La eliminación de Diego Schwartzman en Roland Garros: poca energía, las chances que no aprovechó y el encuentro con una estrella del fútbol

La resignación de Diego Schwartzman después de fallar un tiro contra Novak Djokovic; el argentino terminó con 45 errores no forzados en su batalla contra el número 1 del mundo
Michel Euler

PARIS – Era muy difícil el reto, y no hubo batacazo. Con un resultado más amplio en las cifras que en el desarrollo, Novak Djokovic le ganó el duelo a Diego Schwartzman, se quedó con el pasaje a los cuartos de final, y dejó a Roland Garros sin argentinos en el cuadro masculino. El número 1 del mundo sacó amplias distancias con una victoria inobjetable por 6-1, 6-3 y 6-3, en dos horas y 15 minutos de acción. En el balance del torneo, fue una buena participación la del 16º del mundo, nuevamente en los octavos de final de su torneo preferido, aunque claramente superado en su eliminación por un adversario implacable.

¿Le podría haber ido mejor al Peque? Sí, porque en algunos tramos estuvo a la par en el desarrollo, con varios puntos y games parejos. Y no, al mismo tiempo, porque no concretó algunos de los factores que necesitaba realizar para estar a tiro en el resultado y en el dominio del juego. Ganó solamente el 56 por ciento de los puntos con el primer saque, y apenas el 32% (8 puntos de 25) con el segundo servicio, que Djokovic aprovechó para atacar con la devolución. Y, lo que más le debe haber dolido al Peque, esas chances que le dio el número 1 del mundo, y que no aprovechó: 1 de 8 en break-points. Le sucedió en el comienzo, en el tercer game del primer set, cuando el serbio sacó 15-40. No lo pudo capitalizar, y de inmediato Djokovic quebró y ganó cinco games en fila.

No encontré en ningún momento del partido la intensidad que necesitaba para ponerlo a él en aprietos, o hacer un partido más largo. Sentía que no podía sostener la intensidad punto tras punto, con Noval es diferente, porque jugamos rallies largos, él tiene una gran defensa, y se hace muy difícil ganarle puntos. Además, él estaba pegando muy limpio y yo no, no me sentía cómodo con las condiciones y eso fue clave”, consideró el Peque sobre lo sucedido en el polvo de ladrillo del estadio Suzanne Lenglen.

El 16º del ranking amplió su análisis: “Más allá del score, en el partido hubo muchos idas y vueltas. Yo cometí 14 errores más que él porque tuve un peor día. Desde luego, duelen esos errores porque no los tenés que cometer ante un rival así. Después, los break-points me hubieran servido para estar arriba un rato y quizá me hubieran dado más confianza. En el segundo y en el tercero también estuvieron esas chances, pero no las pude tomar porque no tomaba buenas decisiones. Se dio de esta manera. Tuve en el comienzo la chance de ponerme 2-1 y saque, no lo hice y me costó, y luego él fue de menor a mayor, cometiendo pocos errores y dominando el juego, y cuando tuvo la oportunidad estuvo mucho más fino que yo, y por ahí, cuando él tenía esos momentos no tan buenos, era yo el que no estaba tan fino para aprovechar. Creo que no fue mi mejor día. Después, cuando él toma confianza y se pone por delante en el score, se hace cada vez más difícil”.

Novak Djokovic resolvió con poco desgaste su duelo ante Schwartzman y ya está en los cuartos de final
CHRISTOPHE ARCHAMBAULT


Novak Djokovic resolvió con poco desgaste su duelo ante Schwartzman y ya está en los cuartos de final (CHRISTOPHE ARCHAMBAULT/)

Antes del encuentro con la prensa, Schwartzman se encontró en un pasillo con el exdelantero Thierry Henry, que siguió su partido con Djokovic y lo saludó. “Sí, me dijo que vio nuestro encuentro y que ahora se iba con la selección de Bélgica –es asistente del director técnico Roberto Martínez-, así que cruzamos unas pocas palabras y le pedí una foto”, contó Schwartzman, que encima se quedó con las ganas de seguir en el Stade de France la final de la Champions League entre Real Madrid y Liverpool. “No pude ir. Tenía las ganas, y me consiguieron las entradas, pero me pusieron en el partido del segundo turno y tenía que estar en el club antes de las 9 de la mañana. Supongo que la ubicación era espectacular, pero no podía estar, así que se las devolví a la persona que me la ofreció”, comentó el Peque.

En lo numérico, la derrota en los octavos de final no afectará mucho el ranking de Schwartzman, e incluso hasta podría ganar algún puesto, de acuerdo con los resultados del resto. Pero, desde luego, no le gustó ni un poco perder por séptima vez seguida con Djokovic. “Ya estaba con bronca durante el partido. En los descansos me golpeaba las piernas porque sentía que me faltaba potencia y energía. Es obvio que uno se enoja porque, cuando te enfrentás a un rival de esta magnitud hay que estar al ciento por ciento, y quería encontrar eso y eso hoy me costó”, dijo al respecto.

Schwartzman y su revés; el argentino no pudo superar el inmenso escollo que significó el número 1 del mundo
Michel Euler


Schwartzman y su revés; el argentino no pudo superar el inmenso escollo que significó el número 1 del mundo (Michel Euler/)

Ahora, el Peque regresará por unos pocos días a la Argentina. Regresará al tour en los torneos de Queens (desde el 13 de junio) y en Eastbourne (a partir del 20), y mientras tanto evaluará si juega en Wimbledon o no. Si bien no confirmó su participación, es posible que se incline por acudir al All England. “Voy a volver rápido a Europa para prepararme. Jugar en pasto me gusta y en los últimos años me sentí mejor, más cómodo. Lo de Wimbledon toca esperar. Ahora deben estar viendo qué decisiones se toman”, cerró el Peque.