Fernando Alonso hace autocrítica sincera sobre su mayor descalabro deportivo

La Fórmula 1 se acerca a su momento decisivo en una de las temporadas más emocionantes de los últimos años. Las próximas dos carreras van, sobre todo, de dilucidar quién será el próximo campeón del Mundo: Max Verstappen o Lewis Hamilton. Antes, el Gran Circo ha tenido momento para reconocer, de forma accidental, a la figura de Fernando Alonso. El asturiano logró un meritorio podio en Qatar, donde terminó en tercer posición contra todo pronóstico, y, después, fue el invitado al podcast 'Beyond the grip', dondre repasó su carrera y, en cierta forma, se celebró su figura.

En su entrevista con Tom Clarkson, el asturiano se abrió por completo y no rehuyó ningún tema. También hizo autocrítica de una forma que no se le había escuchado en público. Sobre todo, respecto a la infame temporada 2007, en la que compartió equipo con Hamilton y, pese a tener el mejor coche de la parrilla, terminaron envueltos en una lucha fraticida que le otorgó el campeonato a Kimi Raikkonen.

Pese a que no es la primera vez que el español descarga de culpa al piloto británico, en esta ocasión también quiso cargar con parte de responsabilidad de lo ocurrido aquel año en McLaren. "En 2007 ninguno de los dos estábamos preparados para ello. Es entendible que él no estuviese preparado porque era su primer año en la Fórmula 1. Yo no estaba haciéndolo lo mejor que puedo. De hecho, yo no estaba realmente integrado en el equipo. Y claro, tuvimos todas esas peleas entre los dos, ese estrés de estar los dos peleando por el campeonato, y no fuimos bien dirigidos", recordó.

De esta manera, Alonso admite su cuota de responsabilidad en el que para muchos es el mayor descalabro de una carrera, por otro lado, memorable.

Contra el mito de la Cenicienta

De hecho, a lo largo de la entrevista, el ovetense huyó en todo momento del cartel de eterna Cenincienta que, en ocasiones, pende sobre él. Sin ir más lejos, Clarkson le preguntó directamente si cree que no ha ganado todo lo que por talento quizá hubiera debido. Una apreciación muy extendida respecto al asturiano, pero que el se apresura en negar. "En la parrilla hay 20 pilotos increíbles y, probablemente, el 90% de ellos nunca ganen una carrera, y eso es injusto porque lo merecen. Así que, cuando pienso en mi carrera, creo que he tenido la suerte de ganar dos campeonatos del Mundo, además LeMans, Daytona, el Mundial de resistencia, el Mundal de karts... He ganando mucho más de lo que hubiera soñado", reflexionó.

Y es que Alonso tiene la imagen del underdog perenne. El piloto que ha de sobreponerse a todo y todos para conseguir el triunfo. De hecho, hay un mito sobre su figura bastante extendido que él mismo se atreve a echar para atrás: aquel que dice que solo ha contado una vez con el mejor coche de la parrilla, en el infame año de McLaren en 2007.

"Creo que en mi carrera en Fórmula 1 he conducido el mejor coche en tres ocasiones. La primera mitad de la temporada 2005, porque Kimi Raikkonen y McLaren eran más rápidos pero no tenían la fiabilidad necesaria. En 2006, también la primera mitad de la temporada, hasta que Ferrari y Bridgestone aparecieron con un paquete muy rápido. Y en 2007... en 2007 hubo varios altibajos. No creo que fuésemos claramente el coche más rápido. Había carreras en las que McLaren era el coche más rápido, pero después había otras en las que lo era Ferrari", resumió.

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