotejos se definieron por márgenes de cinco unidades o menos entre los seleccionados.

Por su parte, los Red Dragons ya no tienen chances de pelear por el trofeo. Aunque sus intenciones pasarán por maquillar la participación en el Seis Naciones, un motivo para el que, recientemente, dieron un buen paso.

Es que los dirigidos por Warren Gatland volvieron a ganar en el campeonato, frente a Italia, por 29-17, tras seis jornadas al hilo sin hacerlo. Así, evitaron alcanzar la mala racha más larga en la competencia, que fue de siete, entre 2006 y 2007, con un empate y seis derrotas.

En el afán por darle color a la imagen en el certamen, el entrenador de Gales optó por seis cambios para el choque en el que Taulupe Faletau llegará al centenar de partidos. El apertura Dan Biggar, los centros George North y Nick Tompkins y el segunda línea Alun Wyn Jones figuran entre los titulares.

Asimismo, Louis Rees-Zammit y Aaron Wainwright también fueron citados para estar desde el arranque en la capital francesa, con Jac Morgan y el lateral lesionado Liam Williams entre los que quedaron fuera.

Alineaciones confirmadas:

Francia: Thomas Ramos, Damian Penaud, Gael Fickou, Jonathan Danty, Ethan Dumortier, Romain Ntamack, Antoine Dupont; Cyril Baille, Julien Marchand, Uini Atonio, Thibaut Flament, Romain Taofifenua, Francois Cros, Charles Ollivon, Gregory Alldritt.

Gales: Louis Rees-Zammit, Josh Adams, George North, Nick Tompkins, Rio Dyer, Dan Biggar, Rhys Webb; Wyn Jones, Ken Owens, Tomas Francis, Adam Beard, Alun Wyn Jones, Aaron Wainwright, Justin Tipuric, Taulupe Faletau.

Foto: ANNE-CHRISTINE POUJOULAT/AFP via Getty Images