Fórmula 1. Las consecuencias ocultas del accidente de Silverstone para Red Bull

Max Verstappen desciende del auto, después del espectacular accidente que protagonizó en el Gran Premio de Gran Bretaña; los costos económicos y la latente posibilidad de penalizar si el equipo debe ensayar un cambio de motor, daños colaterales del golpe en Silverstone
Captura

El fuego no se consume. Las declaraciones de Bernie Ecclestone, ex patrón de la Fórmula 1, del campeón mundial Mika Hakkinen, del siempre exacerbado Helmut Marko y del director de carreras Michael Masi mantienen viva la polémica, tras el accidente que protagonizaron Lewis Hamilton (Mercedes) y Max Verstappen (Red Bull Racing), que terminó estrellándose con el RBR16B a 300km/h en la Curva de Copse, en Silverstone. El neerlandés descansa y se repone de los dolores provocados por un impacto de 51G, las tomografías y la resonancia magnética no arrojaron lesiones, mientras el equipo se enfoca en la siguiente cita, del 30 de julio al 1° de agosto, en Hungría, un circuito en donde su mejor espada nunca ganó y Hamilton, archirrival en la batalla por la corona, tiene un fabuloso récord de ocho victorias. Para el nuevo duelo, recuperar el motor Honda para no arriesgar con penalizar en la grilla en el futuro y limitar los gastos en la reconstrucción del auto N°33 se imponen como un mantra en Milton Keynes.

El calendario de los Juegos Olímpicos de Tokio

El recorte en el campeonato de Pilotos, donde Verstappen aventaja a Hamilton por ocho puntos, y también en el de Constructores -Red Bull Racing (RBR) supera a Mercedes por cuatro unidades- genera la necesidad de una reacción inmediata, aunque para recobrar la firmeza de los cinco triunfos en cadena, Christian Horner -jefe de RBR- precisa amortizar los daños en la fábrica. La cercanía del circuito a Milton Keynes y que el calendario no ofrezca competencia el fin de semana posibilitaron iniciar con rapidez la evaluación de la gravedad del impacto sobre el auto. La contraparte es el motor, ya que Toyoharu Tanabe -director técnico de Honda F.1- desea enviarlo a Japón: si alguno de los seis elementos principales es desechado, el reemplazo dejará a Verstappen al borde de penalizar en la grilla en lo que resta del calendario.

El viaje descontrolado del RBR16B de Max Verstappen en Silverstone; el neerlandés no sufrió heridas y se recupera en su casa de Mónaco
Captura


El viaje descontrolado del RBR16B de Max Verstappen en Silverstone; el neerlandés no sufrió heridas y se recupera en su casa de Mónaco (Captura/)

Las unidades de potencia de los F.1 están formadas por un motor V6, de 1.6 litros limitado a 15.000rpm; un turbocompresor, dos sistemas de recuperación de energía híbrida -MGU-K y MGU-H-, una batería para almacenar energía y una centralita electrónica. Esos elementos pueden ser reemplazados en un número limitado de veces sin incurrir en una sanción para los pilotos. “Con la primera imagen del auto levantado pensé que los daños eran enormes, pero aparentemente es menor a lo que regaló la transmisión. El daño real del motor no se sabe si no lo sacamos del auto, por esa razón nos gustaría mandarlo a la fábrica de Sakura y examinarlo antes de tomar una decisión”, señaló Tanabe.

Tokyo 2021: el calendario argentino de los Juegos Olímpicos del viernes 23 de julio

Un golpe de 51G impone tomar una difícil determinación: conservar la unidad de potencia con riesgo de una rotura y un abandono o ensayar el cambio y someterse a la posibilidad de un castigo en el futuro. De inclinarse por una nueva unidad de potencia, sería el último pase libre para Verstappen.

Con las nuevas reglas financieras de la FIA, el desembolso económico de un accidente grave repercute en el desarrollo actual y de futuras actualizaciones. En 2021, los equipos no pueden superar el límite de 145 millones de dólares en el desarrollo, fabricación y funcionamiento. En la carrera por ahorrar -traslados de personal a proyectos que son ajenos a la F.1-, Mercedes utilizó más acero y menos carbono en la suspensión, con el objetivo de garantizar una mayor durabilidad de las piezas. La escudería de Woking sufrió el mismo trastorno que desanda RBR, cuando Valtteri Bottas chocó con George Russell (Williams) en el Imola, en abril. Toto Wolff, jefe de Mercedes, calculó entonces que el accidente tuvo un costo de 1.500.000 dólares.

“Una serie de accidentes con daños significativos excederá los cálculos de asignación para la fabricación de nuevas piezas. En el mundo ideal de la F.1, los elementos se usan hasta que se rompen o quedan obsoletos, pero en la vida real los accidentes graves tienen un costo y el dinero para reparaciones que se usa en reconstruir un auto afecta el presupuesto de desarrollo”, explicó Andrew Shovlin, el director de ingeniería de Mercedes.

Autos destruidos  en el Gran Premio de Emilia-Romagna: el Mercedes de Valtteri Bottas y el Williams de Goerge Russell, protagonistas del accidente en el circuito de Imola
picture alliance


Autos destruidos en el Gran Premio de Emilia-Romagna: el Mercedes de Valtteri Bottas y el Williams de Goerge Russell, protagonistas del accidente en el circuito de Imola (picture alliance/)

Los costos adicionales causados por accidentes explican la demora en un acuerdo entre la F.1 y los Constructores de diagramar un calendario de tres grandes premios y un Sprint en 2021. “Con dividir US$ 145.000.000 en 23 fechas hay una aproximación de lo que se necesita para competir. Si se agregan carreras Sprint, el costo aumenta por el desgaste de las piezas”, reclamó Horner. El acuerdo contempló un reembolso de 100 mil dólares ante un abandono por daños en una carrera Sprint, una cifra que RBR capturó con la deserción del mexicano Sergio Checo Pérez en Silverstone. La bonificación se volvió mínima, tras los costos que deberán afrontar en Milton Keynes por el accidente de Verstappen.