Enzo Fernández a Portugal: tras las huellas que les cambiaron la vida a Di María, Enzo Pérez, Otamendi, Licha López y Lucho González

Enzo Fernández y su amor por River; la carrera del volante continuará en Benfica, el club que puede ser su trampolín europeo
Enzo Fernández y su amor por River; la carrera del volante continuará en Benfica, el club que puede ser su trampolín europeo - Créditos: @Alfieri Mauro

El pasado 10 de mayo, el diario Record de Portugal puso en tapa el interés de Benfica por Enzo Fernández, el cual fue tomado con pinzas y algo de desconfianza tanto en la prensa argentina como en las múltiples y contundentes opiniones en las redes sociales.

Quizás por el sentimiento de pérdida prematura de un futbolista de suma jerarquía para el medio local, parecía ser que al joven mediocampista de River no le cabía otro futuro que una transferencia directa a uno de los actuales tanques europeos como Real Madrid, Manchester City, Paris Saint Germain o Manchester United, cuando es una realidad que en los últimos años fueron muy pocos los futbolistas transferidos sin escalas a esos clubes.

Actualmente en Benfica, Nicolás Otamendi llegó a Europa a través Porto, que se lo compró a Vélez
Actualmente en Benfica, Nicolás Otamendi llegó a Europa a través Porto, que se lo compró a Vélez - Créditos: @Gualter Fatia

Con el pasar de las semanas y principalmente la espectacular venta del uruguayo Darwin Núñez a Liverpool en 100 millones de euros, dinero por el cual las Águilas vinieron decididamente a concretar la transferencia de Enzo Fernández, no fueron pocos los que cayeron en la cuenta de que Benfica no sólo es un gigante e histórico club europeo que ganó dos veces la Liga de Campeones sino que también es una institución que hace valer su expertise en esos excitantes periodos de apertura de libros de pases. Si bien su billetera, claro, es menor que la de los viejos y nuevos ricos del continente, el club que se hizo famoso mundialmente por Eusébio da Silva Ferreira se mueve como pez en el agua descubriendo y asegurándose aquellos nuevos talentos que proyectan los clubes sudamericanos. Así es que junto a sus clásicos rivales Porto y Sporting, históricamente hacen que Portugal sea una de las más importantes puertas de ingreso a Europa para muchos argentinos. Varios de ellos han triunfado, otros tantos se perdieron como meras apuestas, pero lo concreto es que dichos clubes portugueses, aunque en la actualidad no tengan el poderío para ganar una Champions o una Europa League, se hacen respetar en el mercado de pases ya que saben como pocos lo que es comprar bien y vender bien.

Si bien los ojos están puestos en todas las latitudes, siempre están pendientes de lo que pueda surgir en Sudamérica y por supuesto en la Argentina. Los buscan aquí porque en la mayoría de los casos los futbolistas tienen una calidad por encima de la media y porque también es un mercado muy accesible desde lo económico. En ese sentido, los grandes de Portugal sacan ventaja llegando antes a los jugadores y sus ofrecimientos logran convencer a los clubes sudamericanos. “En algunos casos, ni siquiera necesitan pagar el valor real de los futbolistas. Pagan una parte y después compensan con una futura venta”, explica Luis Avelas, jefe de redacción adjunto del diario Record de Portugal, advirtiendo sobre un modus operandi que encaja perfectamente con el caso de Enzo Fernández, transferido en 18 millones de euros a cambio del 75% del pase.

Una vez allá, la adaptación se simplifica para aquellos que están dispuestos a aprovecharla. “Los futbolistas argentinos se adaptan con facilidad, no solo a nuestro fútbol que es rápido y con rigor físico, también a nuestro estilo de vida, ya que los portugueses somos cálidos y nos gusta hacerle fácil la vida a los que viven aquí”, acota José Manuel Freitas, periodista portugués de gran trayectoria que es actual columnista en Correio da Manhã. Quienes efectivamente superan la adaptación futbolística y abrazan el estilo de vida portugués están en condiciones de explotar en las ligas Top. Y así como en un principio resulta accesible contratarlos, se hace luego muy difícil retenerlos de tener un buen andar tanto en la Liga portuguesa como en la habitual participación en torneos UEFA que tienen Benfica, Porto y Sporting.

Todo comenzó para Di María en Benfica, en 2008: luego, se sucedieron Real Madrid, Manchester United, PSG y... ¿Juventus?
Todo comenzó para Di María en Benfica, en 2008: luego, se sucedieron Real Madrid, Manchester United, PSG y... ¿Juventus? - Créditos: @Stephen Pond - EMPICS

¿Casos? Varios. Para la temporada 2007-2008, Benfica puso los ojos en Ángel Di María, un flaquito habilidoso surgido en Rosario Central. Se lo llevó por 6 millones de euros y se convirtió en un jugador de clase mundial al ser contratado por Real Madrid por 25 millones de euros. Para su reemplazo, las Águilas fueron a buscar a un talentoso juvenil llamado Nicolás Gaitán, a quien adquirieron en 8 millones de euros y unos años más tarde, luego de haber conseguido 10 títulos con el ex Boca, lo vendieron a Atlético de Madrid a cambio de 25 millones. También tuvo mismo destino Enzo Pérez, cuando Benfica le compró a Estudiantes el 50 por ciento de su pase en 3,5 millones de euros. Luego de jugar con sus ídolos Pablo Aimar y Javier Saviola, que habían recalado en Lisboa tras hacer importantes carreras en España, el mendocino fue vendido a Valencia en 25 millones de euros. Benfica fue además la puerta de ingreso a Europa para Franco Cervi, adquirido a Central en unos 5 millones de euros tras pelear cabeza a cabeza con Sporting. Si bien al jugador le sirvió en lo deportivo pasar luego al Celta de Vigo de Eduardo Coudet, Benfica solo pudo recuperar parte de la inversión al venderlo en unos 4 millones de euros.

Uno de las mejores contrataciones que hizo Porto en Argentina fue la de Luis González. Por él le pagó a River 3.6 millones de euros por la mitad de su pase. Y vaya si lo aprovechó: Lucho tuvo dos etapas en Dragão, siendo campeón en ambas y llegando a ser el capitán del equipo. El ex Huracán y River también fue campeón en Francia y al regreso a su continente ganó la Copa Libertadores con el Millonario y dos Copas Sudamericanas con Athletico Paranaense, sin olvidar que siempre estuvo considerado para la selección argentina y disputó el Mundial de Alemania 2006.

Lucho González convirtió el gol de Porto, en el empate ante Benfica. Fue 1 a 1.
Lucho González, el "Comandante" de Porto; emblema del club

Lisandro López, que en la actualidad despunta el vicio en Sarmiento de Junín, tuvo también una etapa brillante en Porto, que lo adquirió a Racing en una cifra cercana a los 5 millones de euros. Tras ganar dos Ligas, dos Copas de Portugal y una Supercopa de Portugal, se fue a triunfar al Olympique de Lyon donde obtuvo una Copa de Francia y una Supercopa de Francia. Luego de breves pasos por Qatar y Brasil, retornó a Racing para ser campeón y entrar en la galería de los ídolos del club. Si bien su carrera le dio para merecer algo más que siete partidos en la selección, quedó en la historia al haber sido sustituido por Lionel Messi para que la Pulga hiciera su debut en la Albiceleste en aquel partido amistoso con Hungría.

Quien sí cerró el círculo perfecto en Portugal fue Nicolás Otamendi. En 2010, Porto le pagó 4 millones de euros a Vélez por el 50 % de su ficha. El central campeón de América con la Albiceleste ganó allí tres ligas, una Copa de Portugal, cuatro Supercopas de Portugal y la UEFA Europa League. Tras un breve paso cedido en Atlético Mineiro, fue vendido en 12 millones de euros a Valencia que fue su trampolín para llegar y ser multicampeón en Manchester City. En la actualidad está cómodo en Benfica, a la espera del Mundial de Qatar y un soñado retiro en River.

Porto Vs Krasnodar. Agustin Marchesin.
Agustín Marchesín tuvo un buen paso en Porto. - Créditos: @Ramil Sidkov

Porto también fue la puerta de Europa para Agustín Marchesín, que llegó desde América de México para reemplazar a su ídolo Iker Casillas. “Me gustan esos desafíos en clubes donde si no salís campeón es un fracaso, y ese es el pensamiento de Porto: hay que campeonar”, le dijo el ex Lanús a LA NACION hace un tiempo, tras ganar con los dragones la primera de sus dos Ligas, a las que les agregó dos Copas de Portugal y una Supercopa. Vale aclarar que Porto fue también la primera experiencia europea de Hugo Ibarra, Lucas Mareque, Mario Bolatti, Sebastián Prediger, Diego Valeri y Renzo Saravia, aunque ninguno de ellos pudo capitalizar sus breves pasos por Dragão.

Sporting fue la puerta de Europa, entre otros, para Bruno Marioni, Facundo Quiroga, Fabián Rinaudo, Valentín Viola, Jonathan Silva y Alan Ruiz, aunque en los últimos años, el único futbolista que se consolidó como un jugador de ligas importantes y de selección fue Marcos Acuña, adquirido a Racing en ocho millones de euros y luego vendido en 12 millones a Sevilla.

Marcos Acuña, titular de la selección de Scaloni, hoy en Sevilla..., pero entró a Europa por Lisboa, por Sporting
Marcos Acuña, titular de la selección de Scaloni, hoy en Sevilla..., pero entró a Europa por Lisboa, por Sporting - Créditos: @Gualter Fatia

Una gran oportunidad. Aunque sea observado como un fútbol de segundo orden en el contexto europeo, los futbolistas argentinos que logran minutos, continuidad y mejor aún si salen campeones tienen grandes posibilidades de triunfar en las grandes ligas de Europa. “Una de las principales ventajas que tiene llegar a Portugal proveniente del fútbol argentino es que se pueden ir acostumbrando al ritmo de juego que hay en Europa. Es un campeonato más duro de lo que parece. Por ejemplo, en España se tiene la percepción de que no es un campeonato exigente pero varios españoles no triunfan en Portugal pese a que se llegue con ese aire de superioridad”, aporta con conocimiento y perspectiva el español José María Nolé, autor del libro “Fútbol portugués, historias, gestas y protagonistas”, quien a la vez advierte que Portugal es una potencia a nivel entrenadores y gracias al contacto con ellos los futbolistas argentinos se vuelven más cultos tácticamente.

Le llegó el turno a Enzo Fernández, pero antes varios argentinos supieron capitalizar el nivel de juego, la calidad de entrenadores y el amigable estilo de vida que se encontraron en Portugal, una de las principales puertas de Europa y, sin dudas, una gran oportunidad de seguir creciendo.