En una nueva jornada de Premier League disputada en Old Trafford, el partido de Manchester United frente a Aston Villa tuvo las incidencias que tuvieron que ver con las protestas contra la familia Glazer.

El viernes fue el tercer, y se espera que sea definitivo, plazo para que los interesados ​​presenten ofertas de compra del club inglés. Sheikh Jassim y Sir Jim Ratcliffe presentaron ofertas a los Glazer, quienes se enfrentaron a la furia de los fanáticos de los Red Devils desde su adquisición apalancada en 2005.

El humo de las bengalas en el exterior se elevó a través de los vestíbulos y llenó el aire dentro de Old Trafford mientras los jugadores calentaban. Además, un grupo pidió un boicot del partido de 18 minutos.

Mientras se veían asientos vacíos hasta antes de empezar, se escucharon cánticos contra los propietarios desde el principio y surgieron imágenes del entrenador Erik ten Hag sosteniendo brevemente una bufanda verde y dorada.

Cuando se le preguntó el enojo de fondo podría dificultar las cosas para su equipo, el director técnico neerlandés del United dijo: "Realmente sentimos que los fanáticos estaban detrás de nosotros. Tienen que confiar en nosotros, así que nos centraremos en eso".

Y concluyó: "Estoy seguro de que cuando mantenemos las actuaciones como lo hicimos durante toda la temporada, los fanáticos nos respaldan y hay mucha energía. Creo que existe un vínculo muy fuerte entre los fanáticos y los jugadores".

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