Un español es despedido por hacer el saludo fascista en el estadio del Lazio
Los animales son un recurso habitual en la particular heráldica del fútbol. Muchos son los clubes que se identifican con uno de ellos, ya sea plasmándolo en su escudo o utilizándolo como apodo. Normalmente, se trata de fieras que han de representar los valores del equipo, el escudo de armas de la ciudad o, símplemente, buscan infundir el temor entre sus rivales. En España los ejemplos son incontables, desde el murciélago del Valencia al apodo de los 'leones' que ostentan los jugadores del Athletic Club. Muchos, además, han sido representados en forma de mascota, generalmente en una versión amigable dirigida a los seguidores más pequeños.
Lo de llevarlos al estadio, eso sí, no es tan habitual. Principalmente, porque un campo de fútbol, con la gran congregación de gente y ruido acumulado que ello supone, no parece el hábitat más idóneo para ellos. Uno de los pocos clubes que mantiene la tradición en ese sentido es el Lazio italiano, cuyo emblema es el águila imperial. Para ello, el cuadro romano cuenta con Juan Bernabé, adiestrador español que hace las delicias de los aficionados junto a Olympia, que así se llama el ave.
O hacía, porque el halconero de 52 años ha sido despedido por el club tras la publicación de un vídeo en el que se le ve haciendo el saludo fascista a la grada con el águila en su brazo. Así lo ha comunicado el equipo celeste, tras el escándalo que han supuesto las imágenes en el país transalpino.
Juan Bernabè, espanhol adestrador da águia da Lazio, filmado fazendo a saudação fascista a torcedores no Olímpico. Fato já gera reações no mundo político e na comunidade judaica da Itália.
pic.twitter.com/0pWtKTXoOw— Leonardo Bertozzi (@lbertozzi) October 20, 2021
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En el clip, de unos pocos segundos, se puede observar nítidamente a Bernabé, completamente uniformado del Lazio, hacer el llamado saludo romano para jolgorio de los aficionados laziales, que le jalean desde la grada. No en vano, el club lazial posee un problema tradicional con sus ultras, considerados unos de los más radicalizados de toda Europa y de tendencia abiertamente fascista.
En las gradas del Olímpico de Roma se han podido ver con impunidad banderas fascistas y pancartas alabando la figura de Benito Mussolini, quién además siempre ha sido identificado como seguidor del conjunto celeste. Un asunto que le ha generado una leyenda negra de la que desde la entidad se han intentado desmarcar en los últimos años.
Juan Bernabé llevaba ligado al club romano desde la temporada 2010/11 y se había convertido en una de las caras familiares del cuadro lazial. De hecho, el vuelo de Olympia antes de cada partido es una seña de identidad del club. Antes, el español había ejercido el mismo cargo en el Benfica, club que también posee un águila por emblema y guarda una costumbre similar.
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