Facundo Campazzo vivió su mejor noche estadística en la NBA, con récord de puntos, un doble-doble y... varios lujos
Mejor, imposible. Así fue el comienzo del año para Facundo Campazzo, que en el primer día de 2022 batió su récord de puntos en un partido de NBA, consiguió su segundo doble-doble en la mejor liga del mundo, empató sus mejores marcas de robos y tapones en una noche y entregó un festival de acciones de lujo. Todo, en la victoria de Denver Nuggets como visitante de Houston Rockets por 124 a 111, con la que el equipo de Colorado se consolidó en el quinto puesto de la Conferencia del Oeste.
Habrá quien diga que Houston es hoy el peor equipo del Oeste de la NBA y que le faltaron sus figuras, y no le faltará razón. Como también es cierto que Denver no dispone de varios jugadores importantes por lesiones y coronavirus y hasta faltó parte de su cuerpo técnico. En ese contexto, Campazzo y fue el mejor de la noche texana, su mejor en el año y diez días que lleva en la liga de Estados Unidos.
Tan alta fue en los números la producción del argentino en sus 34 minutos de acción que:
marcó su récord de tantos en una jornada: 22, tres más que los de su plusmarca previa (registrada dos veces, en la temporada anterior)
consiguió su segundo doble-doble en la NBA, con esos 22 puntos más 12 asistencias
empató su récord de robos: 5 quites de balón, cantidad que había alcanzado dos veces en su temporada de debut
igualó su plusmarca de bloqueos: 2 tapones, a pesar de sus 1,78 metros de estatura
con esos 12 pases-gol, quedó a uno de su récord y estableció la cantidad más alta de esta temporada (hizo tres veces 8 asistencias)
añadió 4 rebotes (amén de 4 pérdidas de pelota)
tuvo alta efectividad en tiros, su habitual punto bajo: 4 de 6 en dobles (66,6%), 3 de 5 en triples (60%) y 5 de 5 en libres
Compacto de la mejor noche individual de Campazzo en la NBA
Y tan alta fue la producción del argentino fuera de la planilla que hizo una asistencia de caño (a JaMychal Green entre las piernas de Christian Wood) y, en una misma jugada, dos fajas: una, para eludir con un crossover impactante a Kevin Porter Jr., y la segunda, para desairar a David Nwaba y habilitar a Aaron Gordon, dejándolo casi bajo el aro.
Lo que dijo el argentino después de su partido récord
Poco experimentados, los jóvenes de Rockets fueron presa fácil de la inteligencia y la habilidad de Campazzo, que tuvo los mejores números de su carrera en una jornada de NBA pero en sus declaraciones minimizó su tarea y puso por encima el beneficio del equipo.